20
Los problemas de la fama
Cuando sonó la campana, anuncio el comienzo de las clases de la tarde. Ron y Hermione se encaminaron hacia la salida de los terrenos del castillo en un silencio algo incomodo al estar ellos dos solos caminando con dirección a los invernaderos, para su clase de Herbología. Eso era la desventaja de que Harry ahora tuviera novio. El hecho era que prefería ir a las clases de Draco, (que él no tomaba) y esperarlo para poder ir juntos a las que si participan juntos, como Herbología, DCAO, pociones, etcétera, y lo que pasaría en algún momento. Ambos amigos los verían pasar con las manos agarradas y riendo de chistes que ya comenzaban a cansarles a los dos porque nadie los entendida más que la pareja y Ron ciertamente no podía entender tampoco la personalidad tan diferente que tenía Harry con Draco.
Desde que salían Harry era más... juguetón, no con él, claramente, pero al verlos juntos se le notaba, además no podía pasar de lado el hecho de que se pasaba el día entero pegado como chicle a Draco. ¿Qué tanto tenia de especial? Ron había visto parejas y no eran tan pegadizas como lo eran ellos dos, sin embargo, no hacía nada para molestar, pues en un inicio Harry le había dicho que tuviera paciencia, pues una vez que estuviera con Draco no lo dejaría solo, ni un segundo, pero demonios, ya habían pasado dos semanas en las que comenzaba a sentir que no tenía mejor amigo.
Pero entonces...
Un milagro.
Harry apareció... solo. Ron recapacito de inmediato y sin decir nada a Hermione corrió con dirección a su amigo. Cuando llego a su lado vio que este tenía una cara de estarse forzando a pensar demasiado, lo que era raro en el, ya que el chico solía actuar antes de pensar. Ron esperaba que fuera importante aquello en lo que estaba enfocando sus ideas.
—¿Qué pasa?
—Es Draco...
El chico pellirrojo puso los ojos en blanco y chasqueo los labios. ¡NO! Pensó, y en ese momento había llegado Hermione respirando fuerte y con un gesto de molestia que cambio al ver lo mismo que Ron.
—¿Qué pasa Harry? — Pregunto ella preocupada. Harry dejo los hombros caer y se volvió a mirar a la derecha, por encima de la cabeza de Hermione.
Los dos amigos lo imitaron sin mas al notar que no hablaría. A lo lejos de ellos estaba Draco hablando con Nott de forma seria de quien sabe qué.
—Creo que Draco está molesto conmigo...—Soltó Harry y volvió a ver el suelo con cara de cachorro regañado.
—¿Por qué lo dices? —Curioseó Hermione al ver el poco interés de Ron en saber.
—Me ha estado cancelado las citas...— Confeso Harry acomodándose las gafas que se le resbalaban de la cara. Ron esta vez sí fijo su interés en su amigo.
—¿Asi?
—¿Las citas, citas...?— Pregunto Hermione notando el mordaz acento que uso Ron para hablar.
—No esas citas. Las citas para enseñarle a hacer su patronus—Respondió Harry con un tono de voz de pánico, ni él quería imaginarse a Draco cancelándole las citas para salir.
Hermione se vio tensa y nerviosa de repente, pero Harry no lo noto por su máximo interés en solo su novio.
—No se... cada vez que se lo menciono se pone raro y pone una excusa— Explico Harry y entro al invernadero detrás de dos chicas de Hufflepuff que le miraron con unas sonrisas grandes y mejillas coloradas, el las ignoro al tomar asiento en la mesa enfrente de Ron y Hermione que compartía con Neville y que aún no aparecía, extraño, normalmente era el primero en llegar al invernadero—Cuando fui por el a su clase de Alquimia me sonrió y estuvimos bien un buen rato hasta que se lo mencione...— Mientras acomodaba su cosas sobre la mesa le dio una mirada a Draco que estaba a dos mesas frente de él. Solo pudo ver su pálida nuca con mechones rubios escondiendo bien su cuello—A estado asi desde hace unos días...
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¿ 𝙶 𝙰 𝚈 ? | ᴴᵃʳᶜᵒ
FanfictionLas cartas llegan un día inesperado. El Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería ha vuelto a abrir sus puertas tras una guerra que solo se conservara en los libros de historia, y no en sus pilares reconstruidos. Harry Potter y sus amigos regresan para...