158: Impulsos.

1.3K 138 112
                                    

Tres días después.

Era de noche en el Planeta de Bills.
Goku había regresado temprano tras obtener a regañadientes el permiso de su esposa para visitar al dios y entrenar junto al ángel, la sola mención de Caulifla probablemente lo hubiese echado todo por la borda.

Sin embargo lejos de celebrar el regreso del saiyajin, Caulifla había permanecido indiferente, seria y concentrada por completo en su entrenamiento, muy dentro de si tenía ganas de golpear al saiyajin que permanecía acostado en la otra cama.

Pero a la vez ganas de hablar con el, preguntarle cosas, acercarse a el, mirarlo al rostro.
Rápidamente intenta convencerse de lo contrario, repitiendo en su mente...

─No tengo por que suplicar o rogar, el ya eligió claramente ─Eso de querer esperar mi enfrentamiento con Frost es solo una excusa, no espero ya nada...

La luz de las estrellas iluminaba a través de una de las ventanas.
Goku miraba el techo y tanto silencio por parte de la saiyajin se le hacia anormal.

─¿Qué te pareció el entrenamiento de hoy Cauli?─ preguntaba en un intento de romper el hielo.

─Normal─ responde ella a secas, al menos había dado a entender que no estaba durmiendo.

─¿Extrañas a Kale?─ pregunta el saiyajin.

─Sí, pero se que ella está bien así que no me preocupo, ya habrá tiempo para que nos volvamos a ver y hablando de extrañar personas ─¿Extrañas a tu esposa?─ el sarcasmo de la chica se hacía evidente en esa pregunta.

Goku la mira y parpadea.

─¿Desde cuando hablas o preguntas cosas referente a ella? ─Pense que no te caía bien...

─Nunca dije que me cayera bien, viejo ─Pero responde a la pregunta...

Goku se levanta y se acerca a la cama de la chica, sentándose.

 ─¿Eso es importante?

La saiyajin no se molesta en voltear.

─Fuese o no fuese importante, creo que muchas cosas me quedan muy claras...

─Vamos... No te molestes conmigo... Desde que llegue no me hablas o apenas me respondes, así no podemos.

Caulifla cubre su cabeza con una manta y responde con amargura.

─¿Qué quieres? ─¿Qué sonría? ─Soy una saiyajin, me concentro en lo que se hacer y eso es dar y recibir golpes, mantener mi frente y mi orgullo en alto, te elegí a ti como pareja y no funciono, es la primera vez que siento esa clase de sensaciones, mejor me callo.

Goku se entristece.

─Cauli...─ intenta quitarle la manta de la cabeza pero la chica se resiste.

─Oye... No quiero verte así... Se que los saiyajin estamos hechos para dar, recibir golpes y hacernos mas fuertes... Pero yo también he estado sintiendo extrañas sensaciones... Es dificil todo esto, escúchame...

─Te escucho, no soy sorda─ susurra ella.

─Pero me gustaría serlo─ le aclara.

─Quítate la manta... Mírame Cauli... Sonrieme, golpeame o haz cualquier cosa que solíamos hacer ─Me recuerda viejos tiempos, que no son tan viejos jaja.

Goku & Caulifla - Corazón Saiyajin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora