132. Una Tonta Confusión

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Entré a la casa y fui al cuarto de Pau, tomé un respiro y toqué a su puerta.

Segundos después Pau abrió.

—Hola Emi —dijo al abrir la puerta—. ¿Qué pasó? 

—Hola, oye… ¿Puedo hablar contigo sobre algo? —le pregunté algo nervioso, en realidad no sabía cómo decirle lo de Nath sin que piense que me estoy entrometiendo en algo personal pero tenía que hacerlo, por mi amigo.

—Hmm… si, claro. Pasa —entré a su cuarto—. Siéntate —dijo señalando la cama. 

Me senté en lo que cerraba la puerta.

—Pau, quería preguntarte algo…

—Si, adelante, en lo que pueda ayudarte con gusto —respondió con una sonrisa.

Ella estaba tranquila como si lo que haya pasado con Nath no haya tenido importancia alguna.

—Bueno, es sobre Nath… Sabes que él es mi amigo y lo que le pase pues me importa y me preocupa…

—¿Por qué lo dices? —preguntó, confundida—.¿Qué le pasa a Nath?

—Pues es lo que quisiera saber…

—¿Le pasó algo?

—Sé que no debo meterme en esto pero es necesario... —traté de explicar buscando la mejor forma de iniciar el tema pero me sentía muy nervioso.

—Ya me estás preocupando Emi, ya dime.

—Es por algo que pasó hace un rato. 

—Pues no sé exactamente a qué te refieres —replicó, confundida.

—Lo de hace unos minutos allá afuera.

—¿En que estaba en el patio con Nath?

—Sí, es que él está muy triste por algo que le dijiste.

—Ah, es por eso —soltó una ligera carcajada. 

Me sorprendió su reacción, ya que parecía que era algo normal y sin importancia.

—Sí, por eso, ¿qué pasó? —pregunté con insistencia.

—Ah, nada Emi… sólo hablamos un rato.

—Osea si, pero… ¿No te dijo algo más o algo relevante? —inquerí, sería la mejor forma de iniciar el tema.

—Pues qué puedo decirte... vió que estaba leyendo y me preguntó si me gusta leer a lo que le respondí que sí —explicó con una sonrisa—. Luego él me dijo que también le gusta leer.

—Oh, que bien…

—Luego nos empezamos a reir en qué me me dijo que le gusta los libros de Harry Potter, le pregunté cuál, se quedó callado un instante y me dijo un nombre raro que me causó risa. Ahí me di cuenta que no había leído ninguno ya que no existía tal nombre al que se refería.

—Bueno, eso sí pero…

—Ah, es cierto… de la nada me preguntó quién era mi Crush, osea no tenía nada que ver con lo que estábamos hablando —agregó, extrañada.

—Bien, no sé si sea correcto preguntártelo pero… ¿qué le respondiste?

—Tranquilo Emi, no te preocupes… pues le dije que es un chico que me gusta mucho y que vivía cerca de mi casa —soltó una carcajada.

La veía reír pero no entendía por qué. Yo igual creí que ella le diría que su crush era Nath y resultó que también hizo lo mismo que él. 

Pau me miró y de repente su expresión cambió.

—¿Por qué tan serio? —me preguntó, confundida—. ¿Qué pasa?

—Es que no me hizo gracia, ya que Nath está muy triste por eso que le dijiste.

—¿Nath triste por eso? —preguntó con una ligera carcajada—. Hasta crees…

—Es que es cierto —repliqué con un gesto de confusión.

—Vamos Emi, ¿cómo va estar triste con eso? Sabes que él todo lo toma a juego, sería el colmo que no lo haya entendido.

—Pues… ¡Nath está llorando! —aclaré al verla sonreír, ya que ella no había entendido que era verdad—. Pues efectivamente él no lo entendió así.

—No es cierto Emi, estás jugando —replicó, su sonrisa cambió, se estaba dando cuenta que no era una broma—. Nath todo lo toma a juego hasta crees que va llorar por eso.

Asentí con la cabeza, seriamente.

—No, no es cierto —negaba reiteradamente—. Pero si estaba hablando de él, sólo me estaba vengando por lo que me dijo en el juego en la mañana. Tú también sabes que él me gusta, yo igual creí que me lo diría pero me inventó otra cosa al final.

—Lo sé, pero es que él te creyó en verdad… lo tomó tal cuál y está muy triste ya que estaba muy ilusionado en que te lo iba a decir esta vez.

—¡No, debe ser una broma! —se sentó a mi lado, impresionada—. Soy una completa tonta, en verdad lo lamento.

—Es que Nath podrá parecerte un payaso por sus ocurrencias pero a veces si llega a sentirse mal con ciertas cosas.

—Si lo creo, en verdad no creí que entendiera mal, hasta antes de quitarme de ahí le acaricié el cabello y le guiñé el ojo para que se dé cuenta y entendiera —explicó tapándose la cara con ambas manos—. No puedo creer lo que acabo de hacer.

—A veces a los chicos también nos duele un desamor con la chica que nos gusta o una desilusión… creeme, lo sé. Y hay chicas que a veces no lo creen o entienden.

—Yo si te creo, y en verdad lo entiendo… y lo siento muchísimo —se disculpó, negando ligeramente con la cabeza—. Soy una estúpida, acabo de hacerle daño al chico que me gusta y por tonta además.

—Bueno, no te preocupes… tampoco te llames así.

—Es que es cierto Emi, le explicaré a Nath la verdad —dijo con la voz temblorosa—. Espero no se enoje.

—Está bien, no se enojará pero si está muy lastimado… pero tranquila, en un rato que se calme puedes decirle. 

—Sí, así lo haré… 

Me levanté de la cama.

—Bueno, gracias Pau. En verdad quería saber que pasó para entenderlo y ver si lo puedo ayudar. Te agradezco que me lo hayas dicho.

—No es nada Emi, no te preocupes. Al contrario gracias por hacerme ver esto que hice mal sin querer.

—Bueno, iré con Nath a ver cómo está —sonreí y me acerqué a la puerta.

—Sí Emi, en un rato hablaré con él.

—Está bien.

Salí del cuarto y me dirigí de regreso con los chicos ya más tranquilo al saber la verdad de lo que había pasado. Y ya con eso podría ayudar de alguna forma a mi amigo.

Amigos Inesperados 1 & 2 (Version Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora