Castigo.

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Nazaret POV.

Me pase todo el día ignorando a Draco. Aunque sabía que tendría que lidiar con él durante el castigo de esta noche no quería hablar con él. Estaba molesta por lo que le había hecho a Neville y por haberse chivado a Mcgonagall. Me senté lejos de él en las clases, le ignoraba cuando me hablaba, le ignore a la hora de la comida y aún continuaba haciéndolo. Draco intento hablar conmigo varias veces pero en todas le ignore y me fui dejándole con la palabra en la boca. Me envió unas cuantas notas, las cuales le devolví sin ni siquiera leerlas. Al no pasar el día con Draco, Pansy estuvo con el todo el día con él sin problema alguno. 

Cuando las clases terminaron definitivamente me dirigí hacía mi sala común para terminar de hacer algunos trabajos y para estudiar. Escuche a Draco llamarme, pero lo ignore. Entre en mi sala común y me senté en una de las mesas que había libres. Saque mi pergamino y mi pluma y me dispuse a terminar el trabajo de Herbologia. La sala común estaba totalmente en calma, puesto que últimamente los estudiantes se encontraban en la biblioteca para prepararse para los exámenes. Pero aquella paz acabo cuando escuche a alguien entrar y me encontré con la silueta de Draco. 

Tenemos que hablar -me dijo Draco mientras se acercaba- 

No tenemos nada de que hablar -le dije mientras cogía mis cosas-

No te vi ir con ellos y tampoco te vi en la cabaña -dijo Draco- Te dije que intentaría no molestarlos pero es difícil. No quería que te salpicara a ti también.

¡Como no iba a estar allí si son mis amigos! -exclame enfadada- Además, tampoco debiste hacerle eso a Neville, él no te ha hecho nada. Pero ¿Sabes que? Me alegro de que te chivaras, porque la jugada te exploto en la cara. 

Soy un estúpido. Ese estúpido y infantil comportamiento me sale solo -murmuró Draco- ¿me perdonaras?

Nos vemos en el castigo -le dije ignorando su pregunta y subiendo a mi cuarto-

Decidí irme a mi cuarto a hacer los deberes, puesto que Draco no podría subir allí. Me senté en mi cama y pase toda la tarde haciendo deberes y estudiando. Cuando la noche cayó guarde todas mis cosas, puesto que debía ir a cumplir mi castigo junto a mis amigos antes de la cena. Salí de mi cuarto y de la sala común con paso rápido y firme, no quería volver a encontrarme con Draco. Llegue a la entrada del castillo, donde ya estaban mis amigos junto a Draco y Filch, quien nos llevaría a la cabaña de Hagrid.

Es una pena que prohibieran los castigos antiguos -comentó Filch mientras nos guiaba- Aún recuerdo como los colgaban de los pulgares después de clase. Dios mío, extraño los gritos.

Todos nos pusimos pálidos y tragamos duro. Incluso Draco, que se las daba de fuerte, se puso también más pálido que nosotros. Continuamos nuestro camino a duras penas y justo cuando llegábamos a la cabaña de Hagrid este salía de ella.

Cumpliréis vuestro castigo con él -nos indico Filch- Tiene unas cosas que hacer en el bosque oscuro. Te traigo unos niños patéticos -fijo su mirada en Hagrid quien aguantaba unas lagrimas- No seguirás molesto por ese maldito dragón ¿verdad? 

Se llevaron a Norbert -nos comentó  Hagrid con pena mientras agarraba un arco con flechas- Dumbledore indicó que lo llevaran a Rumania a vivir en una colonia.

En aquel momento sentí tanta pena de Hagrid que no pude evitar lanzar una mirada llena de enfado hacía Malfoy, quien se dio cuenta de que le estaba mirando y me miro de vuelta. 

Eso es bueno ¿no? -pregunto Hermione- Estará con sus iguales. 

¿Y si no le gusta Rumania? -nos pregunto Hagrid- ¿Y si los demás dragones lo tratan mal? No quiero ni pensarlo. 

Complicated LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora