LUCIEN HOFFMANN
-¿Y qué noticias hay? ¿Qué ha notificado el infiltrado? -le pregunto a León. Este me mira, baja la cabeza y no contesta nada; solo bebe un trago y se queda callado.
-Nada en realidad. Están en las Maldivas, pero no sabemos exactamente dónde, son muchas islas -dice León con cara de frustración.
Estoy desesperado; ya han pasado muchos días, exactamente doce, y nada.
-¿Crees que le hayan hecho algo, que la hayan lastimado o forzado a... ya sabes? -le pregunto a León, melancólico y furioso.
-Conozco a Yanka, es un desalmado pero no un violador. Lo peor que le habrán hecho es encerrarla -dice León, calmado. Sé que detrás de esa fachada de hombre sereno hay una tormenta.
-Además, conoces a tu esposa, es exasperante cuando se lo propone -dice, pero culmina con sus palabras-. Solo espero que ella no haya tenido sexo con ellos, Risitos es... -hace silencio un segundo-... fuera de lo común.
-¿Cómo? -pregunto enojado-. ¿Crees que mi mujer follaría con Yanka o Sebak? -veo furioso a León y este hace un gesto con la boca, apretando sus labios.
Respira y me dice:
-Ayer papá se enteró de los hechos, no pude ocultárselo. Está furioso, hay que viajar a Bruselas; enfrentaremos a los Lombart hoy mismo.
Estas palabras nos hacen cambiar el tema, y salgo rápido a buscar una maleta y a alistar el avión privado rumbo a Bélgica.
°°°°
Cuando llegamos a la villa Lombart, nos dejan ingresar sin tanto protocolo, a pesar de saber que traemos armas hasta en los dientes.
Pero al despacho de Yanka solo ingresamos León y yo.
-¿Dónde está? -Está a salvo, Lucien. Bajo nuestra protección -me contesta Sebak, pero yo en este momento lo que quiero es ahorcarlos por meterse con mi mujer.
-¿Protección? ¿Llamas a secuestrar y forzarla a un matrimonio, protección? -contesto con mucha ira-. Si crees que voy a permitir que te quedes con ella, estás más loco de lo que pensé, Yanka.
-No necesitas permitir nada, Lucien -me contesta Yanka, y yo quiero sacar ya mi arma y darle un tiro justo en su cabeza-. Makarena ya es mía, nuestra. Lo que hicimos fue necesario.
El silencio en la sala es denso, cargado de una tensión insoportable. Mi corazón late con fuerza mientras miro a León, quien hasta ahora se había mantenido callado.
Da un paso adelante, su expresión sombría y seria, casi como si estuviera sopesando cada palabra antes de decirla.
-La mujer que tomaste no es solo una simple posesión, Yanka -su voz es dura, implacable-. Es nuestra familia, nuestro futuro. Y no vamos a permitir que tú y Sebak se salgan con la suya.
-¿Familia? ¿Futuro? -Sebak repite, burlándose-. La única familia que mi Maka formará será con nosotros...
Las palabras de Sebak prenden fuego en mi interior. El instinto me impulsa a lanzarme hacia él, pero León toma mi hombro, deteniéndome.
La tensión es palpable, y parece que la violencia podría estallar en cualquier momento.
-No subestimes lo que somos capaces de hacer, Sebak. Makarena es también mi esposa, y ella me pertenece. "Devuélvanla". -gruño, con la voz temblando de ira contenida-. Si crees que puedes mantenerla lejos de mí, te estás engañando. Iré hasta el infierno si es necesario para recuperarla.
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SOY MAKARENA GALLEGO. « La Reina ».
RomanceSoy Makarena Gallego; fui la causante de la depresión de mi madre, ella fue devil y no lucho por su vida; al sentirse sola y abandonada por el hombre que amaba, se llenó de tristeza y prácticamente se dejó morir... Me crío mi abuelo; y aprendí a ser...