El regreso de la extra

Capítulo 152

Por su parte, Amber había hecho un par de amigos nuevos durante estos meses. 

Uno era Phil, el encargado de surtir la despensa en su área del palacio cada quince días, un adolescente pelirrojo y pecoso; y la otra era Liss, una criada de limpieza cuyo pasatiempo era escuchar y contar rumores, y que tenía el talento para hablar por horas sin cansarse o aburrirse.

De esta última siempre se podían obtener las noticias más recientes y confiables del palacio, lo único negativo era que una vez que Liss comenzaba a hablar era difícil hacer que se detuviera.

Pero ciertamente su talento para recabar información era notable. Amber incluso pensó que podría estar ganando mucho dinero si tan solo trabajara para Will en vez de ser una simple criada.

Fue Liss quien le dijo aquella mañana que se acababa de confirmar el embarazo de su alteza, la Duquesa de Argen, y que su majestad estaba tan feliz que había premiado con treinta monedas de oro a todos los criados que estuvieron presentes cuando recibió las noticias.

"Oh, Verónica. Ojalá hubiéramos estado ahí en ese momento, nos perdimos algo tan bueno"

Suspiró Liss, decepcionada.

"Sí"

"¿Sabes? se dice que durante estos últimos meses, su excelencia el Duque, ha estado más enamorado de su Alteza la Duquesa, que como nunca antes.

Su alteza la Duquesa ha venido varias veces al palacio para presumir su reciente felicidad con su majestad la reina, y ahora llega una bendición más a su vida en forma de un hijo.

La Duquesa de Argen es una mujer tan afortunada"

"Sí"

Amber no quería saber nada de esas personas, solo esperaba que los dejaran en paz y nunca topárselos nuevamente en esta vida. Pero cuando escuchó sobre el embarazo de la Duquesa no pudo evitar pensar en su propio destino en la novela. 

Si ella no hubiera recordado su vida anterior en aquel entonces, la que hubiera llevado al hijo del Duque en el vientre sería ella, y luego habría muerto miserablemente.

"Estoy segura de que tú también has escuchado ese rumor" 

Continuó Liss, bajando la voz

"Ese que dice que el Duque de Argen había cometido un error grave que enfureció a su majestad, y que por este lo sentenció a cumplir un arresto domiciliario.

Dicen que esta era la razón por la que el Duque ya no sale de la casa Ducal.

Se especula que todo se debió a un desacuerdo sobre la propiedad de una de las minas de piedras de Maná del reino y..."

Amber dejó de prestar atención a la cháchara de Liss cuando ella tocó este tema.

El reino podría especular muchas cosas, pero ella sabía la verdadera razón. 

Este había sido el "gran castigo" que le impuso su majestad al Duque por haber intentado asesinar a Maximilian, al mejor mago del imperio, su sobrino y la última sangre de los Argen.

Por haberlo herido a tal grado y dejarlo en coma, así fue como hizo pagar a ese hombre repugnante.

Amber apretó los labios, intentando contener sus emociones.

Durante estos meses siempre pensó que cuando Maximilian se recuperara de sus heridas y despertara, le pediría que huyeran juntos a algún reino lejano para convertirse una verdadera pareja en cuanto él cumpliera la mayoría de edad, alejándose de todo, sobre todo de la guerra que se aproximaba. 

A ella no le importaba como se viera, o si realmente perdió toda su magia, estaba decidida a quedarse a su lado siempre, sin importar nada.

Amber no planeaba contarle nada del asunto a Maximilian, pero cuando regresó, luego de haber hablado con Liss, su alteza el príncipe ya estaba en la habitación. Debido a su tono de voz era obvio que estaba furioso, y, como siempre que necesitaba desahogarse, darle esa noticia a su joven Duque fue lo primero que hizo.

"¡¿Puedes creerlo?!" Se quejó "Esos dos continúan viviendo sus vidas como si nada mientras tú aún estás tendido en esta cama, viéndote como una momia. Mi padre está totalmente loco. Él dice que no pudo castigar adecuadamente al Duque porque tus heridas ocurrieron durante un duelo. ¡¿Qué duelo?!.

Si realmente hubiera sido un duelo, mi padre no habría ocultado lo que realmente ocurrió a todos, y no habría dicho que estás así por un accidente mientras experimentabas con magia"

Amber, detrás de la puerta, apretó los libros en sus brazos y decidió volver a la cocina, no podía continuar escuchando las palabras que le decía el príncipe heredero a Maximilian, si la atrapaba no solo sería vergonzoso, también podría causar la ira del príncipe.

Nezar no sabía que alguien había estado escuchado detrás de la puerta entreabierta, pero Maximilian sí. Ahora identificaba el sonido de los pasos y la respiración suave de la mujer que amaba. 

El soliloquio de Nezar lo estaba irritando. A él no le importaba lo que hicieran esos dos, lo más importante era que Amber no se atrevía a entrar a la habitación mientras su primo no se fuera.

Y, sin embargo, el príncipe heredero continuaba.

"Ese hombre dañó a un miembro de la familia real, pero por mi tía mi padre continúa tolerándolo una y otra vez. 

 Y ¿sabes ahora qué me ha dicho?.

Planea otorgarle el perdón real a ese hombre, una vez que nazca el hijo de mi tía. 

Según mi padre, el Duque hará una contribución al reino al haber engendrado un hijo más de sangre real. 

A mí no me engaña, la tía Cecilia al fin ha logrado convencer a mi padre para que levante el castigo del Duque, y solo estaban buscando una excusa.

Estoy muy molesto.

No te preocupes, Max... haré todo lo posible para evitar que ese loco ande libre en las calles nuevamente"

Aseguró el chico, apretando los puños. 

Esta última noticia realmente había preocupado a Maximilian. 

Él también sabía que el Duque estaba encerrado en la mansión de la Duquesa y vigilado por los guardias de las sombras de su majestad, Nezar se lo había contado en una de sus visitas. 

Y este era el motivo por el que continuaba sintiéndose seguro de que Amber estaría a salvo aunque se quedara a su lado en el palacio.

Pero si ese hombre salía de su encierro, ¿Qué pasaba si podía reconocer a la joven?. 

Él aún no se había recuperado, definitivamente no podría protegerla.

Lo peor es que no había mucho que pudiese hacer con el poco maná que había logrado reunir, ni siquiera podría enviar un mensaje a Will para que lo ayudara con este asunto.

Maximilian se sentía impotente, pero por ahora solo podría confiar en las capacidades de su primo.

Si Nezar realmente lograba hacer que ese maldito Duque no pudiera abandonar su encierro hasta que él se recuperara, Maximilian se comprometió a devolverle el favor derrotando el peligro que se acercaba al reino.

Magia oscura... en la vida anterior había descubierto como vencerla, así que esta vez no sería tan difícil hacerlo.