Loon

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POV Mangle:
Loon era un chico tímido, muy, muy tímido, no sabía como hacer amigos, por ello, le llamaban marginado.
Sus padres le obligaron a ir a clases de interpretación, en parte, para perder su miedo y en otra parte, querían que el chiquillo fuera actor como su madre, pero Loon no era capaz...
Iba todos los días a una escuela especializada en la actuación, pero Loon apenas se asomaba al escenario.
Con el tiempo, Loon perdía más el interés por el teatro y eso empezó a afectar a su madre, ya q veía que su hijo no era feliz.
-Quizá debieras cantar, tienes una buena voz.-sonrió ella, pero esta vez se lo pensó mejor y la apuntó a clases aparte para q no coincidiera con nadie.
A Loon le costaba incluso hablarle a la profesora.
-Loon, tranquilo, aquí nadie más que yo puede escucharte, así q si haces algún fallo, bueno, -se acercó a Loon y susurró.-será nuestro secreto.
Gracias a esa única frase, Loon empezó a coger confianza con esa profesora y después de una semana de intentos fallidos por que cantara, al fin lo hizo, la profesora coincidió con su madre, tenía una muy buena voz, era una voz... No metálica, era bastante contraria, era dulce como una flauta y tierna, una voz majestuosa para un chico de su edad.
-Genial, Loon, otra obra fantástica.-murmuró la profesora con una sonrisa.-Sabes,Loon? La semana que viene daré un concierto con el coro y me gustaría que te unieras para cantar de solista...
Loom abrió mucho los ojos.
-N-no podría... Usted sabe...
-Lo sé, Loon, pero sería una oportunidad magnífica para ambos, tú canarias perdiendo la vergüenza y asombrando al público y yo podría aumentar mi academia gracias a eso.
-P-pero...
-No digo que lo pienses ahora, aún tienes toda una semana, piénsatelo, quieres? Si te decides, llámame y hablaremos.
-Vale...
-Buen chico, Loon.-acarició mi cabeza.-hasta mañana.-se despidió.
-Adiós...
Loon se pasó la mayor parte del día tumbado en la cama y pensando.
-Loon, cariño, necesito un favor... -Loon miró a su madre, ella le ofreció un disco.-es la música que necesito para una escena y los editores no son capaces de hacer su trabajo... Sé que sabes de estas cosas, te importaría hacerle unos arreglillos?
Loon negó con la cabeza.
-Gracias, cariño! Me sacas de un apuro!
Su madre le ordenó los cambios que debía hacer y al final del día lo tenía hecho todo.
-Gracias,amor.-besó su frente.-podrías mañana venir conmigo al plató a enseñarles a esos hombres lo q deberían hacer.-sonrió ella.
Loon se encogió de hombros.
-De veras? Era una broma, pero ahora q aceptas, me vendría bastante bien, gracias, querido.-le dio otro beso y salió de la habitación.
A la mañana siguiente, despertó a Loon y se fueron al plató.
-Mirad, par de gandules, mi hijo a editado la canción ENTERA.-le dio intensidad a la última palabra.
-De veras? Ese chiquillo lo ha hecho? Era imposible editar esa canción, apenas se entendía-.
-Tenían que hacer más audible la voz poniéndola más aguda y la música más baja.-salió Loon.
Ambos hombres quedaron fascinados.
-Ah, si? Y que haces para cambiar de color una luz de escenario sin gastarte el dinero en otro foco?
-Coges una papel flexible de el color q necesitas y lo colocas en el foco, la luz cambiará por q el papel es técnicamente transparente.
Ambos hombres quedaron extasiados.
-Es... Una buena idea, realmente buena.
-Sí, chico, eres fantástico!-añadió el otro.
-Hijo, dales unos consejos, lo necesitarán, yo me voy a trabajar, hasta ahora! -y besó si frente.
Loon se pasó el día con los editores, estos cada minuto quedaban más fascinados, cuando la actriz terminó su trabajo, fue a recoger a Loon.
-Cariño, nos vamos ya.
-Señora, su hijo tiene un talento innato para esto! Es fantástico! Toma, chico! Te las has ganado!
Loon recibió dos entradas para el circo.
-Dale las gracias, Loon.-ordenó la madre.
-Gracias...
-Gracias a ti por ayudarnos todo el día, esperamos haber aprendido algo de ti, pequeño genio!
Sin más, se fueron a casa.
-Eres talentoso para la edición, eh?
-No lo sé...
-Está bien, cielo, mañana al circo, no?-sonrió.
-Sí...
En el fondo, Loon estaba muy alegre gracias a aquel día.
Al día siguiente fueron al circo, a Loon ese tipo de cosas no le impresionaba demasiado, o eso pensó hasta q vio el número al que sacaron a una chica de cabellos azules tan flexible como la goma.
Sin duda fue un flechazo...
Loon no fue capaz de decirla nada, no fue capaz ni de preguntar su nombre, la única persona de la q se había enamorado en su vida y no había sido capaz de ser valiente...
-Si?-contestó la profesora de Loon al teléfono.
-Lo lamento... No voy a cantar...
-Está bien, Loon, no te satures, lo conseguirás.
-Gracias...
-Bueno, hasta mañana!
-A-adios...
Las cosas siguieron normales durante el año, Loon, gracias a la ayuda de su madre, empezó a estudiar para estar entre bastidores, pero, un día, llegó la noticia de q el mismo circo q fue el año anterior iría de nuevo en unos días.
Loon estaba eufórico, esperaba poder ver a la musa de la q se enamoró aquel año y sí, la vio.
Sin pensarlo mucho, reunió toda su valentía y rogó poder contribuir al circo entre bastidores, por supuesto, yo no me negué en lo absoluto.
Loon le dijo a su madre y aunque al principio estaba algo decepcionada accedió a aceptar q era mayorcito para tomar sus propias decisiones, teníamos a un chico de talento innato tras la cortina~.

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