Capítulo 10. Naylee

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Sostengo el arco con firmeza y entrecierro mis ojos para enfocar bien la diana. Cuando lo logro, inhalo, sostengo el aire y dejo ir la flecha. Esta sale disparada hacia la diana a cincuenta metros de distancia.

Observo atentamente y esta se clava en el centro del círculo del centro. Hago un pequeño baile de victoria y sonrío con felicidad. Le he ganado a Fandral en su ridículo reto de arquería.

—Muy bien, ahora es turno de que combatas con Lady Sif —dice Fandral, malhumorado por la pérdida.

Ambas compartimos una mirada y bajo mis ojos a mi vestido morado oscuro. —No estoy vestida para combatir, y no quiero hacerlo. Ella me agrada.

Sif asiente. —Lo mismo. Por fin encuentro a mi compañera —dice ella.

Ambas nos reímos y dejo el arco donde estaba.

Veo alrededor, ya ha pasado la hora del almuerzo, y desde la mañana no veo a Brynjar y Hogun. Es extraño, ya que en la última semana él ha estado muy cerca a mí; no es que me importe ni nada, pero como que no es lo mismo si ese idiota con brazos musculosos no anda merodeando cerca.

Me aburro fácilmente y camino hacia unas bancas de granito para observar cómo Sif y Fandral se ponen a lanzar flechas con velocidad máxima. Juego con las puntas de mi cabello y me remuevo, un poco incómoda, ante la sensación fría que recorre mi estómago.

He estado sintiendo que algo no va muy bien que digamos desde hace un par de días, pero luego de haber confirmado que todos en casa estaban bien y que no estaba enferma ni nada de eso, decidí ignorarlo. Pero ahora es un poco más fuerte. Extraño.

La sensación desaparece y suspiro.

Me siento sola en este mundo desconocido. Extraño a mi familia y amigos, y desearía con todo mi corazón estar en casa viendo The Walking Dead con mamá mientras comemos helado de fresa y papá dibuja.  

Incluso extraño a Danielle Cage, la hija de Luke y Jessica. Aunque esa mocosa no sea santa de mi devoción. Creo que no le agrado porque ella como que le gusta Theo y el muy idiota suele andar detrás mío para fastidiarme la existencia. Solía decirme que iba a terminar casándome con Brynjar.

Idiota.

Me pongo de pie y camino hacia el interior del castillo, subo las escaleras hacia la biblioteca. Si estás aburrida, lee.

La gran mayoría de los libros están en noruego antiguo –idioma que no sabía que Brynjar podía hablar a la perfección– pero hay algunos en español, por lo que agarro uno de ellos. Habla sobre la familia de Odín. Da una descripción perfecta de Thor, Loki y Frigga; pasando por el amorío entre Thor y Jane y el hijo que ambos tuvieron hace veintiún años.

Me siento en uno de los sofás cómodos y observo el dibujo que hay sobre Brynjar. Ese dibujo no le hace justicia.

Paso las páginas y leo la historia de Lady Sif, Volstagg, Hogul y Fandral. 

Brynjar me había hablado de este libro. Es un libro mágico, según sus palabras. Me dijo que este libro siente el alma de la persona que lo lee, y que sus palabras se mueven al idioma que habla la persona en cuestión; además de eso, la historia está cambiando constantemente, ya que va agregando hechos importantes de los miembros de la familia real de Asgard.

Yo digo que esta mierda es espeluznante.

Los minutos pasan mientras me sumerjo en la historia de Loki y sus orígenes. Creo que como que me agradaba más cuando era un villano sexy; no es que no me agrade ahora que es bueno y deja que Tony lo moleste, sino que que se me hacía interesante este rival. Leo sobre el apoyo que le dio a los Vengadores para la época en la que Grant tenía mi edad. En la información de su vida personal-personal, sale que está casado con Skylar Stark, que su primogénita es Hela –la reina de Hel– y que tiene un hijo en común con Sky, quien es Theodore Lokison-Stark. Yo conozco más a sus hijos como Kate y Theo Stark.

Fury Avenger (Trilogía completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora