➳ LA REINA DE LA NOCHE [Ruggarol]

➸ᴄᴀᴘíᴛᴜʟᴏ②⑧

Ruggero

Me quedo helado, ante las palabras de Michael. Salgo de la habitación echando fuego por los ojos, camino hacia Carrick el cual está al teléfono y me hace un gesto para que espere. Giro frustrado, mirando a Valentina dormir en el sofá y Osvaldo bajar las escaleras junto con Michael.

—¿Ella me dejó? —la voz se me quiebra. Las lágrimas bañando mis mejillas—. Se fue, me dejó, me lo advirtió... se iría... Se fue con el bebé —sollozo, repleto de rabia.

—¡¿Cómo que mi ex esposa salió en libertad?! —le grita Carrick al celular. Todos prestamos atención—. ¡Debería haber sido notificado de esto! ¡Esa mujer es un peligro para mí familia! —su tono es muy alto y me hace mantener callado.

—Karol se llevó un plano de la bodega y un arma del escritorio del despacho de Carrick —me dice Michael.

—¿Se llevó? ¿Ella fue a la bodega? ¡Por Dios! —jadeo aterrorizado.

Al menos no me dejó.

Las manos me tiemblan y el oxígeno entra en mi con dificultad, la vista se me vuelve borrosa y debo tomar asiento en el sofá, sintiendo el ataque de pánico nacer en el centro de mi pecho. Rodeo mi cabeza con las manos y tiro de mi pelo, desesperado, sin saber que hacer.

—¡El mismo día que mi ex mujer sale en libertad, uno de los amigos cercano de mi hija es secuestrado y nos piden una recompensa millonaria! —manifiesta—. ¡Mi hija se ha llevado un arma y dieciocho millones de dólares de mi caja fuerte! ¿Es una casualidad? ¡Arreglen esta mierda o lo haré por mi cuenta! —finaliza, cortando la llamada y tirando su celular al sofá.

—¿En qué estabas pensando, Karol? —bufo.

—Sabía que era una mala idea que se inscribiera en esas clases de tiro... —murmura Carrick, acariciando su sien. Toma el iPad de la mesa y teclea algo, para luego enseñarnos la pantalla —. Falta el Audi en la cochera, así que ese el auto que usó. Según el GPS se dirige por la Avenida de Sant Jordi hacia el Sur.

—Hacia la bodega. Debemos ir —manifiesto.

—Quieto ahí, giovane uomo [jovencito].

Mi padre se pone de pie, mirándome ceñudo mientras un guardaespaldas sale detrás de él, directo hacia mí. Este me agarra del brazo, jalandome sin pedirme permiso.

—¿Qué demonios haces? —intento zafar del agarre pero este no me lo permite.

—No vas a involucrarte en esto —advierte.

—¡Mi novia embarazada se metió en la boca del lobo! ¡Es exactamente lo que ellos quieren! —exclamo.

—La sacaremos de ahí, pero tu padre tiene razón. Sólo entorpeceras el plan, un adolescente enamorado no piensa correctamente ante un momento de presión —salta Carrick, haciéndole un gesto a los otros dos guardaespaldas que van tras Osvaldo y Michael.

—¡Si algo le pasa a Karol...! —grito, señalando las narices de Carrick.

—Ellos no lastimaran a mi hija, quieren dinero. Si tengo que vender esta puta mansión y la empresa, aunque me quede en la calle, lo haré, con tal de que mi hija vuelva sana y salva. No cuestiones mis decisiones —me interrumpe Carrick.

—Rinchiuderli [Enciérralos] —le ordena mi padre a uno de los guarda espaldas.

—¡Non farmi questo! [¡No me hagas esto!] —suplico hacia mi progenitor.

—¡Ya te he perso una volta porque querer ser el héroe, dejándote andare su quell'aereo. No cometere el mismo errore! —me grita. Su voz furiosa retumba en mis oídos, haciéndome estremecer.