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El monovolumen negro estaba envuelto en llamas. Jungkook observó el desastre desde una distancia segura. Por fortuna había conseguido salir del coche a tiempo.

Miró a Taehyung. El hermano de Yoongi se encontraba debajo de él. Jungkook le había protegido con su cuerpo pero el mayor seguía inconsciente.

Lo primero que hizo fue tomarle el pulso.

-¡Sigue vivo!- suspiró aliviado -¡Menos mal!

Jungkook vio cómo un infectado se acercaba a ellos. El ruido de la explosión le debió atraer desde el bosque.

Miró a su alrededor. Había muchas ramas pero todas las que veía eran pequeñas o parecían débiles. Siguió mirando. A un lateral de la carretera encontró una rama ancha y robusta.

-¡Esa!- Jungkook fue corriendo a por su arma.

El infectado era un varón adulto. Su cuerpo estaba cubierto de innumerables heridas. Jungkook le observó desde la distancia. Caminaba en zigzag por el asfalto.

Pensó en lo que les había dicho Min Yoongi.

«Si os encontráis con un infectado apuntad a la cabeza»

-A la cabeza- repitió en voz alta.

Jungkook se acercó con cuidado. Era la primera vez que se enfrentaba a un infectado. Los había visto, había huido de ellos pero nunca había matado a uno.

Se dio la vuelta para asegurarse de que Taehyung seguía estando bien. El joven continuaba tumbado en el suelo.

Volvió a fijar la mirada en su oponente. El infectado caminaba de manera peculiar. Parecía tener algún tipo de cojera. Al verle, el ser apresuró el paso.

Jungkook aguantó, esperó hasta que se le acercó lo suficiente y le golpeó con la madera igual que había hecho Yoongi con su bate de béisbol. El impacto en la cabeza lo tumbó de inmediato.

El hombre, a pesar de su caída y de haberse quedado sin media cara, intentó levantarse para volver a por su presa. Jungkook no titubeó. Le golpeó en el rostro cuatro veces.

-¡Lo he hecho!- alzó los brazos al aire y pegó un grito -¡Me lo he cargado! ¡Toma!

Al darse la vuelta la sonrisa se le borró de la cara. Había otro infectado y estaba muy cerca de Taehyung.

«¡No me jodas!»

Jungkook echó a correr.

El infectado, un hombre con uniforme de policía estaba a muy pocos metros del chico.

Jungkook sujetó la rama con ambas manos y cuando lo alcanzó, presionó de forma horizontal la madera contra el cuello del infectado. Lo empujó unos metros hasta empotrar al policía contra un árbol.

Apretó la rama con fuerza contra el cuello del ser y traspasó la carne putrefacta del agente con ella. La parte inferior del hombre se desprendió y cayó al suelo mientras Jungkook le seguía mirando con ira a la cara.

Se apartó y la cabeza cayó al lado del cuerpo sin vida.

-¡Puto cabrón! ¡Menudo susto me has dado!- el maknae golpeó la cabeza como si fuera un balón de fútbol y la lanzó a una distancia considerable -Atacar a un chico inconsciente, pero ¿tú de qué vas?- le gritó.

Se arrodilló al lado de Taehyung y comprobó su pulso. Seguía igual. Se fijó en que tenía sangre en el pantalón. Debía tener una herida en la rodilla.

-Será mejor que nos vayamos de aquí. Cuando encuentre un lugar tranquilo te miraré esa rodilla.

Dicho y hecho. Jungkook cargó a Taehyung a sus espaldas y salió de allí a paso ligero.

Evanescente | ¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora