Fury Avenger (Trilogía completa)

Capítulo 15. Lya

Meto una gomita dulce a mi boca y mastico alegremente mientras observo a Grant Rogers recibir una paliza de parte de Itzel y Skylar. Es entretenido ver a un hombre alto, musculoso y rápido ser atacado por dos mujeres adultas que se mueven a la velocidad de la luz. Si fueran personajes literarios, podrían ser Cazadoras de Sombras.

Los ojos azules de Grant se encuentran con los míos. Le doy una sonrisa animada y ahogo una carcajada cuando Itzel le da una patada en el trasero.

—Atención, Grant. Puedes ver a tu novia todo lo que quieras después de que entrenes —dice Itzel usando un tono de voz firme y estricto.

Grant se queja y toca su trasero con una mueca de dolor. —Auch.

Skylar amarra su largo cabello claro en una coleta alta. Ella me agrada. Es pacífica, inteligente, paciente y es la única mujer que puede dejar a Tony sin palabras; Skylar Stark es la Gerente General de Industrias Stark y es el gran amor de Riley Drumond, uno de los Agentes con más años en la Agencia. Riley me entrenó en el arte de hackear los sistemas de cualquier lugar del mundo. Skylar me enseñó a mantener una mente fría en combate. Itzel me enseñó -además de una colección de ofensas para el oponente- cómo usar una pistola eléctrica sin morir rostizada.

—Deja de patearle el trasero a Grant, It —pide Skylar—. Es hora de entrenar.

Dicho esto, los antebrazos de la hija de Tony se encienden en llamas rojas y naranjas. Skylar es una Elementarista, una de las pocas que quedan con vida y activas para SHIELD. Mamá me contó que el fuego fue lo que más le costó controlar, y que ahora es su elemento favorito.

—Uoh, no planeas quemarme el trasero, ¿verdad? Recuerda que mi madre es tu mejor amiga... —dice Grant, sorprendido de ver cómo el fuego no consume la piel pálida de la castaña-rubia.

—Cariño, una de las reglas de los entrenadores del Sistema es que no hay favores ni familia. En este instante, eres un Agente Novato, y te entrenaremos para que asciendas a Activo —le dice Skylar con dulzura.

Meto otra gomita. Esto se va a poner muy interesante.

Sky dispara una bola de fuego, y Grant la esquiva con un salto y un grito ahogado. Itzel se sienta a mi lado y le ofrezco gomitas, ella acepta y tararea alegre.

—A que Sky le patea el trasero a Grant —dice Itzel.

—A que Grant se lo patea a Sky —digo en respuesta.

Comparto una mirada con Itzel y luego veo a Grant.

—¡Vamos, Grant! ¡Tú sí puedes! —le digo al moreno.

Él me ve rápidamente y contraataca a Sky. La magnate chilla, sorprendida, y le devuelve la cortesía a su protegido. Una ráfaga de fuego es disparada hacia Grant, quien lleva sus antebrazos al frente de su cara en forma de escudo.

Mi boca cae abierta en cuanto veo una pared de metal formarse entre él y el fuego. Sky baja sus brazos, Grant aparta los antebrazos de su cara.

—Santo pantalón —dice Itzel.

Dejo las gomitas a un lado y salto para correr hacia Grant, quien está sorprendido. Chillo, emocionada, y salto para abrazarlo; rodeo su cintura con mis piernas y envuelvo mis brazos en su cuello, sus brazos me agarran de la cintura.

—¡Lo hiciste! —le digo, completamente emocionada.

Orgullosa de él, beso sus mejillas, frente y labios, ignorando por completo a Itzel y Skylar. Grant se ríe ante mi arranque de felicidad. En la semana que tenemos de estar juntos, no me había puesto tan loca de la felicidad ni saltado sobre él. Lo bueno es que mi herida ya se ha cerrado del todo, pero no puedo entrenar aún por órdenes de Maya, quien quiere que esté cien por ciento recuperada.