Cap 120. Lucianne Lombart Hoffmann

80 12 0
                                    

( 31 Diciembre)

SEBAK LOMBART

Amor, te ves hermosa —le repito por milésima vez. No deja de mirarse en el espejo—. ¿Estás seguro, Seb? Me veo gorda —me dice.

—Te ves hermosa, esa barriguita te hace ver sexy —le respondo.

Le doy un beso en la nariz y en su barriga.

—¡Ay! —se queja—. Está pateando —sonrío.

—Es que mi princesa será una deportista como mami, y lo más importante: hermosa.

—¿Y si es varón? —me pregunta.

No estoy muy seguro, es mi princesita, como dice Senne —le contradigo.

—¿Seb?

—Dime, mi amor.

Quiero helado de pistache —me dice.

Amor, otra vez... Luego te vas a vomitar —le advierto, pero ella, como una niña chiquita, me contesta:

—casi a punto de llorar—, pero quiero helado o lloraré —me amenaza con sus ojitos llorosos.

—No, no, amor. Llamaré a Senne, él te lo consigue, ¿ok?

Mmm, mmm —responde, sonriendo.

Vuelve a mirarse al espejo. Lleva un hermoso vestido blanco con un escote; se ve bellísima y tierna, tanto que te dan ganas de hacerle el amor.

Cada vez que la veo, mi cuerpo reacciona.

Esa barriguita se le ve preciosa, sus caderas grandes, sus pechos... está bellísima. Todo en ella es perfecto, sumado a su mini cintura.

León toca la puerta y entra.

Lista, mi Risitos. Ya vamos tarde, eres la invitada de honor —dice León, y bajamos.

Estamos en Chicago, en una gala de beneficencia organizada por varias corporaciones y organizaciones benéficas, entre ellas las Industrias Walton.

Este año, la dirección de algunas organizaciones homenajea a la heredera Walton por continuar la tradición de su abuelo Adán Walton con las ayudas y donaciones.

Mis hermanos y yo, al igual que León, nos quedamos con la boca abierta. No sabíamos nada de esto. Pensábamos que solo era una chica caprichosa y consentida, pero en estos meses hemos descubierto su lado humano.

Mi querida esposa nos sorprendió con la cantidad de fundaciones que tiene a nivel mundial, para niños, jóvenes y adultos mayores, promoviendo el deporte y el estudio.

Ni siquiera Victoria maneja una corporación tan grande. Todo esto está dirigido por la heredera Walton, quien esta noche es la invitada y homenajeada.

Luces bellísima, como siempre, amor, mi bella Risitos—le responde León, y ella lo abraza y besa. Aunque eso no significa que deje de comportarse como una niña, y menos ahora.

Cuando llegamos a la gala, los invitados la aplauden y la saludan. Es muy carismática y agradable, aunque nos hace reír, porque luego de cada conversación finge arcadas y saca la lengua. Senne y León se están muriendo de risa.

Yanka ha estado a su lado toda la noche, tratando de ganarse las felicitaciones por mi princesita.

La felicitan, la abrazan, y le han tomado un montón de fotos. Me muero de risa cuando, al final de las fotos, ella se cuelga de Yanka como una payasa.

SOY MAKARENA GALLEGO. « La  Reina ». Donde viven las historias. Descúbrelo ahora