Mi amor verdadero (Emison)

Sesión calentita

Emily's pov

Distintos sonidos de cantos de pájaros fueron los que hicieron que abriera los ojos y me despertara por completo, logrando así que me diera cuenta donde estaba. Mis labios formaron una gran sonrisa al apreciar que yacía tumbada en la roca de los besos, y fue en el instante en que llevé la mirada hacia mi mujer cuando me vinieron todos esas memorias de la noche anterior. Ali me había sorprendido dejándome sin palabras ante todo lo que había organizado, nunca me hubiera imaginado esto, nunca hubiese seguido la pista de que mi mujer me fuera a llevar a uno de nuestros lugares favoritos y termináramos haciendo el amor, pero debía decir que estaba más que encantada de haber vivido una experiencia como esa. Todavía no había amanecido, por lo que era bastante pronto, pero no me importaba estar despierta a esas horas, ya que podía contemplar la belleza del lugar. Diferentes tamaños de árboles rodeaban la zona logrando así crear una imagen única, las plantas, flores y zonas verdes añadían ese toque de atractivo que toda selva poseía, y los caminos llenos de rocas, abrían paso al interior de lo más frondoso que uno pudiera llegar, llegando así sentir la paz y tranquilidad que todo ser buscaba. 

Aunque no me iba a engañar, sin duda alguna lo que hacía que el lugar fuera aún más maravilloso y espléndido era la rubia que dormía junto a mí. Levanté la sábana que cubría nuestros cuerpos y llevé la mirada a la esbelta y perfecta figura que conservaba ella, sonriendo en adoración ante el ángel que tenía como esposa. Cubrí de nuevo su cuerpo dándole un beso en la mejilla y volviendo a tumbarme y mirando hacia arriba feliz de ser parte y de tener a una familia tan prodigiosa. No deseaba ser rica, ni que me tocaran premios, ni vivir en una mansión enorme porque me tocó la lotería en cuanto conocí a mi chica, y más cuando nacieron nuestros hermosos hijos, y todos ellos eran los que hacían que mis días fueran extraordinarios. 

- ¿En qué piensas?- sentí el cosquilleo de un dedo vagar por mi brazo dejándome los pelos en punta.

- En la vida- respondí sonriente.

- ¿La vida?- no tuve que mirarla para saber que tenía una ceja levantada. 

- Si- asentí volteándome un poco y conectando las miradas- de cómo empezó a ser increíble desde el instante en que tu entraste en ella, de cómo me has llenado y sigues llenando mis días de amor, pasión, alegría... de cómo hemos creado tres hermosas criaturas, de estos momentos tan románticos que me das- cogí su mano decorándola con un beso.

- No soy la única sabes?- echó una risa- tu también haces que todo eso lo que has dicho sea inverosímil. 

Observé esas órbitas azules que no paraban de mirarme, estaba atravesando mi alma con sólo una mirada, pero era eso uno de los magníficos efectos que tenía Ali, te podía dejar sin aliento con sólo una ojeada. 

- Lo sé preciosa- planté un tierno beso en su frente. 

- ¿Tenemos tiempo?- cuestionó sonriendo ante mi dulce gesto. 

- ¿Tiempo para que cielo?- la miré captando al instante esa sonrisa picarona que tenía- Alison Fields, a estas horas y ya con ganas eh?- guiñé un ojo. 

- Verás, te voy a explicar los echos- tragó saliva- resulta que estoy en medio del bosque tumbada junto al amor de mi vida que resulta estar desnuda- comenzó mientras aguantaba las ganas de reírme por lo que estaba relatando- y no se tu, pero yo a desayunos como estos no les digo que no, estaría loca si me negara- seguía a medida que me mordía el interior del labio intentando aguantar las ganas de besarla- claro que si no te apetece, siempre podemos hacerlo otro día- empezó a hacer el amago de levantarse.

- No- la paré al instante- mentiría si dijera que no quiero hacerlo- vi como se le formó una gran sonrisa- dios Ali, yo si que estaría chiflada de decir no a esto- apunté a su cuerpo juntándolo más a mi y besándola al instante.