Venganza.

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Draco POV.

La cosa no iba bien y no podía estar más angustiado de no saber que estaba pasando. Mi anillo se había puesto frío una hora después de que Nazaret se fuera, avisándome de que estaba en grave peligro y yo no podía hacer nada porque no sabía ni donde estaba. 

Decidí pasearme por el castillo para intentar mantener la cabeza fría, pero no funciono. No paraba de darle vueltas a las miles de cosas horribles que podrían estarle pasando a mi chica en este momento. 

Pase por el despacho de Dumbledore y la vi saliendo de allí con el resto de sus amigos. Muchos de ellos estaban heridos y sus ropas manchadas de sangre, pero lo más notable eran sus tristes rostros.


¡Nazaret! —grite, consiguiendo que ella se parase— ¡Menos mal que te encuentro, estaba muy preocupado por ti, cariño! 


Llegue a donde estaba ella. Ella se giró y me miro con los ojos rojos y llorosos. Los demás se apartaron, pero su hermana fue la única que se mantuvo más cerca de ambos.


¿Qué ha pasado? —le pregunte acariciando su mejilla—

¡Tu tía ha matado a mi madre! —respondió Nazaret entre lagrimas—

¿Qué? —pregunte en un grito mientras la abrazaba—

Quiso matar a Sirius y nuestra madre se puso frente a él y recibió el hechizo. —respondió Mar secándose unas lagrimas que resbalaban por su mejilla—

De verdad que lo siento muchísimo. —dije mientras le acariciaba el pelo a Nazaret—

Me da igual que sea tu tía, Draco, en cuanto la tenga delante la matare. —dijo Nazaret secándose las lagrimas—

Entiendo que quieras hacerlo y se que por mucho que haga no te hare cambiar de opinión. —dije soltando un suspiro—

Ha matado a nuestra madre, no la vamos a dejar irse de rositas. —dijo Mar cruzándose de brazos—


Suspiré y volví a abrazar a mi novia. No se como iba a mirar a mi tía en vacaciones después de lo que había hecho. La miraría con odio y desprecio, estaba claro. Era mi familia, pero también había matado a sangre fría a una persona inocente. 

A los segundos, Dumbledore había llegado y nos había llamado a los tres al despacho. Yo no entendía del todo porque tenía que ir, pero subí sin rechistar. Al entrar al despacho me encontré con Dumbledore y con el padre de mi novia, ambos sentados juntos frente a tres sillas.


Tomad asiento, por favor. —nos indico Dumbledore— Hay unos asuntos que tenemos que tratar. 


Los tres nos miramos y tomamos asiento. Mar se sentó junto a su hermana y yo me senté en la otra silla, por lo que Nazaret quedo en medio de ambos.


Os estaréis preguntando porque os he llamado a los tres. —dijo Dumbledore— Pues bien, chicas, vuestro padre os explicara lo ocurrido.

¿Si tienen que hablar de asuntos familiares, por qué estoy yo aquí? —pregunte—

Hay algo de tu padre que deberás saber después. —respondió Dumbledore— Ya puedes empezar, Ryan.

Se que os estaréis preguntando porque vuestra madre dio la vida por Sirius. —dijo Ryan, el padre de mi novia y de mi cuñada— 

Pues si, porque la verdad que no entendemos nada. —dijo Nazaret encogiéndose de hombros—

Como sabéis, vuestra madre tuvo una relación con Sirius antes de salir conmigo. —explicó Ryan— Por unas circunstancias ambos lo dejaron y vuestra madre acabo conmigo finalmente, pero en el fondo ella nunca olvido a Sirius. En el fondo de su corazón aún tenía sentimientos por Sirius.

¿Ella siempre le ha amado? —pregunto Mar y su padre asintió— ¿Y tu lo sabías?

Claro, pero pensé que con el tiempo lo olvidaría. —respondió Ryan— Pero hoy vi que no fue así, vuestra madre ha muerto por amor y estoy orgulloso de ella.

¿Y Sirius lo sabe? —pregunto Nazaret—

Claramente. —respondió Ryan— Todos lo sabíamos. Desde que Sirius salió de Azkaban vimos miradas entre ellos. Es más, Sirius jamás olvido a vuestra madre. 


Ambas hermanas se miraron sin saber que responder. Era demasiada información para una noche. Su madre había muerto y encima por un amor que jamás había olvidado. 


Por tu padre, joven Malfoy, debes saber que tu padre ha sido encarcelado en Azkaban por servicios ante Voldemort. —dijo Dumbledore rompiendo el silencio— 

¿Qué? —pregunte abriendo los ojos como platos—

Tu padre sabía que se arriesgaba a eso y aún así cumplió ordenes de Voldemort. —respondió Dumbledore— Lo siento mucho, Draco. 


Me levante del asiento y salí rapidamente del despacho; no podía asimilar tanta información al mismo tiempo. Mi suegra había sido asesinada y mi padre encerrado en Azkaban. ¡Toda la culpa era por Potter, seguro que el fue quien los condujo a todos a donde quiera que fuesen!. Camine rapidamente por los pasillos en busca de Potter, seguido de mi novia y de su hermana.


¡Potter! —grite en cuanto lo vi salir de la enfermería— ¡Todo ha sido tu culpa! 

¡Que tu padre este en Azkaban es por culpa de sus fechorías! —grito Harry enfrentándome—

Me las vas a pagar. —dije apuntándolo con mi varita—

Ya lo veremos. —me espetó Harry sacando su varita y apuntándome— 

¡Basta! —grito Nazaret poniéndose entre los dos—

Draco, Harry tiene razón, tu padre está en Azkaban por sus fechorías. —dijo Mar desarmándonos con un ágil movimiento de mano—

Bastante tenemos con el regreso de Voldemort como para que encima nos peleemos entre nosotros. —intervino Nazaret con enfado—

Que esté tío sea tu novio no hará que empiece a tratarlo mejor. —dijo Harry mirándome con desden—

Ni que tu seas su amigo hará que no te parta la cara. —le espete cerrando el puño—

¡Que paréis los dos! —grito fuertemente Nazaret— ¡Si seguís así me da igual lo que seáis para mi, os voy a dar la mayor paliza de todas! 

Y os aseguro que cumplirá con su palabra. —confirmó Mar— 


Harry y yo nos alejamos un poco, no queríamos despertar al dragón que dormía en el interior de mi novia. Mar se rio un poco ante la escena  y negó con la cabeza.


Lo siento, pero me da risa ver que aunque seáis hombres, aún sois manipulados por una mujer. —comento Mar— 

Ni puñetera gracia. —dije seriamente— 

Eso es que tu no se la ves. —dijo Mar con una sonrisa—  


Me aleje de ambos y, junto a Nazaret, me encamine hacía la sala común de Slytherin para curar sus heridas y descansar un poco. Sin duda alguna, esté se había convertido en uno de los peores días de mi vida. 

Complicated LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora