Complicated Love

Los Mundiales.

Mar POV. 

¡Arriba! ¡Es hora de levantarse! —grito la señora Weasley entrando en la habitación—

Ay no, déjenos dormir un poco más, por favor. —rogué volviendo a cubrirme con las sabanas—

Nada de eso jovencita. Si no os levantáis ahora no llegareis. —dijo la señora Weasley con los brazos cruzados— Si no os hubierais pasado la noche jugando hubierais dormido más. Tenéis cinco minutos para vestiros y bajar a desayunar jovencitas.

¿Y si nos saltamos el desayuno? —pregunto Nazaret cubierta hasta la cabeza de sabanas—

Aquí nadie va a saltarse el desayuno, así que ya podéis levantaros. —respondió la señora Weasley saliendo de la habitación—

En cuanto la señora Weasley salió por la puerta, solté un suspiro y me despoje de todas las sabanas que me cubrían. Era una de las personas que más odiaba levantarse a horas tan tempranas, pero no podía hacer nada respecto a ello. Me levante de la cama y comencé a sacar la ropa que usaría para hoy y la que me llevaría para los días que tuviésemos que están en los mundiales. Para el día de hoy opté por unos vaqueros, una blusa de color rosa y unas botas de color negro bastante cómodas por si teníamos que caminar mucho. Mi hermana también optó por ropa cómoda, se puso unos vaqueros, un top de color azul y unas deportivas bastante cómodas. Ambas bajamos al comedor, soltando unos cuantos de bostezos durante el camino. 

Buenos días chicas —dijo el señor Weasley en cuanto entramos a la cocina—

Buenos días señor Weasley. —dijo Nazaret soltando un bostezo—

¿Alguien puede decirme porque debemos levantarnos tan temprano? —pregunto Fred entrando a la cocina—

¿Y porque Charlie, Bill y Percy continúan durmiendo? —continuó George—

Charlie, Bill y Percy se aparecerán a medio día, por lo que pueden dormir hasta más tarde. —respondió la señora Weasley entrando a la cocina seguidas de Ginny y Hermione—

¿Y porque nosotros no podemos aparecernos? —pregunto Harry entrando a la cocina junto a Ron—

Porque todavía no habéis pasado en el examen, en el momento que lo hagáis podréis apareceros libremente. —respondió el señor Weasley—

Todos nos sentamos a desayunar entre bostezos y demasiado sueño. Aún no continuaba entender como lográbamos mantenernos de pie cuando habíamos dormido tan pocas horas. Incluso Ron, que solía comer el doble que todos, comió bastante menos esta mañana. 

Tras un rápido desayuno, todos agarramos nuestras mochilas, que contenían un poco de ropa y objetos varios y nos encaminamos fuera de la madriguera para juntarnos con el señor Weasley, quien sería el encargado de guiarnos durante todo el camino. Una vez que todos estábamos reunidos fuera de la madriguera, comenzamos a caminar por varios senderos y montañas bastante dificultosas para la mayoría de todos nosotros.

¿A donde se supone que vamos? —pregunto Harry mientras subíamos otra montaña—

El ministerio ha puesto como solución muchos trasladores en algunos puntos, ya que tenían que viajar muchos magos sin ser vistos. —respondió el señor Weasley— Han puesto objetos comunes, para que los muggles no se extrañen. 

Suponemos entonces que nosotros estamos yendo hacía el traslador. —dijo Ron—

En efecto Ron, debemos estar llegando. —dijo el señor Weasley mirando por todos lados—