Goku & Caulifla - Corazón Saiyajin.

169: Día de descanso. [I]

Planeta de Bills.

─Viejo amargado, siempre le encanta tener la última palabra, menos mal que pronto se ira de aquí...─ Caulifla veía como Vegeta desaparecía en la distancia, pero Bills colocaría su mano en el hombro de la chica.

─¿Y quién se va a encargar de todo eso, chiquilla?─ con el dedo le señalaría los cráteres y los destrozos a lo largo de la superficie.

─Pues... ¿El?─ responde la saiyajin con total descaro mirando a Whis.

Whis niega con la cabeza.

─Deberían ser más considerados conmigo.

─Pero tu usas magia, es tan fácil arreglar las cosas de esa forma─ decía Goku.

─Ven viejo─ dijo Caulifla soltándose del agarre del dios para tomarle la mano al saiyajin de forma juguetona ─¡Vamos a seguir entrenando!

─¡Saiyajines tenían que ser!─ exclamaba Bills fastidiado.

Whis suspira ─Tómense el día libre mientras arreglo todos los destrozos que ocasionaron, no todo es entrenar, deberían ir a la Tierra y traer más capsulas con comida para todos.

─Es cierto, ustedes tres arrasan con la comida de este lugar, encima se están comiendo los peces de mi lago, que descaro─ dijo el dios mirando a ambos con mala cara.

Goku lo piensa por unos instantes, finalmente se decide ─¿Qué dices, Caulifla? ─¿Vamos a la Tierra por capsulas y nos distraemos un rato?

Caulifla se lo piensa.

─Me gusta como suena lo de distraernos un rato─ levantando el pulgar asiente ─¡Vamos!

Ya cuando Goku estaba a punto de teletransportarse junto a la saiyajin, Whis los detiene ─Antes de que se vayan, les pido por favor que traigan muchos postres, son para calmar al Señor Bills, recuerden que el es su anfitrión y les ha tenido mucha paciencia, de hecho a mi me sorprende que no se sobresaltara.

─Ahora que lo dices, c-creo que es cierto, ya no es tan amargado, hasta parece mas amistoso.

─De acuerdo Señor Whis, nos vemos─ responde Goku rodeando la cintura de Caulifla con su brazo para dejar el planeta del dios destructor junto a ella.

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Tierra.

Tras aparecer en el Palacio de Kamisama y saludar a Piccolo, Dende y Mr. Popo la pareja saiyajin vuela con rumbo a la Capital del Oeste.

─¿Seguro que Bulma te dará las capsulas?─ preguntaba Caulifla.

─Ella siempre se encarga de los caprichos del Señor Bills─ respondía Goku animado, acelerando y dejando a la chica atrás, muy pronto ella le alcanzaría y juntos harían una carrera.

Llegarían a la Corporación Capsula y seguirían a Bulma hasta la cocina, la humana se mostraría sarcástica en extremo, especialmente con Caulifla, la saiyajin comenzaba a perder la paciencia y Goku estaba sorprendido por la actitud asumida por su amiga de toda la vida.

─¿A ver cual es el problema qué tienes conmigo?─ pregunto Caulifla directamente al haber perdido la paciencia con la terrícola, con las manos colocadas firmemente sobre su cadera. 

Bulma tomaría un pequeño refrigerador portátil, lo llenaría de diferentes clases de postres y lo convierte en una capsula la cual toma y se la entrega al saiyajin.