Complicated Love

¡Quítate el guardapelo!

Ron POV.

Llevábamos días caminando y cambiando de sitio. La comida comenzaba a hacerse escasa y cada vez era más difícil conseguir algo decente que llevarse a la boca. A veces, Mar y Nazaret, transformadas en su forma animal, conseguían traer buenas piezas para comer, pero la mayoría del tiempo la suerte no nos sonreía tanto.

¿En que piensas? —pregunta Mar sentándose a mi lado cuando finalmente logramos encontrar un nuevo sitio—

En lo agotador que es todo esto. —respondo, soltando un suspiro— Y en lo que me duele el maldito brazo.

¿Puedo? —pregunta Mar acercando su mano hacia mi brazo—

Asiento y la veo quitarme el cabestrillo que me sujetaba el brazo. Su mano se apoya suavemente en mi brazo y el dolor comienza a aliviarse. Veo como sus venas comienzan a notarse más en sus manos y comienzan a ser más presentes por todo su cuerpo.

¿Qué estás haciendo? —pregunto al ver como cierra los ojos—

Te alivió del dolor. —responde Mar apartando su mano suavemente y poniéndome de nuevo el cabestrillo—

Mejor dicho, tu asumes mi dolor. —inquiero observando cada uno de sus movimientos—

Puedo con cualquiera de los dolores. —dice Mar con una leve sonrisa—

Cariño....—acaricio suavemente mi mejilla con mi pulgar— No tienes que hacerte la dura conmigo. 

Sus ojos conectan con los míos y veo como comienzan a llenarse de lágrimas que han sido acumuladas por días y días. Su labio tiembla y noto como si intentará deshacerse de todo el dolor que la posee. Mar se levanta y las lagrimas finalmente salen de sus preciosos ojos, unos ojos que reflejan mucho dolor.

¡No puedo con todo esto! —exclama Mar señalando el bosque— ¡No puedo seguir huyendo y hacer como si todo estuviese bien! ¡No puedo seguir viendo como mi hermana sufre sin que yo pueda hacer nada! ¡No puedo más!

Mar... —dice Nazaret a sus espaldas—

¡Ni Mar ni hostias! —grita Mar encarando a su hermana— ¡Estoy harta de toda esta mierda! ¡Estoy harta de hacer lo que hago sin saber porque! ¡Estoy harta de esta puta basura!

Quítate el guardapelo ahora mismo. —le ordeno— 

No voy a quitarme el guardapelo. —niega Mar agarrando el guardapelo con fuerza—

Si no es a las buenas será a las malas. —dice Nazaret—

Mar la mira amenazadoramente y camina rápidamente hacia ella para encararla. Nazaret, que ni se ha movido, la mira tranquilamente. Cuando Mar casi llega a su lado, cae de rodillas, como si unas cuerdas tirarán de ella. Con solo mirarla, su hermana ha conseguido que cayese de rodillas y poco a poco la ha dejado inconsciente con tan solo usar la magia.

Dormirá durante unas horas. —dice Nazaret quitándole el guardapelo a su hermana y poniéndoselo—

Ha sido increíble lo que has hecho. —digo asombrado—

Venía en el libro que Dumbledore nos dejo como herencia a mi hermana y a mi. —comenta Nazaret encogiéndose de hombros— No es para tanto, créeme. 

Para mi todo esto es alucinante. —sonrió levemente— Y lo seguirá siendo aunque pase mucho tiempo.

Nazaret me dedica una leve sonrisa y con un poco de magia es capaz de trasladar a su hermana dentro de la tienda y dejarla en su cama. Hermione y Harry están hablando del guardapelo y de algunas cosas las cuales no logro escuchar porque no les presto ni la más mínima atención.

Lo único que lleva preocupándome días y días es que todos estemos bien y que salgamos vivos de todo esto. Cada vez son más los dementores que hay por cada esquina, poniéndonos más difícil el hecho de trasladarnos y escondernos. Y no solo eso, la conversación que escuchamos hace unos días de Dean, el padre de Tonks y unos duendes no me dejo para nada tranquilo.

Ginny, mi pequeña y querida hermana, estaba en un grave peligro y yo no podía hacer nada porque estaba en una especie de excursión por el campo que no nos llevaba a ningún lado. Estábamos en un callejón sin salida y nadie quería darse cuenta. 

Todo esto acabara pronto. —dice Nazaret mientras se sienta junto a mi—

Eso espero. —suspiro, aferrándome al último ápice de esperanza que me queda— ¿Le extrañas? 

Como si no hubiera un mañana. —responde Nazaret tocando su anillo— Al menos se que de momento está bien. 

Él es listo, no le pasará nada. —la animo frotando su espalda—

Ha hecho muchas cosas que a Voldemort no le gustan. —dice Nazaret y me encojo al escuchar su nombre—

Saldrá de todo lo que se le interponga. —insisto con una sonrisa— Tu le mantienes fuerte.

Nazaret sonríe. Paso mi brazo por sus hombros y ella apoya su cabeza en mi hombro. Para ella es más duro que para ninguno, porque yo al menos cuento con Mar, Hermione aunque no tenga a George aquí sabe que estará bien y Harry sabe que mi hermana saldrá de está, además de que ninguno de ellos sirven al que no debe ser nombrado.

A pesar de todo, se que Draco es un chico listo y fuerte que saldrá de esta y de mil cosas más. Todos estamos pasando momentos difíciles, unos más que otros, pero sin duda alguna todos los sufrimos a nuestra manera. 

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¡Hola a todos mis queridos lectores! Paso por aquí para deciros que he inscrito mi novela para los premios Wattys y, con todo mi corazón, espero que os paséis por hay y votéis a favor de esta querida historia. Os lo agradecería de todo corazón. 

Un saludo a todos mis adorables lectores.