Capítulo: 134. Intento de envenenamiento.

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Pdv: Cattleya.

Todo iba bien en éste almuerzo hasta la llegada del “Boggart”. Primero el ambiente se agrió, y luego todos entraron en modo de auto defensa. Pude notar la falsedad en las disculpas vacías del “Boggart”, ante su tardanza. Era demasiado obvio que no lo sentía, en lo más mínimo.

Para cuando Verónica tomó su lugar en la mesa, nos miró con desdén a todos los presentes. Luego puso toda su atención a su querido hijo Sylvester, cambiando a un tono meloso y ridículo dijo. “Mi querido Sylvester te traje un obsequio especial. Es una verdadera bendición hecha por el mismísimo Vantole. Es uno de los pocos lujos que he podido adquirir desde mi segundo Geduldh, Ahrensbach. y quería compartirlo con mi querido hijo”.

Mientras el "Boggart" decía esto. También le dio indicaciones con la mano a su asistente, para que le entregara una elegante botella de vize, al mocoso de Aub.

“Gracias madre”. Fue todo lo que dijo el hermano mayor Sylvester, algo incómodo por la actitud tan desagradable de su madre. Quien tampoco sabía leer el ambiente, o simplemente no le importaba, la incomodidad de su propio hijo.

Pero de igual manera, en cuanto su propio asistente le sirvió el vize, y luego de probarlo él mismo por veneno, se lo entregó a su señor. ‘Eeeeh…… Si, definitivamente odio éste ambiente tenso, la desconfianza, y esa relación tóxica que tienen los nobles con su familia. Esto me recuerda un poco, a los tensos almuerzos familiares que tenía cuando era Hanna. Y tenía que sentarme a la mesa con mis idiotas hermanastros, y fingir que nos llevábamos bien. Aunque allí no había veneno, o una psicópata como Verónica……. Bueno, no dejé que me afectara entonces, por lo que no dejaré que me afecte ahora, verdad?. Así que alivianemos un poco el ambiente’.

Pensando en esto, yo dije. “Oye hermano mayor Sylvester, solo bébelo, está hecho por el mismísimo Vantole, no~?”. Yo dije en forma de burla al hombre mocoso, rompiendo el momento tenso e incómodo. Ya que él estaba dudando de beberlo, a pesar de que su sirviente ya le había hecho la prueba de veneno.

Ante mis palabras el mocoso de Aub, solo hizo una mueca de incomodidad. Pero aún así bebió el vize. Pude notar la sonrisa de satisfacción en el rostro del “Boggart”, al ver beber a su querido hijo, el vize que le había obsequiado.

Luego me miró con disgusto y altivez, diciendo. “Mocosa impertinente, que no te han educado apropiadamente?. No te han enseñado a respetar a la máxima autoridad del ducado?. Como te atreves a llamar hermano mayor a Aub Ehrenfest”. Comenzó a despotricar la bruja malvada, poniéndose en un lugar de superioridad.

Pero a mí no podía importarme menos. ‘¡Ja! Mirando de quien vienen las críticas. Esto es completamente ridículo’. Pensaba mientras el “Boggart” continuaba con su absurda y desagradable diatriba.

“¿Qué se puede esperar de unas mocosas criadas en el sucio templo?. Y además educadas por el bastardo de la familia?. Definitivamente educarte fue un completo desperdicio……..”.

“¡No te metas con mi familia, bruja malvada!”. Le gritó Rozemyne con los ojos brillando con todos los colores. Muy enojada y cabreada, por las palabras venenosas que escupía sin cesar el “Boggart”.

Pero yo rápidamente le di un apretón de “estoy bien” a Rozemyne para que se calmara, y no aplastara al “Boggart”. ‘No queremos que mi enfurecida hermanita, se transforme en “Hulk” y nos aplaste a todos, sin necesidad de ponerse verde y todo eso, en su desbocado alboroto’.

Entretanto, yo pensaba en esto. Pasé mi vista de Rozemyne al “Boggart”, a quien justo en ese momento, comenzaron a salirle unas horribles erupciones en la piel del rostro, debajo de su velo, aun eran muy visible en un rojo y enfurecido, “Boggart”. Quien se estaba preparando, para un segundo round de insultos. “Mocosa……”.

Juego de Shumil gemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora