Las cartas llegan un día inesperado. El Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería ha vuelto a abrir sus puertas tras una guerra que solo se conservara en los libros de historia, y no en sus pilares reconstruidos. Harry Potter y sus amigos regresan para...
Muy raras veces el cielo mostraba solo una nube, aunque para el chico, el ver solo una nube en su panorama visual, le resultaba algo tranquilo y pacífico, con solo ver como la nube se movía de la forma mas lenta posible para la percepción del ojo. Ernie se sentía muy calmado al ver el movimiento pacifico de la nube, sin embargo, sus pensamientos ocupaban cierta parte de sus neuronas haciendo que sus ojos se vieran perdidos y su cuerpo fuera de aquel mundo...
—¿Ernie, estas bien?
De la nada aquella nube perfecta y esponjosa dejo de verse para darle paso a unos ojos marrones brillantes y el rostro de una chica que le veía con sus rubias cejas alzadas, causando que Ernie entrecerrara los ojos y levantara la cabeza del regazo de la chica.
—¿No parezco estar bien? — Pregunto el con la cabeza ladeada, y viendo a las dos presencias que se hallaban ahí.
—No, en realidad no, últimamente has estado...Distraído— Confeso el otro chico que se encontraba ahí sentando, mientras se rascaba su rizado cabello.
—¿Lo estoy? — Se pregunto así mismo extrañado y alejando la vista de ambos chicos para mirar el lago negro del colegio. Luego de algunos minutos de silencio donde sus compañeros se daban miradas preocupados por el comportamiento de su compañero, Ernie hablo —Tienen razón— Acepto girándose a verlos nuevamente.
—¿La tenemos? ¡Aunch!— Se quejo el chico luego de recibir un codazo por parte de la chica junto a una mirada que le dijo de forma firme que se callara.
—...Y Nos dirás ¿Qué es lo que te pasa? — Pregunto de forma elocuente la chica de rubio cabello.
—Puede que me guste alguien— Confeso sin más mientras tenía una mano en la barbilla y parecía estar pensando demasiado la situación, sin notar que sus dos amigos se vieron sorprendidos y con emoción en su rostro.
—Es...¿Enserio, Ernie?— Le pregunto la chica viendo a su amigo.
—Hmm, aun no lo eh pesando suficiente, Hannah—Se quejo Ernie sin interrumpir sus pensamientos.
—Pero... ¿Quién es? ¿Lo conocemos? ¿Estudia aquí? ¿Cómo es él? — Le pregunto Hannah ignorando la represalia de su amigo.
—No les diré quien es hasta que este seguro...—Anuncio con el entrecejo fruncido—Pero, puede que lo conozcan, o no, si, estudia aquí...y él es...—Ernie abrió la boca y roto los ojos como buscando la palabra—Algo, demasiado...Extraordinario para este mundo...—Dijo agitando la nariz, al ver el pasto verde, ido.
—¿Y físicamente? — Le pregunto el otro chico acercándose a Ernie, así como la chica, aprovechando la distracción del rubio.
—Tiene el cabello castaño lacio, la piel blanca como el mármol con el que se esculpen las obras de arte; tiene labios rosados y un total de veintisiete pecas cubriendo sus mejillas delgadas y su nariz. De cuello fino y de pestañas largas que adornan sus ojos azules como el agua cristalina...—Termino de explicar Ernie como si hubiera leído un poema, y para nada sintiéndose un completo loco por decir eso, y menos, notando que sus amigos se vieron asombrados. Ernie que de repente se levantó del pasto y que a la vez tomó su mochila exclamo—¡Ah! — Y se giró a verlos—Él es de la casa Slytherin — Proclamo para después comenzar a camina lejos de sus amigos que se quedaron con las bocas abiertas, pero Ernie, solo podía seguir repasando en su cabeza, los contras, los pros y todo para saber si verdaderamente él estaba enamorado de Theodoro Nott.
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Harry Potter y Draco Malfoy para nada iban empatados, después de tres jaques mates de parte del rubio era obvio que para nada estuvieran empatados, ni cerca de estarlo, pero el chico de lentes no parecía querer ceder ante la perdida y seguía con la idea de "Solo una ronda y ya" a lo que se transformaba en otra y después en otra. Sin embargo, en vez de molestarse, como creía que iba a pasar cuando el chico pidió que volviera han jugar, él se sintió bien. No sabía exactamente cómo explicarlo, pero algo estaba mal.
Definitivamente sabía que algo andaba mal con él o con Potter incluso con ambos, pero sobre todo con Potter que parecía tener un resplandor constante a su alrededor, que siempre llamaba su atención; que pedía a gritos que viera a Harry Potter ¿Pere porque mierda tenía que hacerlo? ¿Por qué debía mirar su marcada mandíbula, su nariz griega y sus almendrados ojos verdes? ¿Por qué le llama la atención el grosor de sus hombros o por qué su cabello es que siempre estaba revoltoso o del porque sus manos eran grandes pero estéticas o por qué...
—¿Qué es eso? — Pregunto Malfoy con el entrecejo levemente fruncido mientras señalaba el dorso de la mano derecha de Harry con la cual estaba a punto de mover uno de sus peones negros.
—¿Hmm? — Profirió Harry a la vez que levantaba la vista y dirigía sus ojos a ver dónde señalaba el chico para ver aquella cicatriz con la tonalidad de piel levemente más clara que la suya—Ah, eso. Es lo del castigo de Umbridge— Dijo Harry dándole poco sentido y moviendo su peón a la posición que él quería.
Pero Malfoy en vez de pensar en aquella jugada que sabía que podía ganar con rapidez, movió una pieza al azar y mantuvo su mirada fija en la mano de Harry. En la cual se podía ver algunas letras, sabia sobre los castigos impuesto de Umbridge, cuando fue parte de la brigada inquisitorial, pero exactamente no sabía cómo es que era el castigo, el simplemente se reía cuando los veía salir del salón de castigos, sin prestar atención a lo que realmente pasaba. Pero ahora al ver la mano de Harry con aquella cicatriz que se podía ver a la perfección por las innumerables vez en la que se marcó, entendió de inmediato de lo que se había basado el castigo, aun así Malfoy no se quedó viendo por mucho tiempo la cicatriz, su mirada inevitablemente comenzado un recorrido por los brazos descubiertos del chico, cicatriz ahí, cicatrices alargadas por allá, cicatrices que realmente se veía dolorosos y que para nada se comparaban alas que él pudo haber tenido por lo sucedido en los baños de hombres si es que no hubiera toma díctamo a tiempo.
Y ahora que veía sus brazos con cicatriz se preguntó: ¿Tenía más? ¿El cuerpo de Potter estaba lleno de cicatrices?, ¿Algunas de ellas las provoco el?, ¿Cuánto dolor realmente paso para llevar tantas cicatrices...?
