Les recomiendo mucho escuchar la canción mientras leen para una mejor experiencia😭😍.
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Mientras la melodiosa voz de Ruggero resuena en todo el lugar, los flashbacks comienzan a dar vueltas en mi mente.
Flashback:
—¡Ruggero, corre ven aquí! —le grito, desde el balcón de la habitación. El amanecer está aproximándose y se ve precioso.
—¡Woa! Es increíble, hace mucho no veía un amanecer—dice envolviendo mi cintura con sus brazos, mientras asienta su cabeza en mi hombro.
—Me quedaría a vivir en este lugar—murmuro, observando como las luces en el cielo se espejan en el agua del lago—. Me quedaría a vivir en este lugar, contigo—agrego, mientras él besa mi mejilla.
—Este momento quedará grabado en mi mente para siempre—susurra.
—Quiero que sepas algo—le digo, suspirando. Sin dejar de mirar al horizonte.
—Dime.
—Eres lo más hermoso que me ha pasado, Ruggero. Eres mi persona—muerdo mi labio para evitar llorar—, pero temo por nosotros. No quiero que esto se acabe, que dejes de amarme.
—Karol—me voltea, mirándome a los ojos—. Nunca. Nada... —coloca un mechón de mi cabello atrás de mi oreja—, podría cambiar jamás, lo que siento por ti—lo beso, uniendo nuestros labios, nuestras lágrimas y nuestros corazones.
—Te amo, más de lo que puedo soportar—sonrío.
—Tendrás que aprender a soportarlo, porque haré que ames aún más cada día—ríe. Y su risa es fiel música para mis oídos.
Fin del flashback.
Limpio mis lágrimas. Quiero levantarme, irme, huir, pero le daría respuestas a Lionel que todavía no quiero darle. Sé que mientras más pospongo su sufrimiento, más aumento el mío. Pero no puedo decírselo, no quiero ser la responsable de su dolor. Ahora más que nunca, Lionel está enfermo, quizás no tenga ni un año más de vida y no quiero aumentar esa desgracia.
Cuando Ruggero termina la canción, todo el mundo se levanta a aplaudirlo. Hasta mi madre y Lionel, yo permanezco sentada unos segundos y luego con dificultad logro ponerme de pie. Le aplaudo, porque él más que nadie se merece todo lo que está viviendo.
Necesito hablar con él, decirle la razón por la que tomé esta decisión. Cuando todos se sientan continúo de pie, buscando que me vea pero es en vano. Alexandra es felicitada por los novios y luego ambos se marchan.
—Quiero ir a hablar con él—les digo.
—¿Quieres que te acompañe? ¿Podrás? —me pregunta Lionel.
—Sí, claro que sí —afirmo.
Me levanto lo más rápido que puedo y camino hacia donde él se encuentra, está rodeado por muchos fotógrafos y una periodista.
—Es imposible no notar el sentimiento con el que cantaste esa canción, la cual habla sobre lo que amas en una chica. ¿Se la dedicaste a alguien?
—Nunca se la dedique, pero sé que si ve esto. Sabrá que lo hice por ella. Ella es mi inspiración, tengo varias canciones propias que saldrán la semana entrante a través de “Star Récords”, es el estudio en el que me dan la gran oportunidad de grabar mis primeros sencillos.
No puedo avanzar hacia él, solo me quedo plasmada mientras decido alejarme. Pero tampoco puedo hacerlo, mis pies están pegados al suelo. Mi vista va a parar a ellos, agradezco llevar un vestido lo suficientemente largo para que no se note que llevo zapatillas. Por lo tanto, estoy aún más bajita y los reporteros terminan tapando toda mi vista hacia Ruggero. Finalmente, mis piernas ceden y regreso a la mesa, en la cual mi madre ha desaparecido y Lionel charla animadamente con el manager de Yuridia.
Ruggero Pasquarelli:
—Estoy demasiado feliz con esta oportunidad que me dio Alexandra, ella vio algo en mí que nadie más vio y estaré eternamente agradecido con ella.
—Cuéntanos Ruggero, ¿estás en una relación? —dice una periodista.
—En este momento sí, tengo una hermosa relación con mi carrera y mi música—digo, haciendo que todos rían.
Algo me hace querer mirar entre los periodistas, esa es...
—Disculpen, yo... En un momento regreso—digo, caminando entre los invitados y efectivamente es ella.
Entra al baño de damas, pero aunque quisiera mis pies no me detienen e ingreso detrás de ella. Tomándola de la mano, en cuanto se gira asustada. Veo sus ojos rojos, esas hermosas esmeraldas empañadas por las lágrimas.
—Karol, ¿qué haces aquí? —muerde su labio inferior como si fuese a romperse a llorar de nuevo, y me duele pensar que la razón soy yo.
—Mi madre es la diseñadora de Yuridia—se le quiebra la voz. Asiento.
Nos miramos por lo que parecen años y me limito a abrzarla, la envuelvo en mis brazos con mucha fuerza. De pronto siento como las ganas de llorar me golpean. ¿Qué estoy haciendo? Karol me dejó. Me separo, disculpándome y ella queda perpleja en su lugar mirando el suelo.
—Perdoname—murmura, las lágrimas empiezan a correr por sus mejillas.
—Está bien. Elegiste, respeto tu decisión.
—No elegí, Ruggero. No elegí porque no puedo compararlos, es imposible hacerlo.
—No te entiendo.
—Lionel está...
—¡Oye, éste es el baño de damas! —grita una mujer que sale de un cubículo acomando su cabello.
—Disculpe, ya me iba—digo, dando la vuelta y saliendo del baño.
En cuanto salgo, Alexandra me intercepta y técnicamente me arrastra por el gran salón.
—¿Qué te ocurre? ¿Por qué dejaste una entrevista a la mitad? Era tu oportunidad para que te conozcan—chilla, agarrando su cabeza.
—Karol está aquí—murmuro.
—¿Qué? —me hace un gesto de que no escucha.
—Karol está aquí—repito.
—No me jodas. ¿Dónde?—dice mirando, nada disimulado por el lugar—. Ustedes si que están destinados—hace una mueca y continua mirando—. Espera, la estoy buscando y no sé como es—me dice, empezando a reír. Esta mujer está chiflada.
—Ahí va, mira. La bajita, vestido bordó y cabello recogido.
Alexandra la observa y me mira con la boca en una O.
—¿Me disculpas un momento? —dice, sacando su celular y caminando hacia el patio. La observo mientras habla por una llamada y rodea la piscina, como si estuviera nerviosa.
A los momentos vuelve y me dice rápidamente:
—Tengo una telecomunicadora internacional en la puerta, canta alguna canción. Alguna de las tuyas, como un estreno. Necesitamos impresionar al público para financiar el videoclip de las canciones—su ceño está fruncido, no parece la misma chiflada de hace unos momentos.
—Está bien, pero los músicos no la sabrán.
—Hazla con guitarra o acapella, como sea. Pero súbete a este escenario, ahora mismo—dice, abro los ojos e ignoro el tono con el que me habla.
Alexandra sube al escenario y dice unas palabras más como para explicar el hecho de que vuelva a cantar. Subo detrás de ella, observo a los invitados buscando a Karol y la veo sentada a un lado de Lionel. No creí que había venido con él, hasta iba a dedicarle una de mis canciones pero decido por cual es la ideal para el momento.
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➳ LA REINA DE LA NOCHE [Ruggarol]
FanfictionSer una chica con dos vidas diferentes no es fácil, ocultarle a mi novio la verdadera profesión que realizo y lo que conlleva esta no es fácil, ser testigo de que como me denigran y tratan de comprar, no es fácil «nada es fácil». Sí, ser yo no es lo...