Adentrarse en Busan era muy peligroso, por esa razón la primera parada iba a ser en un pueblo cercano. La gasolina no alcanzaba para recorrer todos los pueblos de los alrededores pero sí había suficiente para desviarse hacia ese sitio, situado muy cerca de la gran ciudad.
Si allí no conseguían los víveres que buscaban, irían a las afueras, a un centro comercial muy conocido de la zona. En el caso de que tampoco tuvieran suerte en ese lugar, entonces sí tendrían que hacer lo que nadie quería e ir a Busan.
Caminar hasta la casa de la montaña había sido un recorrido largo y pesado. Volver por ese mismo camino subidos a un coche resultaba muy diferente. No tardaron ni veinte minutos en dejar el bosque atrás.
Yoongi tuvo una sensación agridulce al notar el asfalto bajo las ruedas. Después de casi dos meses aislados en la montaña anhelaba volver a la ciudad, pero dadas las circunstancias, la ciudad con la que él soñaba probablemente ya no existía.
Jimin estaba sentado a su lado, indicándole hacia donde debía ir mientras Jungkook miraba pensativo por la ventanilla.
Dentro del bosque no se toparon con muchos infectados pero por la carretera el número de ellos era mucho mayor. Ese detalle dejó al grupo un tanto intranquilo. Cuantos más se encontraban, más probabilidades existían de que la ciudad hubiera caído.
A pesar de la incertidumbre todos seguían manteniendo la esperanza de que el ejército coreano siguiera resistiendo.
Cuando llegaron al pueblo, Yoongi bajó la velocidad del vehículo. El mayor nunca había estado allí, no conocía ese lugar ni sabía cómo era antes del ataque de los infectados.
Para Jimin y Jungkook era diferente. Habían visitado muchas veces ese pueblo y albergaban grandes recuerdos de las tardes que habían pasado allí con su abuelo.
No era un sitio atractivo para el turismo por sus establecimientos de ocio, sino por las casas de estilo tradicional que atraían a las personas desde todas las partes del país. Esas casas antiguas le daban un encanto especial, un encanto único.
—No se ve ni un alma— dijo Jungkook mirando por la ventanilla.
Las calles estaban completamente vacías. No se oía ningún ruido, no más allá del viento golpeando contra los árboles.
Al pasar pudieron ver algunas casas con las ventanas rotas y las puertas abiertas, otras en cambio tenían las ventanas protegidas con maderas y estaban cerradas a cal y canto.
Jungkook se fijó en una hilera de viviendas quemadas. En esa misma calle había varios vehículos calcinados. De alguna forma debieron conseguir apagar el fuego, de lo contrario el pueblo habría sucumbido entre las llamas.
—Parece un pueblo fantasma— comentó Yoongi.
Su novio le seguía indicando hacia donde debía conducir. El mayor iba a velocidad reducida, atento no solo a lo que tenía delante sino a lo que podía aparecer por los costados. Los infectados no eran el único enemigo y eso lo tenían muy claro.
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Evanescente | ¹
HorrorPark Jimin y Park Jungkook han ido a pasar el fin de semana a Daegu. Ambos hermanos están disfrutando de su estancia en la ciudad cuando un terrible suceso les obliga a luchar por sus vidas. ▪️Pareja principal: MYG + PJM | KTH + JJK ▪️Género: Dram...