Capítulo: 27. Carta a Ferdinand. (parte 1)

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Pdv: Katy

Cuando volvimos a casa, Myne se había desplomado en la entrada, y por suerte, mamá estaba ahí para ayudarme. La verdad, no sé ni como subí las escaleras con Myne arrastras, pero lo había logrado con éxito. Sin embargo, en cuanto vi a Myne sana y salva en la cama, caí en la inconsciencia justo en frente de mamá.

"¡¡¡Katy!!!". Fue lo último que escuché, luego todo se oscureció...

Cuando desperté, ya era de día y Myne estaba acostada a mi lado aún inconsciente. Entonces toqué su frente para comprobar su temperatura y ella tenía mucha fiebre. Por lo que me levanté como pude, y aunque aún estaba mareada y débil, me forcé a caminar por la habitación, y tomé la bolsa con piedras mágicas. Saqué la última de Shumil que teníamos y regresé a la cama, luego canté con todo mi corazón la oración de curación a Heilschmerz.

Al Terminar la oración, vi cómo luces verdes volaron hacia Myne. Luego me desplomé de nuevo sobre la cama. 'Por favor Diosa, dale tu curación a mi hermanita....'. Fue lo último que pedí, antes de perderme en la bruma de la inconsciencia, una vez mas...

Para cuando volví a despertar, lo primero que vi fue a Myne llorando. Y en cuanto vio que estaba despierta, se lanzó a mis brazos sin dejar de llorar, hundiendo su rostro en mi cuello, dijo entre sollozos. "¡Katy me asustaste, no despertabas.... shniff.... ¿Por qué usaste la curación de Heilschmerz, en mí?.... shniff.... Si tú estás tan enferma y débil como yo...?!". Ella preguntó con dificultad.

"Ni siquiera deberías preguntarme eso, hermanita tonta, olvidas que yo soy la mayor? Debo cuidar de mi hermanita, no? Además, no acabas de hacer lo mismo por mí?". Yo le respondí abrazándola y besando su frente para consolarla.

"Eres mayor solo por unos cuantos minutos.... Eso no es nada". Refunfuñó Myne enterrando su rostro en mi pecho. A ella no le gustaba que le recordara este hecho, ya que le gustaba ser la mayor, por eso siempre evitaba mencionarlo y la dejaba actuar como mi protectora hermana mayor.

Mientras yo pensaba todas estas cosas tontas, nos quedamos por un momento en silencio, y esperé a que Myne se calmara. Luego hablé nuevamente. "Myne, tenemos que entregar la última carta".

"Si, lo sé". Fue todo lo que dijo Myne, en respuesta.

En ese momento, entró Tuuli en la habitación. "Myne, katy, están despiertas? ¿Cómo se sienten? ¿Necesitan algo? Lo que sea, solo pídanlo". Preguntó Tuuli preocupada, porque ya hacía un tiempo que no nos enfermábamos de esta manera.

"Gracias Tuuli, me gustaría un poco de agua". Yo pedí.

"Si, yo también". Pidió Myne.

"Bien, enseguida se las traigo". Dijo Tuuli saliendo de la habitación a toda prisa.

"Tenemos que decirle a Tuuli sobre esto. Tenemos que entregar la carta hoy, no podemos retrasar la entrega por más tiempo". Myne dijo esto con preocupación.

"Tienes razón hermanita, pero no creo que Tuuli nos deje salir de casa hoy". Yo respondí de forma pensativa. "Además, gastamos en la oración de Heilschmerz, la última piedra de Shumil que teníamos, recuerdas?". Yo Continué nombrando los problemas que teníamos por delante. Lo último que quería, era que nos precipitáramos en esta misión a lo loco, sin los preparativos necesarios. Ya que esta iba a ser la entrega más importante y peligrosa de todas.

"Entonces que hacemos Katy? ¿No la entregaremos hoy?". Preguntó mi gemela con una expresión de preocupación en su rostro.

"No te preocupes Myne, tengo una idea... que espero por el bien de la misión funcione". Yo dije frotando mi barbilla deforma pensativa.

Juego de Shumil gemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora