MAKARENA.
Siento su lengua húmeda en mi centro, y aunque lo estoy evitando, trato con todo mi ser de resistirlo. Pero mi cuerpo es débil, y sucumbo a su lengua, a su deseo.
— Mmm, Luciennn, ya. Por favor... — Pero Lucien quiere exactamente eso, hacerme humedecer, y lo consigue.
En cuestión de minutos estoy completamente mojada, y el idiota de Lucien sonríe porque logra su cometido.
— Ves, preciosa, ves que sí quieres. Puedo hacerte vibrar — me dice, y sigue...
Siento su lengua recorrer todos mis labios, mi clítoris, y hace penetraciones. Prácticamente parezco un río de lo mojada que estoy.
— Mmm, ahhh, Luciennn... — Los gemidos son involuntarios, pero no logro controlarlos.
Lucien se dedica a comerme el coño de manera rápida y necesitada, y termino con un orgasmo intenso.
— Ahhh, mmm, ahhh, Luciennn...
Él se levanta sonriente, se acomoda entre mis piernas y no me da tiempo de reaccionar cuando siento cómo entra su longitud en mí...
— Ahhh, Luciennn, No... — le digo y grito, pero él me besa y acaricia.
— Mmmm, ahhh, Luciennn... — Lucien me besa, acaricia mi cuello, mis pechos, y sus movimientos son fuertes y firmes.
— Mmmmm, Luci, ahhh... — Estás deliciosa, mi vida. Mi cuerpo te extrañaba, pero nunca más... — me dice entre jadeos.
— Mmmm, ahhh... — Estoy gimiendo de manera increíble, y no lo negaré, es delicioso. Y aunque hago mi mayor esfuerzo por no sentir esto que siento, me es imposible, y termino gimiendo de placer.
Lucien sale de mí y en un movimiento me voltea, levanta mi cadera y me penetra nuevamente en mi flor...
— Mmm, ohhh, Luciennn, mmm... — Lo peor es que lleva su mano a mi clítoris, lo acaricia y termino corriéndome al mismo tiempo que él.
Respiro entrecortada. Lucien se tira sobre mí y da besos en mi espalda.
— Te amo, mi vida, no sabes cuánto te extrañaba, esto es glorioso... — me dice.
— Eres un idiota, me forzaste — le respondo. Pero Lucien niega. — Tú lo querías, mi vida. Te mojaste rápido y mira, te corriste dos veces — me dice.
Lucien me abraza y termino dormida en su pecho.
Siento una molestia en mi rostro, una luz perturba mi sueño, e intento moverme. Siento un cuerpo, exactamente un pecho, pero no recuerdo quién es. Abro mis ojos lentamente y, de inmediato, mi cerebro reacciona y recuerda todo.
— ¡Gasp! Lucien... — Él despierta, me ve y sonríe. Me reviso y estoy desnuda al igual que él.
— Luci, ya podemos volver con mi chiquito. Mira mi pecho — le digo, pues estoy chorreando de leche.
Pero Lucien niega. — No, mi vida, no volveremos aún. Quiero disfrutar de ti, de tu cuerpo, y mi chiquito tendrá que esperar más días para ver a mami.
— Por favor, Luci, mira mi pecho. Estoy recién parida, no he cumplido ni la dieta, y ya tuve sexo... No debía aún...
— Lo sé, preciosa, pero no pude aguantarme. Sabes cuánto te amo, con todo mi ser — me dice mientras me sube a su cuerpo en horcajadas.
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SOY MAKARENA GALLEGO. « La Reina ».
Roman d'amourSoy Makarena Gallego; fui la causante de la depresión de mi madre, ella fue devil y no lucho por su vida; al sentirse sola y abandonada por el hombre que amaba, se llenó de tristeza y prácticamente se dejó morir... Me crío mi abuelo; y aprendí a ser...