Capítulo: 28. Carta a Ferdinand. (Parte 2)

356 40 2
                                    

Pdv: Myne

Cuando llegamos al templo, comencé a sentirme ansiosa y muy nerviosa, porque vería a Ferdinand de nuevo. No era totalmente consciente de lo mucho que lo extraño. Pero debo ser paciente, ya no falta mucho para que volvamos a estar juntos, y ser una familia otra vez. 

Aterrizamos en el patio del pozo, donde era más probable encontrar a un sacerdote gris, para seguirlo dentro del templo. Pero como siempre, dejamos a mi Lessy escondida y fuera del camino de cualquiera que pudiera tropezar con ella, por accidente. Después dejamos las dos piedras mágicas que hicimos con el polvo de oro dentro. Las cuales, contenían una gran cantidad de nuestro maná, los cuales eran idénticos. Asimismo dejamos a Tuuli cuidando a mi Lessy, con instrucciones específicas de que si alguien se acercaba demasiado, y estuviera en peligro de ser descubierta. Por ningún motivo o circunstancia bajara de mi bestia alta, ya que ese era el lugar más seguro para ella. Solo debía mantenerse en silencio y esperar a que regresáramos.

Una vez que le dimos instrucciones a Tuuli, comenzamos a caminar, en busca de un sacerdote o sacerdotisa gris para entrar al interior del templo. Tomadas de la mano caminamos hasta el pozo y nos quedamos allí esperando. "Tienes la carta contigo, verdad?". Yo pregunté a katy con nerviosismo.

Katy me miró con una ceja levantada y respondió. "Por supuesto que si, Myne. No estés tan nerviosa, todo saldrá bien". Luego de decir esto me sonrió con confianza y astucia mientras decía. "Estamos en la casa de los Dioses después de todo. Sus bendiciones son más fuertes aquí, no es así?". 

Esto último que dijo, no fue una pregunta, sino una afirmación. Y como si los Dioses la hubieran escuchado, Justo en ése momento un sacerdote gris se acercó al pozo con un balde. Cuando lo vi no podía creerlo, esto era ridículo, ya que el sacerdote gris era nada más y nada menos que Fran. Yo lo miré con la boca abierta muy sorprendida. 

Pero katy ante mi reacción, me miraba con una expresión divertida en su rostro, luego preguntó en un susurro en mi oído. "¿Es él?". Yo solo pude asentir con la cabeza. "Bien". Respondió ella, en un murmullo apenas audible. 

Ahora solo quedaba esperar a que terminara de sacar agua del pozo, para seguirlo dentro. Pero mientras esperábamos, otro sacerdote gris lo interrumpió. "Hermano Fran, que bueno que lo encuentro, recibí esta correspondencia para el sumo sacerdote esta mañana. Pero no he podido encontrar ninguno de sus asistentes. Bueno, hasta ahora, que lo encuentro a usted". Dijo el sacerdote gris, que de seguro era uno de los porteros. 

"Gracias hermano Dinn, se lo entregaré enseguida". Contestó Fran, recibiendo los documentos en sus manos.

Una vez el sacerdote gris llamado Dinn se fue. Fran dejó los documentos en la orilla del pozo, mientras terminaba de sacar el agua. En ése momento, katy aprovechó de meter la carta entre las tablas de madera y pergaminos, que reposaban sobre la orilla del pozo. Cuando Fran terminó de recoger el agua, tomó los documentos con mucho cuidado. Luego tomó el cubo de agua y se dispuso a caminar hacia el interior del templo, con rumbo a los aposentos del sumo sacerdote. 

Katy y yo lo seguimos sigilosamente y a una distancia segura. Al entrar en el interior del templo, continuamos caminando por los pasillos detrás de Fran, quien se movió rápido, pero con elegancia. 

'Ver las espaldas de Fran mientras lo seguía, era tan nostálgico'. 

Pronto estuvimos en la puerta de las cámaras del sumo sacerdote. En ese momento sentí que mi estómago se apretaba por los nervios y me sudaban las manos, algo que katy notó enseguida. Por esta razón, ella me dedicó una sonrisa tranquilizadora y me dio un apretón en la mano, para intentar calmarme. 

En ese momento Fran dejó el cubo de agua en el suelo y abrió las puertas. Pero como luego regresó por el agua, eso nos dio el tiempo y espacio suficiente para entrar a hurtadillas en la habitación sin mayor dificultad. 

Juego de Shumil gemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora