One Shots | Joseph Quinn/Eddie Munson

Los Quinn's|Joseph Quinn

-¿Por qué me miras así? -Volteas a ver a Joe, que no te había quitado los ojos de encima, mientras tenía una taza de té en su mano.

Ni si quiera lo estabas mirando de vuelta pero puedes sentir la forma en la que te está mirando mientras ves a un par de miembros de la familia abriendo sus regalos con emoción.

Ya habías ido a visitar a la familia de Joe otras veces, de hecho hasta habías ayudado a decorar la casa para navidad este año, lo que sentiste como un gran paso, ambos sintieron que era un gran paso en su relación.

Era Navidad.

-Porque estoy feliz. -Respondió Joe.

-Es normal, es navidad. -Sonríes mientras uno de los más pequeños chilla al abrir su regalo.

Joe negó levemente con la cabeza.

-No es por eso que estoy feliz. -Él se acomoda para estar más cerca de ti, envolviéndote con uno de sus brazos y así acercarte a él.

-Entonces ¿Por qué estás feliz, señor Quinn? -Lo miras divertida.

-Estoy feliz porque estás aquí. -Responde mientras deja un beso sobre tú cabello. -Pero también porque es navidad. -Sonríe él.

No puedes evitar sonrojarte y sentir una presión en tú pecho al escuchar a Joe decir eso, tú mano busca una de las suyas, para tomarla y dejar pequeños círculos que dibujas con tú pulgar sobre su piel.

-Yo también estoy feliz. -Respondes. -Muy feliz.

Él se inclina un poco para presionar un beso sobre tus labios, se alejó un poco solo para mirarte y sonreírte brevemente para luego volver a dejar otro beso, un poco más largo esta vez.

-Joseph. -La voz del padre de él rompe el momento y el beso, ya que ambos se separaron. -Déjala, hay niños aquí. -Dijo en tono divertido.

-Eww. -Uno de los más pequeños murmura aún en el suelo con sus regalos. -Se están besando.

-Oh, déjalos. -La madre del niño, la tía de Joe, sonríe mirando al niño. -Son muy tiernos.

-Sí, déjanos. -Dice Joe. -Solamente espera a que encuentres una novia y empieces a traerla a casa para navidad, te haré "Eww" a ti.

Todos rieron un poco mientras el niño voltea los ojos para luego mostrarle la lengua a Joe y volverse directamente de nuevo a sus regalos.
Sin embargo al voltear a ver a Joe notaste que tenía un ligero rubor en las mejillas, probablemente por ser llamado por su padre en medio de un beso con su novia.

Apoyas la cabeza en el hombro de Joe y él presiona un delicado beso sobre tú cabello, y ambos ponen atención a cómo transcurre la festividad al rededor de ustedes.

Los niños aún tienen mucho que abrir, mientras que los adultos los observan sin aburrirse, de vez en cuando la madre de Joe toma alguna foto.
Entre más se desechan los papeles de regalo más chillidos hay de los niños.

El padre de Joe se acerca con una pequeña caja en la mano, envuelta en papel de regalo.

-Parece que aquí hay otro para ti. -Dijo él hombre dirigiéndose a Joe. -Debe haberse quedado detrás del árbol.

Oh. Mierda.

Ese era un regalo tuyo para Joe, pero era un regalo que no pretendías dárselo enfrente de toda su familia, querías dárselo cuando estuvieran los dos solos, recuerdas que cuando llegaron la noche anterior, Joe había tomado la bolsa con todos los regalos y los había puesto debajo del árbol.

Volteas a verlo rápidamente para intentar advertirle con la mirada, en un intento de que no abriera esa maldita caja en medio de la sala de estar en la casa de sus padres junto a toda su familia, pero parece que no entiende lo que estás intentando decirle, cuando empezó a romper una de las esquinas del regalo, morirías ahí mismo, estabas segura de eso.