7.17 Cuñadas o hermanas

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El príncipe Dor llegó a tiempo para ver el caos que había producido su hermana y resopló – señora Esmeralda, agradecemos su visita, veo que ya conoció a mi concubina, Ceci, ella es la dueña del salón Esmeralda y sus dos sirvientes, serán nuestros invitados – quiso darle su lugar a su concubina para evitar que ella causara problemas y recordarle a su hermana que no debía ser agresiva.

Ceci sonrió – como dijo mi esposo, agradecemos su visita y su contribución a nuestra tribu, puedo preguntar, ¿a qué debemos esta visita?

– Quería una audiencia privada con el príncipe.

En esa ocasión, casi todos lo miraron, algunos felices, otros molestos – soy un pobre inocente que no quiere convertirse en piedra antes de embarazarse – pensó Avis.

El interior de la cabaña era rustico y las paredes estaban tapizadas de trofeos, cabezas de leones, osos, lobos y tigres.

– Si Liam se lo propusiera, mataría más bestias – pensó mientras los miraba.

– Este lugar es lo bastante privado, está lejos de la puerta principal donde mi hermana muy seguramente tendrá la oreja pegada a la pared – dijo el príncipe Dor bajando la mirada – me disculpo por su forma de actuar, es muy impulsiva y usted ha capturado su imaginación, está decidida a convertirla en su cuñada.

– Todavía podemos ser familiares, tengo varios hermanos muy atractivos.

El príncipe entendió que no tenía intenciones de convertirse en su esposa y no lo discutió, desde el comienzo un compromiso entre ambos fue idea de su hermana, no de él – lo consideraré, señora Esmeralda, ¿cuál es el motivo de su visita?

Respiró profundamente – solo para aclarar, ustedes están en deuda conmigo, si no hubiera curado al hombre que llevaron a mi salón, estaría muerto antes de que terminara el año, quiero estar seguro de que lo comprende.

– Lo entiendo y estoy al tanto de ese hecho.

– Bien – respiró una vez más llenando sus pulmones de aire – quiero su permiso para entrar en las cuevas del bosque sombrío.

Su petición dejó en blanco la mente del príncipe Dor – ese es, territorio muy peligroso – frunció el entrecejo.

– Lo sé, por eso tengo un esclavo, es muy grande y muy fuerte, y muy resistente, puede cargarme sin problemas y aguantar toda la noche.

El príncipe mantuvo su expresión compungida – no lo ha entendido, el bosque sombrío es el territorio de la antigua tribu de arañas, es un lugar muy peligroso.

La tribu de arañas se podía considerar parte del folklor y una historia para contarle a los niños antes de dormir. Todo comenzó cuando una reina araña anunció el final de las tribus y el ascenso de un demonio al que llamó ¡serpiente de dos cabezas!, ese misterioso demonio destruiría su mundo, mataría tanto a humanos como a hombres–bestia y convertiría el planeta en un desierto desolado.

Tal demonio, jamás llegó.

Lo que sí pasó, fue que la reina araña enloqueció y comenzó a devorar a los bebes de su tribu, las otras tribus conocían y condenaban su comportamiento, pero más importante que los homicidios de infantes era la independencia y supremacía de cada tribu y sin importar a cuántos niños matara, nadie la detuvo. La tribu de arañas fue erradicada por la misma reina que juró protegerlos de un demonio imaginario.

Desde entonces el bosque sombrío fue cerrado y la tribu de tigres tomó la responsabilidad de cuidar sus puertas, nadie podía entrar sin su permiso y nadie podía abrirse paso entre los laberintos y la oscuridad sin su guía.

No soy un virus, soy un acosador (primera parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora