Complicated Love

La visita de Charlie y el anunció de los dragones.

Mar POV.

Los días continuaron pasando y le tensión de las demás casas contra la de Gryffindor era demasiado palpable. Incluso los de Beauxbatons y Durmstrang se dieron cuenta de que algo no iba bien. Desde que pelee con Ron, pasaba más tiempo en la biblioteca, intentando mantener mi mente entretenida y no pensar mucho en aquel tema. Al menos tenía compañía. Hermione, que siempre se encontraba en la biblioteca, se sentaba conmigo y mi hermana, que había discutido fuertemente con Draco, también comenzó a refugiarse en la biblioteca para mantener la mente distraída. Durante esos días, me había fijado como Viktor Krum frecuentaba la biblioteca con interés y se dedicaba a observar a Hermione. Al mismo tiempo que me di cuenta que Blaise Zabini, el amigo Slytherin de mi hermana, también había comenzado a visitar la biblioteca con frecuencia. Seguramente, querría asegurarse de que mi hermana estaba bien. 

¿Mar y Nazaret Blackesley? —nos pregunto un chico de primero en voz baja—

Si, somos nosotras. —respondí, dirigiendo mi vista hacía el chico—

Tenéis visita. Os esperan en la entrada del castillo. —dijo el chico, para después irse de la biblioteca—

Mi hermana y yo nos miramos extrañadas. Al principio, pensé que serían nuestros padres, pero luego recordé que estaban hasta el cuello de trabajo y no tenían tiempo para nada. Ambas nos despedimos de Hermione y, dándole vueltas al tema de quien sería, salimos de la biblioteca y nos encaminamos a la entrada principal de Hogwarts. Durante todo el trayecto, nuestro paso fue acelerado. Estábamos deseosas por saber quien venía a visitarnos en estos días. En cuanto pusimos una pie fuera de la entrada y vi aquella figura de espaldas, supe inmediatamente quien era.

Charlie... —pronuncie en un susurro—

¡Mar! ¡Nazaret! —exclamo Charlie, mientras nos daba un abrazo— Que alegría me da volver a veros. 

Nos viste hace muy poco. Además, estoy segura de que te alegras mas de ver a alguna de las dos. —dijo Nazaret, con una leve sonrisa—

Tengo algo que enseñaros. Ron ya los ha visto y se ha quedado impresionado. —comento Charlie mientras comenzaba a caminar hacía el bosque prohibido—

¿Qué tal esta Ron? —le pregunte mientras mi hermana y yo caminábamos tras él—

No esta en sus mejores días, me ha comentado que has dejado de hablarle y no sabe porque. —respondió Charlie, encogiéndose de hombros— También me ha comentado lo de Harry y todo eso. 

Suspiré. Odiaba estar así con Ron como la que más, pero sus palabras habían dolido como puñales y no podía actuar de otra manera. Siguiendo a Charlie, nos adentramos en el bosque prohibido. A medida que nos acercábamos, unos escalofriantes sonidos comenzaban a escucharse con más y más fuerza. Tras cruzar unos árboles, nos encontramos con los animales que emitían aquellos sonidos. Cuatro grandes dragones, cada uno atado y al cuidado de un cuidador, rugían y tiraban de sus caderas sin control alguno.

La primera prueba serán los dragones. —nos comentó Charlie, observando a los dragones—

Son impresionantes. —dijo Nazaret con admiración, mientras los observaba—

Si que lo son. —afirmé con una sonrisa— ¿Podremos decírselo a Harry? 

Claro, una de las razones por las que os he traído era para que informarais a Harry. —respondió Charlie con una sonrisa—

¿Y cuales son las otras razones? —pregunto Nazaret, mientras avanzábamos hacía los dragones—

Bueno, las otras son que amáis a los animales y no dejaría que os perdierais esto y que deseaba veros. —dijo Charlie— Podéis tocarlos sin problemas.