Noche Inolvidable

Capítulo 45

Narra Yaishka:
Erick sacó su guitarra y los chicos empezaron a cantar, mientras Rose me ayudaba a bañarme, sentí la puerta abrirse. Cuando salí Noriel estaba allí también y Omar estaba hartísimo de odio, pero no me importa, no le pedí que viniera.
Yai: Noriel, tú aquí...
Noriel: mamita ¿estás bien?
Yai: sí estoy bien - dije acercándome a darle un abrazo (susurró en mi oído)
Noriel: ¿cuándo repetimos? - dijo y el hijo de perra me dio un beso en la boca que Omar vió a la perfección y también los chicos.
Yai: NORIEL... ¿qué haces? No te lo permito.
Noriel: lo siento.

Me fui a la cama, porque ya me dolía la pierna y Zabdiel se puso en mi lado derecho y tomando mi mano comenzó a cantar Fan Enamorada y yo a llorar, luego Chris vino por el lado izquierdo y me acariciaba el pelo. Todos solo escuchaban y miraban como los 5 chicos me hacían felíz. Ian, Noriel, Omar y Rose salieron del cuarto y me dejaron sola con los nenes.
Yai: gracias chicos por hacerme felíz, por estar aquí, por existir...
Chris: de nada bella, oye ¿decifraste el mensaje oculto de los corazones?
Yai: no...
Chris: (rie) tienes trabajo entonces.
Yai: luego le dedico tiempo, te lo prometo.
Joel: éste Chris siempre con sus trucos - dijo y Vélez soltó una de sus carcajadas, que se escuchan por todo el hospital.
Yai: me encanta cuando te ríes así Vélez.
Chris: gracias supongo - dijo y se puso rojo.
Yai: te amo tanto, es que siempre me quitas las tristezas con tus cosas - dije mientras recordaba lo que Omar me había dicho en la madrugada.
Chris: ey ¿qué pasa? No te pongas triste.
Yai: perdonen, pero no puedo evitarlo.
Zab: disculpa que pregunte, pero tiene que ver con Omar ¿verdad?
Yai: no te preocupes Zabdi y sí, tiene que ver con él, no quiero darles problemas, pero discutimos muy feo en la madrugada y no tengo pensado perdonarlo por lo que dijo.
Zab: no te pediré que nos cuentes, pero pienso que deben hablar cuando ambos estén listos.
Yai: gracias Zabdiel, te amo - dije y Zabdi me dio un beso en la frente y me abrazó, podía sentir las manos de todos dándome soporte y me sentía como una reina. Sé que también le fallé a Omar, pero la herida de sus palabras duele.