Amigos Inesperados 1 & 2 (Version Fanfic)

12. Un Lío Jabonoso

Llegamos a casa de Yael para buscar a Yaemith, al fin después de una pequeña confusión en la biblioteca con lo de Jelly.

Preparábamos todo y ya estábamos dispuestos a salir cuando la mamá de Yael nos dijo que antes de irnos teníamos que bañar a nuestro perro porque cuando fuimos a medio día a la biblioteca se había ensuciado con un charco de lodo que había en el patio de la casa de Yael.

─¡Niños saben que Yaemith es su responsabilidad así que tienen que bañarlo o de lo contrario Yael no va a salir a ningún lado! ─exclamó la mamá de Yael mientras salía de la habitación.

─¡Ya ni modo chicos, hay que bañar a Yaemith! ─dije.

─Si, ya sé. Hace rato estaba limpio ─respondió Yael.

─Ya escuchaste a tu mamá Yael, no nos queda opción o no te dejarán salir otra vez ─dijo Nath mientras dejaba sus cosas a un lado de la cama.

Bajamos al patio de Yael  y preparamos todo para poder bañar a Yaemith, nos quitamos las camisetas para no ensuciarnos y entre los tres comenzamos con la persecución dentro la casa de Yael para atrapar a Yaemith quien por cierto; odiaba el baño así que era una intensa batalla.

Yael se paró frente la puerta delantera de la casa mientras Nath y yo estábamos detrás. Aun así era complicado porque era un perrito muy veloz.

─¡Te tengo! ─exclamé mientras me aventé a atrapar a Yaemith quien estaba justo frente de mi pero logro evadirme dejándome caer al piso.

─¡Yo te atraparé! ─Nath fue corriendo tras él mientras me levantaba y salía corriendo detrás de ellos. Yael, al ver todo eso nos siguió enseguida.

Yaemith subió al cuarto de Yael, los dos chicos y yo subimos tras el logrando cerrar el cuarto para que de ahí no saliera. Nuestro perro logro entrar al baño el cual era una ventaja para nosotros pues el lugar era pequeño y sería fácil atraparlo. Yaemith se escondio debajo del compartimiento de productos para el baño.

─Chicos, voy a llenar la bañera y si lo atrapamos lo bañamos aquí de una vez ─dijo Yael en lo que se acercó a la bañera para abrir la llave del agua.

─Está ahí abajo, esperemos a que se prepare el agua y lo atrapamos ─dijo Nath en lo que tomaba el jabón y se lo daba a Yael.

La bañera se llenó y preparamos todo para la segunda ronda de batalla contra nuestro perro.

Nos acercamos poco a poco pero Yaemith al ver eso se puso más nervioso y saltó hacia Yael quien estando desprevenido se resbaló y cayó sentado dentro la bañera llena de agua salpicando todo el baño con el agua con jabón mojándonos a Nath y a mí.

─Yael ¿estás bien? ─pregunté a punto de reír pero pensaba que se había hecho daño y mejor me aguanté.

─¡Sí! ─Yael soltó una carcajada.

Entonces sabíamos que estaba bien y los tres comenzamos a reírnos por lo que pasaba.

Mientras nos calmábamos de la risa Yaemith se acercó a Yael y comenzó a lamerle la cara así que aprovechamos la oportunidad y los tres junto a nuestro perro nos metimos a la bañera, lo logramos bañar y al terminar nos pusimos a jugar a guerra de agua.

Nos divertimos un buen rato bañando a Yaemith quien también terminó bañándonos a los tres. Quedamos completamente empapados.

─Chicos vengan ─Yael salió del baño y lo seguimos─. Tomen, aquí tienen esta rola para que se cambien, no podemos salir así estando mojados.

Tomamos la ropa que Yael nos dio y nos cambiamos mientras Yaemith se secaba.

Pasaron varios minutos, limpiamos el baño y ya estábamos listos para salir.

─¡Listo ya está todo arreglado! ─dije yendo con los chicos quienes también ya estaban listos.

─¡Si, al fin ya podemos salir a jugar al parque! ─exclamó Yael, emocionado.

─¡Que parque ni que nada! ─exclamó la mamá de Yael quien estaba parada en la puerta del cuarto un poco enojada─. ¡No sales a ningún lado hasta que limpies el desorden que hay ahí abajo en la sala!

─¡Pero mamá...! ─respondió Yael, triste.

─¡No se preocupe Señora, ahora ayudamos a Yael para limpiar todo! ─dije mirando a los chicos.

─Si, en un momento ─respondió Nath.

─Vamos Yael, ¡Ya cambia esa cara que será rápido y después podremos salir! ─dije a Yael quién estaba enojado y triste.

─Esta bien, voy por la escoba ─respondió Yael ya tranquilo.

Nos pusimos a arreglar la sala que en serio estaba hecha un desastre en que estábamos atrapando a Yaemith y se nos olvidó en que estábamos jugando mientras lo bañábamos. Después de varios minutos dejamos todo como estaba y limpio.