Capítulo: 138. Mientras duermen. (Parte 4).

214 30 47
                                    


 

Pdv: Werdekraft.

 

La inesperada llegada de lady Holenna a través de la academia real, solo quería decir una cosa, problemas. Algo había sucedido en Ehrenfest, que trajo a la dama más rápido que Steifebrise. Por lo que yo di la orden de que guiaran a la dama directamente a mi despacho de inmediato. Quería hablar con ella lo antes posible.

Pero si algo malo sucedió, será mejor que Sieglinde esté presente durante el reporte de lady Holenna. Decidiendo esto, yo envié un ordonnanz a Sieglinde, para que viniera a mi despacho lo más pronto posible, ya que teníamos una urgencia entre manos.

Pronto llegó a mi despacho una agitada lady Holenna, quien rápidamente dio sus nobles saludos. La preocupación en sus ojos, decía que algo muy grave había sucedido. “Lady Holenna, que inesperada sorpresa. Creo que Dregarnuhr la Diosa del tiempo, a entretejido los hilos de nuestros destinos, de manera inesperada y apremiante”. Yo saludé a la agitada dama.

“Si, Aub Dunkelfelger. Me temo soy portadora de muy malas noticias. En éste momento Chaocipher, se ha apoderado de Ehrenfest. Y yo bajo la protección del sudario de Verbergen y la ayuda de Steifebrise, logré escabullirme con éxito, antes de que me impidieran salir del ducado, para convertirme en Ordoschnelli y traer las noticias de lo sucedido....”. Después de decir esto, comenzó a dar su reporte sin demora ni pérdidas de tiempo, una ansiosa lady Holenna.

Pero yo la detuve. “Espere lady Holenna, es obvio que algo muy grave a sucedido. Pero he convocado a Sieglinde, para que esté presente durante ésta conversación. Ella debe venir en camino”. Yo dije a la agitada dama, indicándole que tomara asiento.

Luego continué hablando. “Así que, esperémosla con una taza de té”.

Después de decir esto hice que mis asistentes le sirvieran una taza de té, entretanto esperábamos a Sieglinde. Yo le hice algunas preguntas, sobre cómo iban las cosas entre Galadrihel y Aub Ehrenfest. Ante mi pregunta lady Holenna entendió enseguida, lo que realmente quería saber.

La dama leyendo entre líneas respondió algo que no me esperaba. “Bluanfah ha bailando para mi hija por su prometido lord Sylvester, y espera con muchas ansias su nudo estelar”.

Ante la respuesta de lady Holenna, yo abrí mucho los ojos. Estaba realmente sorprendido. ‘¿Pero que ha sucedido, en Ehrenfest, en tan poco tiempo?’. Fue lo que me pregunté en mi mente algo alarmado.

‘Galadrihel tenía una misión, obtener a lord Ferdinand, la chica guardaba un Rafel para  él. A caso abandonó su misión y decidió quedarse en Ehrenfest?’.

Pero la misma lady Holenna contestó mis preguntas, que la dama pudo leer en mi expresión. “Aub Dunkelfelger, verá, lord Ferdinand está muy encariñado con sus prometidas y alumnas. El hombre hizo un juramento de protegerlas y jamás dejarlas solas… El hilo de su destino, ya está muy atado y entrelazado al destino de esas niñas”.

Al oír las palabras de lady Holenna, yo lo entendí. En el momento en el que Galadrihel escuchó esto, y vio que lord Ferdinand no saldría de Ehrenfest, comenzó con el plan de respaldo; quedarse en Ehrenfest y ser la primera dama, para apoyarlo.

Mientras yo entendía esta situación con decepción y sorpresa a partes iguales, porque yo realmente creí, que Galadrihel lo lograría. Pero al parecer me equivoqué…

Justo en ése momento entró Sieglinde en mi despacho. Al ver a lady Holenna allí conmigo, rápidamente entendió que algo había sucedido al igual que yo. Lady Holenna dio sus nobles saludos a Sieglinde, quien le devolvió sus cordiales saludos, y luego tomó asiento en el sofá a mi lado. Luego pedí a mi asistente que instalara la herramienta mágica anti espionaje, elevando la barrera y limpié la habitación de sirvientes.

Juego de Shumil gemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora