Gusto - • OneShot Osomatsu • -

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Gusto — • ❤️ OneShot Osomatsu ❤️ • —

—¿No quieres intentarlo? — Ese tono burlesco me estaba llamando la atención. Jugaba contigo.

—No quiero dejar en ridículo a mi esposo —Tú también podías jugar en ese reto discreto.

—¿Ridículo? ¿Segura? —Le gustaba esa relación de nivel de confianza que sostenían.

—La verdad si quiero, trae para acá —Listo, tu lado competitivo se había activado desde un inicio.

¿Cómo se habían conocido? Simple, Matsuno Osomatsu, uno de los mafiosos más importantes de Japón, alias tu idiota esposo. Se habían conocido en un café, claro tú en el trabajo y él en plena pelea dentro de la cafetería. Una cosa llevo a la otra y tras llamar a la policía y que Osomatsu se librase de ella, decidiste darle una mano, él te dio su coqueteo en compensación. Y bueno, terminaste casada con él.

—¿Segura que no te lastimarás? —Cuestionó queriendo atacar a tu orgullo. La sonrisa ladina lo delataba.

—Si no te lastimaste tú, creo que si podré salir sin un rasguño —Destrozarías a tu objetivo sin siquiera fallar. Tu orgullo no lo permitiría.

—Ese tono me agrada —Lamió sus labios admirándote al verte tan concentrada—. Toda tuya~

Entre tus manos sostenías aquella pistola con piezas de rubí incrustadas en zonas estratégicas y claro, por la vista de esta. Era la bebé de Osomatsu con respecto a las armas que conformaban su arsenal.

—Yo seré quien te tenga que rescatar después de todo —El objetivo estaba en tu mira.

—Soy todo tuyo, princesa~ —Esa declaración volvió a emocionarte al igual que la primera vez que lo escuchaste—. ¡Eres asombrosa!

Si, la primer bala que habías soltado había dado directo a esa lata de aluminio que se encontraba a unos metros de ustedes.

—Soy esposa de uno de los mafiosos más reconocidos en este lugar —Soltaste una risa al ser consciente de aquel hecho—. Necesito estar protegida~

—Estás protegida conmigo —Hablaba en serio y lo sabías perfectamente.

—Necesito defenderme por mi misma —Confiabas en su protección, pero no podías depender de él por siempre—. No estaremos juntos en todo momento~

—Me aseguraré de nunca dejarte sola —No soportaría el hecho de verte lastimada bajo su protección—. ¡Es más, vas a estar conmigo en todas mis reuniones!

No te agradaba mucho la idea si el motivo no era dejarle en claro a las chicas que ese jefe por quien babeaban era tu esposo, un esposo el cual solamente babeaba por ti.

—No me interesan —Restante importancia a tus momentos de celos—. Además Iyami me coquetea y me promete Francia cada que me lo encuentro...

—Ese maldito... —Sus dientes rechinaban. Él definitivamente si expresaba sus celos ante cualquier cosa o ser que te dirigiera la mirada—. ¡El sabe que eres mi esposa!

—Creo que por eso mismo lo hace —Reíste un poco al parecerte agradable esa actitud, eran celos sanos, esos donde no rompían tus piernas y te encerraban después de todo—. Dice que sería mejor esposo que tú si le diera oportunidad~

—Yo te daré la seguridad de ser buen esposo esta noche —Esa mirada que te dirigía era muy atractiva.

—¿Si? —Mordiste tu labio aceptando aquel coqueteo de su parte. Era un juego entre ambos al cual se habían acostumbrado al pasar el tiempo.

Tiempo junto a los Matsuno (Matsunos x Reader) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora