Después de haber llegado por fin hasta abajo y tocar tierra plana, Amber insistió en que quería bajarse de los brazos de Maximilian con el pretexto de que él estaría demasiado cansado después de tener que cargarla durante todo ese inmensamente largo tramo de escaleras.
Así que al joven no le quedó de otra que dejarla bajar, pero a cambio continuo sosteniendo su mano con delicadeza mientras el caminaba frente a ella, guiando el camino débilmente iluminado.
Solo entonces Amber noto el tímido sonrojo que comenzaba en las orejas del chico y bajaba por su cuello.
Así que ella pensó que a pesar de verse ahora tan valiente y confiable, Maximilian continuaba siendo su pequeño Duque, eso no había cambiado.
Y una sonrisa dulce se extendió en los labios de la joven mientras miraba la mano que su alteza estaba sosteniendo tan cálidamente.
Aquella mano, antes un poco más pequeña que la suya, ahora era más grande y se había llenado de callos causados por haber sostenido constantemente una espada.
"Amber... Huyamos juntos"
La voz de Maximilian corto abruptamente todo pensamiento, dejándola aturdida, y ambos detuvieron sus pasos en seco.
La mano que la sostenía se apretó inconscientemente, pero él no se atrevió a volver el rostro para mirarla, temiendo que ella se negara.
"Ya no soy un niño incapaz de protegerte como en el pasado, ahora soy un mago poderoso y un espadachín decente.
Este incidente me ha hecho darme cuenta de que ya no puedo dejar tu seguridad a cargo de ninguna otra persona, Amber"
Maximilian estaba temblando, ella lo pudo sentir a través de su palma y sus ojos se llenaron de lágrimas... Ni siquiera podría imaginar cuan impotente se habría sentido Maximilian en el pasado a causa de aquél incidente con el Duque de Argen.
Pero en ese entonces, él era tan solo un niño, fue ella quien falló al no poder mantenerlo ignorante de toda esa situación.
"Por favor... Ven conmigo"
Suplicó nuevamente, y el silencio se hizo presente en aquel pasillo de tierra durante lo que pareció ser una eternidad.
Amber mentiría si dijera que no se sentía tentada, sobre todo cuando le vino a la mente aquellas dulces fantasías que alguna vez habían imaginado ambos.
Una vida tranquila y sencilla, una cabaña en un pueblo pequeño, viviendo juntos como una verdadera familia... En algún momento ese había sido un sueño verdaderamente hermoso.
Era tentador sobre todo ahora, después de haber vivido huyendo y con miedo durante tanto tiempo.
Pero, ella no podía ser tan impulsiva como él.
"No puedes dejar la academia real, necesitas estudiar mucho..."
Maximilian se giró para abrazarla por sorpresa y se negó a permitiré ver su rostro, mientras continuaba sujetando su mano y descansaba su cabeza sobre el delgado hombro de la joven.
"Tu sabes que solo estoy ahí porque ese fue tu pedido. Por qué dijiste que esta sería la única manera de escapar de las garras de la Duquesa. Pero ya no necesito seguir en la academia, Amber"
"Todos los nobles necesitan obtener su certificado de graduación de la academia real para poder heredar su título..."
"¡No me interesa heredar ningún título!, tú eres la única que me importa en este mundo. No sabes cuanto miedo sentí hoy al creer que te perdería para siempre"
"..."
Amber se quedó callada nuevamente y Maximilian apretó los labios intentando recuperar la compostura.
"Además, tú y yo sabemos que la Duquesa jamás permitirá que yo herede nada"
"No quiero que nadie te persiga como a mí, Maximilian. Eres el mago más poderoso del reino, su majestad jamás te dejará en paz"
"Refugiémonos en otro reino, entonces. Ahí no importa cuanto poder tenga, sus garras no podrán alcanzarnos"
"¡No! ¡No vayamos a ningún reino vecino!"
Amber de pronto estaba anormalmente nerviosa
"¿Por qué?
La voz baja de Maximilian parecía estar cargada de tristeza.
Amber abrazó dulcemente al chico en sus brazos, correspondiendo al cálido abrazo que le había brindado.
-Realmente ha crecido tanto como media cabeza más alto-
Pensó y se limpió las lágrimas con dedos.
Según la novela, en cuatro años más una gran guerra estallará en la frontera con el reino vecino. Entonces, dicho reino se habrá vuelto un lugar repleto de humanos mutados y monstruos, gracias a la magia oscura.
Pero el problema base no iniciaría en ese momento.
La novela que leyó en la vida pasada no era muy específica acerca de como inició todo, o como fue detenido al final, pero sí señalaba que fue alrededor de estas fechas cuando comenzó el rumor del regreso de la magua oscura en otros reinos.
En la novela, Will era quien lo descubría mientras buscaba uno de los libros de magia prohibida para Maximilian.
Lo que era seguro es que sería demasiado peligroso mudarse a otros reinos; sobre todo el reino vecino, el cual era un lugar prácticamente sin ley, y que era un paso obligado para ir a otros reinos.
Y aunque lograran atravesar ese reino y huían a otras naciones, Amber no podía estar segura de lo que ocurriría en el futuro.
Pero era seguro que quedarse en este reino siempre sería la mejor opción para evitar la magia oscura y los embates de la guerra próxima.
Al menos conocía lo que ocurriría con este reino gracias a la novela.
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El regreso de la extra
RomanceAmber Vilches, luego de recordar su vida como Han Ji-a, se da cuenta de que tan solo es una extra dentro de una novela, un personaje que únicamente sirvió para marcar de manera trágica la infancia del villano, Maximilian Arges. Un desafortunado vill...