Emily's pov
Habían pasado dos meses desde el incidente que tuvo Ali en el instituto con ese despreciable, la verdad es que lo llevó bastante bien, los primeros días no quería estar sola en su despacho, por lo que yo me hacía cargo de que se sintiera cómoda haciéndola compañía; a menudo que pasaban los días fue superando ese temor y no necesitó más mi ayuda. Para mí, fue muy valiente por su parte dominarlo tan pronto, ya que a muchas personas les costaba el mero hecho de poder volver al lugar del suceso, en cuanto Spencer supo la noticia, se encargó del caso y lo llevó a juicio para que ninguna chica tuviera que sufrir más de su acoso. Bastaron nuestros testimonios y sobre todo el de la víctima que en su caso era mi rubia para que le encerraran de por vida a ese miserable, aunque no sólo tuvimos un dictamen positivo sino que gracias a lo avispada que fue la morena supimos a cuántas mujeres/jóvenes había forzado: 23, el cabrón iba de ciudad en ciudad cambiándose de profesión para buscar a sus víctimas.
Cuando la novedad llegó a los padres de Ali y a mi madre, estalló la guerra, Kenneth fue a la cárcel a visitarle y aprovechó la ocasión en la que no estaba el policía que vigilaba para estamparle contra la pared, aunque enseguida vinieron dos guardias y tuvieron que sacar a mi suegro de ahí por la escena que montó. Mi mujer y yo tuvimos que ir a su antigua casa para calmar a su padre y decirle que ya había acabado y que todo estaba bien, que con la paliza que le dí, bastante dañado se quedó el repugnante hombre; en cierto modo entendía a Kenneth, era su hija y el hecho de que alguien la dañara hacía que le hirviera la sangre y no descansara hasta que la persona quedara entre barrotes.
Hoy era viernes y como teníamos puente, poseíamos la suerte de no tener que levantarnos pronto, Ali y yo comenzamos a indagar sobre las maneras de tener un hijo y contactamos con el doctor para que nos informara sobre las posibles formas de hacerlo, así que teníamos una cita a las 10:30, por lo que en cierto modo teníamos que madrugar. Puse el despertador a las 9 para tener tiempo suficiente y cuando sonó el aparato me impresionó ver a mi rubia despierta y levantándose de la cama para vestirse.
- Ali, esto que acabas de hacer es un récord- dije acomodándome en la cama- no todos los días tengo la suerte de verte despierta antes que yo- sonreí.
- Estaba tan nerviosa con lo de hoy que apenas he podido pegar ojo- explicó mientras se cambiaba.
- Cielo- me levanté y fui a donde ella- ¿y no estás cansada?- agarré su cara con mis manos para observar si había signos de cansancio.
- La verdad es que no- juntó nuestros labios en un tierno beso- no sabes lo feliz que estoy- dijo sacando su mejor sonrisa y mostrando esos hoyuelos que tanto adoraba.
- Yo también preciosa- la hundí en mis brazos- tengo que preguntarte una cosa- la alejé un poco de mi para inspeccionarla mejor- ¿cómo es posible que a estas horas de la mañana sigas estando tan bella?- pregunté haciendo que se sonrojara.
- Siempre me derrito cuando me dices esas cosas- cogió mis manos y me miró a los ojos- ¿alguna vez te he dicho que tus ojos son muy expresivos?- se juntó más y me acarició la mejilla.
- No lo sé- respondí sincera- y si lo has hecho no me habré enterado por haber estado estupefacta ante tu hermosura, suele pasarme mucho- la sujeté de la cintura.
- Lo sé- se rió- no sabes cómo me gusta tener ese efecto en ti- me susurró seductivamente al oído y mordiendo parte de mi lóbulo.
- A mi también me gusta- contesté deseosa mientras la rubia salía de la habitación con una sonrisa.
Me quedé parada en el hueco que estaba durante unos minutos, recopilando el tiempo de charla que acabábamos de tener, sintiendo cómo cada parte de mi cuerpo reaccionó ante tal pequeño pero placentero gesto de morder el lóbulo, hasta que me di cuenta que tenía que vestirme y bajar a desayunar en compañía de mi mujer. Tras prepararme bajé las escaleras y me encontré a una rubia alegre acabando de poner la mesa.
ESTÁS LEYENDO
Mi amor verdadero (Emison)
FanfictionEmily es una joven californiana que se muda a Rosewood tras la muerte de su padre. El pueblo fue lugar donde creció su madre, y será ahí donde encuentre a su amor verdadero. Ser la nueva alumna de un instituto no es algo que agrade mucho, sobre tod...