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Jimin estaba boca abajo, con media cara pegada a la almohada, durmiendo profundamente mientras Yoongi le observaba a su lado. El mayor no quería despertarle, estaba convencido de que llevaba días sin dormir pero no podía seguir manteniendo las manos quietas.

Había pasado media hora mirando cómo dormía, contemplando cada lugar de su cuerpo desnudo, esperando a que abriera los ojos y le mirase con una de sus dulces sonrisas. Estaba ansioso por volver a escuchar su voz, a probar su boca y con el paso de los minutos ese deseo iba aumentando desesperadamente.

Yoongi trazó círculos sobre la piel de Jimin, deslizando los dedos por su espalda, creando a su paso diferentes figuras imaginarias. Ese pequeño contacto creó un cosquilleo en el rubio, haciéndole mover la cabeza y dejando su boca expuesta.

Yoongi aprovechó ese instante para plantar un beso suave sobre los labios gruesos del muchacho. Al principio no obtuvo respuesta de él pero terminó logrando su objetivo al sentir cómo Jimin le correspondía al beso.

—¿Piensas asaltarme mientras duermo?— preguntó abriendo un ojo —¿Quién es ahora el degenerado?

—¿Esas son formas de darle los buenos días a tu novio?

—Se me ocurren unas cuantas formas de darte los buenos días— contestó mostrando su sonrisa más pícara.

—¿Ah, sí?— Yoongi deslizó la mano por la espalda del joven hasta llegar a su trasero— ¿Por qué no me las muestras?— preguntó con voz profunda.

Jimin le agarró de la barbilla y le miró fijamente a los ojos. Amaba el sonido de su voz, a cualquier hora del día pero el tono que adquiría por las mañanas le resultaba especialmente sensual.

—¿Cuánto tiempo llevas esperando?

—Demasiado...

Jimin se incorporó un poco, lo suficiente para besar sus labios y empujarlo suavemente sobre el colchón.

—Pobrecito— le mordisqueó el labio inferior —Tu agonía ha terminado. Voy a cuidar de ti.

✦✦✦  


Yoongi jadeó al sentir la mano de su novio sobre su erección. El rubio acarició el pene con suma delicadeza mientras besaba su pecho con paciencia, dedicándole todo el tiempo del mundo. Bajó hacia su obligo y jugueteó con la lengua, lamiendo y chupando sin dejar de masturbarle con suavidad.

—Jiminie... Más fuerte...

—No— le sonrió descaradamente —Mi mano no es la que va a hacer el trabajo.

Yoongi se mordió el labio al ver la boca del joven cerca de su pene.

—Definitivamente he debido salvar el país en mi vida anterior.

Jimin iba a lamerlo pero sus palabras le hicieron reír y su risa contagiosa hizo sonreír a Yoongi.

—Entonces debería darte las gracias por salvarnos— le guiñó un ojo.

Yoongi gimió al sentir cómo todo su falo desaparecía dentro de la boca de Jimin. Le encantaba el sexo oral, sobre todo por las mañanas y a su novio se le daba francamente bien. Siempre sabía cómo complacerle.

✦✦✦  

—¿Hyung?

Ninguno de los dos se inmutó al escuchar la voz de Jungkook a través de la puerta. Jimin estaba demasiado ocupado dándole placer a su chico y Yoongi ni siquiera fue consciente. Seguía disfrutando al máximo, jadeando en voz baja y acariciando el cabello despeinado del rubio.

Evanescente | ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora