Capítulo 57 • Eres un ganador

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El partido inaugural de la Copa de Quidditch llegó el primer fin de semana de noviembre, Gryffindor contra Slytherin.

Isabella había asistido a cada entrenamiento de Slytherin para apoyar a Draco, quien definitivamente iba darlo todo para atrapar la snitch. Esta vez nadie lo impediría porque esta vez tenía una hermosa motivación: Isabella, quien siempre había querido verlo jugar y hoy por fin iba a estar en uno de sus partidos, pero no sería la única.
 
Severus llevaba a Isabella y Draco a su oficina, ya que ahí los esperaba una persona muy importante pero ellos no sabían nada.

— Falta poco para que inicie el partido, padrino —le dice Draco.

— Estaremos a tiempo ahí —le dijo Severus.

— ¿Sucede algo, papá? —le pregunta Isabella.

— No se alarmen, no es nada malo. Al contrario, alegrará su día —dijo Severus.

— ¿Por qué tanto misterio? —pregunta Draco.

— Ya basta de preguntas. Ahora entren —les indicó Severus.

Cuando Isabella y Draco entraron a la oficina de Severus, ahí estaba Narcissa Malfoy. Vestida con una elegante túnica negra y con una gran sonrisa.
Narcissa por primera vez había decidido ir al colegio a ver jugar a su hijo en su partido de Quidditch, a pesar de las muchas negativas de su marido.

— ¡Madre! —exclamó Draco.

— ¡Cariño! —le dijo Narcissa.

— ¿Viniste a verme jugar? —pregunta Draco.

— Por supuesto que sí, Draco —dijo Narcissa.

— Que bueno que viniste, Cissy —sonreía Isabella.

— Juntas tenemos que vitorear a Draco hoy, mi niña —le dijo Narcissa.

— Claro que sí, Cissy —dijo Isabella.

— Pero antes quiero que me den un gran abrazo —les sonrió Narcissa.

Ambos se acercaron a Narcissa y la abrazaron. Permanecieron por unos segundos así, Draco estaba tan feliz y no quería defraudarlas.
Cuando se separaron del abrazo, Draco tenía una gran sonrisa en el rostro.

— Estoy muy feliz de que estés aquí, madre —le dijo Draco.

En ese momento, Severus volvió a aparecerse por la puerta. Faltaba muy poco para que inicie el partido y ya debían ir al campo de Quidditch.

— Se hace tarde, Draco debes ir a los vestuarios ya —le dijo Severus.

— Ve, cariño. Isa, Severus y yo estaremos entre la audiencia —le dijo Narcissa.

— Gracias por estar conmigo —sonreía Draco.

Siempre estaré contigo • Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora