Cada pareja tiene sus peleas tontas.

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Ron POV.

Nos encontrábamos desayunando mientras esperábamos a Harry para tener la primera clase del día. Me encontraba junto a Ginny, Hermione y Mar. Ginny y Hermione hablaban de vestidos o algo así y Mar estaba centrada escribiendo nuevas tácticas para el próximo partido mientras que desayunaba.


Buenos días. —dijo Harry sentándose a mi lado— ¿Qué tal todo?

He tenido que soportar otra horrible fiesta de Slughorn. —respondió Ginny—

A la siguiente no te libras, Harry. —le advirtió Mar—

De hecho, ya no puedes librarte. Slughorn me pidió que revisará todas tus noches libres y ya es consciente de que puedes. —comento Hermione—

Va a realizar una de navidad a la que tienes que asistir. —dijo Mar apartando el pergamino donde escribía— 

Y esa otra fiesta es para los favoritos de Slughorn ¿verdad? —pregunte de mala gana—

Si, solo para el club de Slug como lo llama él. —respondió Mar—

Club Slug. —repetí con el mismo desprecio con el que Malfoy hablaba muchas veces— Es patético. Bueno, espero que disfrutéis de la fiesta. Y tu, querida Mar, podrías intentar relacionarte con McLaggen y ser el rey y la reina. Vi como ligaba contigo en las pruebas.

Pues si lo viste debiste ver también como le di largas. —me espeto Mar— Además, resulta que estaba por invitar a mi novio, pero si él cree que todo esto es estúpido y que debo intimar con McLaggen lo hare.


Mar apartó su plato de un manotazo, tomo sus cosas y salió del gran comedor echando humo por las orejas. Suspire y desee que la tierra me tragase en este momento. 


¿Alguna vez vas a dejar de cagarla con ella? —pregunto Ginny levantándose—

Espero que algún día si. —respondí— 


Me levante y seguí a Ginny a través de los pasillos en busca de Mar, mientras deseaba que pudiese haber cerrado la boca a tiempo. La vi en la entrada a la sala de Gryffindor, hablando con Dean y convirtiéndolo en el sustituto de Katie Bell. 


No puedes convertir a Dean en miembro del equipo. —le dije a Mar cuando Dean se fue—

¿Por qué no? —pregunto cruzándose de hombros—

¡Porque sale y se besuquea con mi hermana! —respondí—

Si nos basamos en esa regla, tu no podrías estar en el equipo. —me espeto Mar—


Suspire y la vi pasar junto a mi y marcharse con Ginny. Realmente tenía razón, si seguía mi estúpida regla yo tampoco podría estar en el equipo. Las seguí a ambas hasta que se despidieron, ya que Ginny tenía otra clase diferente a la nuestra por ir un curso detrás de nosotros. 

Después de tener dos clases bastante intensas, comí un poco y me dirigí hacía el primer entrenamiento que teníamos después de lo ocurrido con Katie Bell. 

El entrenamiento fue bastante intenso y entre lo sucedido con Mar y los nervios no daba ni una. Incluso dañe a una compañera en un mal movimiento. 


¡Estúpido, mira que haces! —me grito Ginny—

¡Ginevra! —grito Mar— ¡Que sea la última vez que insultas a alguno de los miembros! ¡No eres capitana y no tienes derecho de ser así! Tu entrenamiento termino, vete.


Ginny, enfadada y roja como un tomate a causa del enfado, descendió y bajo de su escoba de mala gana. A pesar de estar enfadados, admiraba y me enamoraba que Mar fuese así siempre. A pesar de que se llevase a matar con una persona, siempre actuaria justamente. Era una chica con unos grandes derechos.


¿Podemos hablar? —le pregunte a Mar cuando el entrenamiento acabo—

No hay nada de que hablar. —respondió Mar quitándose la equipación—

Sabes que no quería decir eso, solo me enfada que siempre tengas que ir a esas estúpidas fiestas sin mi. —le dije agarrando sus manos— 

Odio ir a esas fiestas sin ti y siempre estoy deseando irme. —comento Mar mirándome a los ojos—

¿Me llevaras a la fiesta entonces? —le pregunte acariciando su mejilla—

Claro que si, pecoso. —respondió Mar con una sonrisa depositando un beso en la punta de mi nariz—


Ambos sonreímos y nos miramos sin importarnos nada mas. Podríamos pelearnos a más no poder y tener discusiones fuertes, pero siempre acabamos arreglándolo a pesar de todo. 

Nos cambiamos rapidamente y nos dirigimos al castillo para hacer los deberes que teníamos atrasados. Cuando llegamos al segundo piso, nos encontramos a mi hermana y Dean besándose ferozmente como si estuviesen pegados.


¡Basta! —exclame rapidamente—

¿Qué pasa? —pregunto Ginny—

No quiero encontrar a mi propia hermana besuqueando gente en público. —respondí de mala gana—

Vámonos a la sala común. —dijo Dean tirando de Ginny—

¡Ve tu! —dijo Ginny enfadada— Quiero hablar con mi hermano. 


Dean nos miro a Mar y a mi y abandono el pasillo rápidamente sin volver a mirar atrás. 


No es tu problema con quien salgo. —me espetó Ginny—

Claro que lo es, soy tu hermano. —dijo Ron— No quiero que piensen que  mi hermana es una..

¿Una que? —pregunto Ginny sacando su varita y apuntándome—

Con todos mis respetos...—dijo Mar desarmando a Ginny con un movimiento de manos— ninguno queremos que te vean como una puta. 

Tu te besas con esta y no por eso eres un mujeriego. —dijo Ginny señalando a Mar—

Mar y yo llevábamos amándonos mucho y no es lo mismo. —dije soltando un suspiro— 

No pienso discutir esto, Ronald. —soltó Ginny— Me besare con Dean te guste o no, así que vete acostumbrándote. 


Ginny paso por mi lado dándome un leve empujón y maldiciendo en un susurro. La miré irse mientras Mar acariciaba suavemente mi espalda, intentando que me sintiese mejor.


Ya se le pasara, tranquilo. —dijo Ma  con una leve sonrisa—

Nunca la había visto tan molesta. —suspiré—

Todos los hermanos tienen sus problemas, pero siempre se solucionan. —insistió Mar acariciando mi pelo—


La miré con una sonrisa y entrelace nuestras manos para volver a ponernos en camino hacía la sala común, donde intentaríamos adelantar trabajo. Eso si no acabábamos como siempre; acurrucados en el sofá frente a la chimenea y teniendo una sesión de besos que posiblemente acabaría en algo más, como siempre. 


Complicated LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora