Ya había llegado el gran día, hoy finalmente entrábamos a Hogwarts. La mayoría de los que estábamos en la madriguera dábamos vueltas como locos de lo nerviosos que estábamos. Incluso los gemelos, que ya llevaban algunos años, también estaban nerviosos.
Mi hermana y yo nos dedicamos a bajar nuestros baúles al salón con ayuda de los gemelos. Luego ayudamos a Ron a bajar el suyo y mas tarde ayudamos a los gemelos a bajar los suyos.
La voz de la señora Weasley sonaba por toda la casa. Podría afirmar que ella estaba mas nerviosa que todos nosotros juntos. Pero aquel nerviosismo aumentaba aun mas con las bromas que los gemelos se dedicaban a gastarle.
Mi hermana y yo ayudamos a poner la mesa, mientras que Ron intentaba parar a los hermanos para que dejaran de gastar bromas a su madre. El señor Weasley e encontraba haciéndole un hechizo agrandador al coche, para que pudiésemos ir todos sin ninguna molestia.Una vez que el desayuno estaba listo todos corrimos a la mesa a desayunar, puesto que la noche anterior no habíamos comido casi nada estábamos hambrientos. Ron, retomando su vieja costumbre, fue el que mas comió de todos nosotros. Tanto mi hermana como yo nos limitamos a comernos unas cuantas tostadas acompañadas con jugo de calabaza. El desayuno paso rápidamente gracias a los gemelos, los cuales nos sacaban a todos de nuestro nerviosismo hablando de todas las bromas que tenían planeadas. En cuanto el desayuno termino, la señora Weasley lo recogió todo con un movimiento ágil de varita, puesto que esta vez no teníamos tiempo para recogerlo todo al estilo muggle. El señor Weasley ya había subido todos los baúles al coche con la ayuda de Ron, lo único que faltaban eran las mascotas. Ron tomo a su ratón mientras que mi hermana y yo tomamos a nuestras respectivas lechuzas, y nos subimos al coche para emprender el camino a la estación. Ginny se sentó con los gemelos, mientras que yo me senté entre mi hermana y Ron, el cual aún continuaba con sueño, por lo que apoyo su cabeza sobre mi hombro y se echo a dormir. Mi hermana sacó el profeta y se enfrasco en el, hablándome de vez en cuando de las estúpidas ideas del ministerio y haciendo que el señor Weasley riera mas de una que otra vez.
Tras un rato, que para mi fue corto, definitivamente habíamos llegado a King Cross, la estación donde tomaríamos el tren rumbo a Hogwarts. Desperté a Ron, el cual aún continuaba durmiendo, y salí del coche para coger mi baúl y a mi lechuza. Cuando todos habíamos sacado nuestras cosas, las subimos a un carrito cada uno y tomamos el camino que nos indicaba la señora Weasley.
Atestado de muggles como siempre -comentó la señora Weasley mientras
nos dirigíamos hacía nuestro andén.Todos nos reímos ante aquel comentario. Realmente aquello estaba lleno de muggles, incluso Ron casi tira todas sus cosas al intentar esquivar a uno que pasaba muy pegado a él. En cuando llegamos a nuestro andén la señora Weasley nos explico como debíamos pasar. Los gemelos, acompañados del señor Weasley, fueron los primeros que cruzaron, puesto que ellos ya sabían como debían hacerlo. Ron fue el siguiente que paso, después fue mi hermana y tras ella fui yo. Luego llego la señora Weasley acompañada de Ginny, la cual miraba todo con gran asombro al igual que Nazaret y yo. El señor Weasley se ofreció a llevar todas nuestras maletas a los compartimentos, lo que le agradecimos mucho ya que pesaban bastante para nosotras.
Chicos, ya sabéis -dijo la señora Weasley mirando a los gemelos- nada de bromas, no quiero más cartas sobre lo mal que os portáis. Y vosotros -nos miro a Ron, a mi y a Nazaret- seguid portándoos tan bien como lo hacéis, estudiad mucho y no os metáis en líos -sonrió- Ahora me gustaría hablar con Mar, a solas -aclaro mirando a los demás-
Chicos id vosotros y buscad un compartimento, ahora iré yo -les dije con una sonrisa- Dígame, señora Weasley.
Eres la que mejor te llevas con Ron, por eso quiero que le protejas -me comentó la señora Weasley- Se que en Hogwarts puede haber niños muy crueles, y ya sabes que llevar el apellido Weasley indica que se van a meter contigo y no quiero que le hagan eso a mi niño -al terminar se le escapó una lagrima-
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Complicated Love
RandomMar y Nazaret Blackesley son dos hermanas con una familia bastante conocida. Toda su familia había contado siempre con una buena fortuna, por lo que ambas eran por así decirlo ricas, pero eso no les hacían creerse más que nadie. Mar era una chica de...