Capítulo Quince

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Esta historia no me pertenece, es una traducción.
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Pasan los días y Bran sigue sin despertarse. Apenas he visto a Jory desde la boda. Se acuesta cuando yo ya me he dormido y se despierta antes que yo. Sí le veo cuando me despierto por las noches de pesadillas. Me abraza fuerte hasta que dejo de llorar y me quita las lágrimas a besos. Las pesadillas no son tan malas cuando sé que hay alguien ahí para consolarme cuando me despierto.

Por mucho que intente querer a Jory, tocarle y besarle. No siento nada por él, no de la manera que una esposa debería.

Hoy es el día en que debemos partir hacia Kingslanding. Sé que fue difícil para Lord Stark irse en primer lugar, pero ahora con Bran tan cerca de la muerte...

"¿Estás bien, amor?" Pregunta Jory. Me está ayudando a doblar ropa y empacar pertenencias en un gran baúl para compartir. Debo haber mirado fijamente durante demasiado tiempo.

"Estoy preocupada por Bran."

Me da un ligero toque en el hombro. "Han hecho todo lo que han podido por él. El maestre dice que ya ha pasado lo peor. O el joven señor despierta o no. Ahora depende de los dioses."

Asiento con la cabeza. "Parece cruel que el rey haga partir a todos, en unos días más Bran podría despertar..."

"El rey no puede esperar eternamente."

"No, supongo que no." Miro alrededor de la habitación que he llamado hogar toda mi vida. "¿Eso es todo entonces?"

Me ayuda a levantarme. "Creo que sí. Ahora, tengo que ir a asegurarme de que el resto de los guardias de la casa están listos para el viaje. Despídete." Me da una palmada en el hombro y sale de la habitación.

Me pongo el mono de montar, compruebo que todo esté bien empaquetado y me despido.

Me despido de las sirvientas que he conocido a lo largo de los años, del maestre y del pequeño Rickon, que llora cuando le digo que debo irme. No lo entiende.

Visito a Lady Stark y a Bran. Ella apenas me mira, no siente un gran amor por mí.

Beso a Bran en la frente. "Adiós, Bran", susurro. "Por favor, despierta pronto."

Me giro hacia Lady Stark. "Adiós, Lady Stark. Gracias por todo."

Ella asiente. "Adiós Lady Nyla."

La dejo con sus oraciones. Busco a Robb y Jon. Los únicos dos de los que no me he despedido. Veo a Robb dirigiendo caballos y sirvientes en el patio. Ha estado pareciendo mayor los últimos días.

"Nyla." Sonríe. "¿Te has estado despidiendo?"

"Sí." Miro alrededor del patio. "Sólo quedan Jon y tú para despedirme."

"Mejor date prisa, Jon está cargando sus cosas y ensillando su caballo."

Asiento y me giro para irme. "Adiós Robb." Le doy un beso en la mejilla.

Se pone rojo. "Adiós Nyla. Buen viaje."

Asiento y corro hacia los establos. Veo a Jon ensillando su caballo. Se vuelve para mirarme. Nunca lo había visto tan frío y cerrado. Pero me sonríe.

"Te he estado buscando por todas partes, Nyla. Pensé que tendría que irme sin despedirme."

"No dejaría que eso pasara Jon Snow."

Se mira los pies. "Ahora que me voy al Muro, probablemente no vuelva a verte."

Sacudo la cabeza. "Ya te conté lo de mi noche de bodas, eso no es verdad." Sonrío. "Lo he visto en mis sueños."

Se ríe un poco. "Y tus sueños se hacen realidad, ¿verdad?"

"Lo hacen. Ya lo verás." Me inclino más hacia él, para que nadie me oiga. "Soñé que nos volvíamos a encontrar, en una orilla de arena. Pareces mayor... e igual que tu padre."

"¿No hay más detalles de este sueño?" Me pregunta.

Suspiro. "No. Pero es tan vívido y claro. Debe de ser real."

Sonríe. "Entonces te tomo la palabra." Me tiende la mano. "Hasta que nos volvamos a ver, milady."

Ignoro su mano, me arrojo a sus brazos y le abrazo. "Hasta que nos volvamos a ver."

"Sujétala bien, Jon Snow." Dice una voz detrás de nosotros. "No hay mujeres en el muro."

Suelto a Jon y me giro para ver a Lord Tyrion.

"Es bueno verlo de nuevo mi Lord," digo. "Gracias de nuevo por esos libros. Son muy buenos."

Él asiente. "Bien, bien." Sonrie. "Ese sueño tuyo, espero que se haga realidad. Estaría bien ver a Jon en una playa de arena en vez de en una llanura nevada."

Me río. "Puedes pensar que estoy loca mi señor. Pero es un sueño que tuve la otra semana."

"Tal vez, es sólo tu mente esperando que veas a Jon Snow de nuevo." Sugiere.

"Quizás." Me encojo de hombros. "En cualquier caso. Es un buen sueño." Me giro hacia Jon. "Adiós Jon, buen viaje." Me giro hacia Lord Tyrion, que me mira extrañado. "¿Qué pasa, mi Lord?"

"No sé mucho de usted, mi Lady, pero tengo la sensación de que eres la mujer más extraordinaria que he conocido."

Me sonrojo y hago una pausa. "No debe haber conocido a muchas mujeres mi Lord."

Se ríe. "He conocido a muchas mujeres, Lady Nyla. Simplemente hay... algo en ti."

Hago lo mejor que puedo para ocultar mi vergüenza. "Ahora ahora Lord Tyrion. Estoy casada." Me río y empiezo a alejarme. "Buen viaje mi Lord."

"Y a usted, mi Lady." Le oigo decir mientras me alejo.

Tengo la sensación de que esta no será la última vez que vea a Tyrion Lannister.

Veo a Jory con mi caballo en la mano, ensillado y listo para el largo viaje.

Sonríe ampliamente. "¿Se ha despedido, Lady Nyla?"

Asiento solemnemente.

Él me seca las lágrimas que no sabía que tenía. "Sé... sé que es duro."

Me aclaro la garganta. "Estoy bien." Hago lo posible por sonreír. "Estamos empezando nuestra nueva vida juntos. Es difícil decir adiós."

Asiente con la cabeza. "Así es." Me entrega las riendas de mi caballo y me ayuda a subir a la silla. "Debemos partir antes de que Lord Stark y el resto nos dejen atrás."

Sube a su caballo, miro hacia Winterfell hasta que ya no puedo verlo.

A Dragon's FlameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora