Noche Inolvidable

Capítulo 193

Narra Yaishka:
Nunca le había contado a alguien la historia de la pérdida de mis padres, ni Omar conoce esta historia. No tenía permitido preguntar por ellos.
Zab: no tengo palabras para hacer que te sientas mejor, pero gracias por confiar en mí.
Yai: gracias por escucharme. Me hace bien soltar un poco la carga. Nunca había podido hablar de esto con nadie, ni con Ian.
Zab: aquí estoy para ti y te amo.
Yai: te amo Zabdiel - dije y nos acomodamos para dormir.

Siguiente día lunes...
Desperté temprano a dar leche a Santi, preparé desayuno y llevé a Rose a la escuela mientras Zab cuidaba de Santi. En el camino de regreso a casa recibí una llamada...
Yai: Hola
Ian: hermana
Yai: Ian, ¿todo bien?
Ian: sí ¿y tú? ¿estás en la casa?
Yai: no, ya voy de regreso. Estaba llevando a Rose.
Ian: tengo algo bien importante que decirte te veo en la casa.
Yai: bien, allá está Zab con Santi, bye
Ian: bye.
Fin de la llamada.

Llegué a la casa lo más rápido que pude, Ian me esperaba en la sala. Lo saludé y comenzamos a hablar.
Yai: ¿qué es eso tan importante que me vas a decir?
Ian: hermana, se trata de nuestra madre.
Yai: Ian...
Ian: Yai, mamá llegó esta mañana a casa, a nuestra casa. Natalia le abrió la puerta. Ella preguntó por nosotros y cuando la vi... (llora) Yai era mamá.
Yai: no puedo creerlo, pero ¿por qué después de tantos años? ¿por qué no nos buscó antes?
Ian: le pregunté, pero no me respondió nada, solo me dejó esta dirección y me dijo que fueramos a verla juntos, que respondería todas nuestras preguntas.
Yai: no estoy lista Ian, tengo miedo.
Ian: yo también, pero quiero respuestas al igual que tú y no las tendremos si no vamos.
Yai: Bueno en ese caso necesito que Nati me cuide a Santi para que Zab nos acompañe.
Ian: perfecto yo la llamo para que venga - dijo y se retiró a hablar por teléfono.

Sigo sin creerlo, esto debe ser una pesadilla. Me quedé unos minutos sentada en el sillón asimilando la situación. Salí del trance con un mega susto cuando Zab me habló.
Zab: Yai...
Yai: (se asusta)
Zab: lo siento amor ¿estás bien?
Yai: no Zab, quédate conmigo, no me dejes sola.
Zab: no te dejaré sola, pero Santi necesita que le cambies el pañal.