Capítulo 114.

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El grupo pasó aproximadamente dos días en busca de un refugio amplio que sirviera a los demás, deteniéndose en partes seguras del bosque para comer, dormir y hacer las necesidades básicas del organismo. Se alejaron de la vegetación, y no muy lejos del bosque, en terrenos arenosos y secanos, hallaron una enorme fábrica de muñecas que fue abandonada en tiempos de apocalipsis. Al entrar, se llevaron la sorpresa de que estaba bien cuidada y despejada de posibles visitantes en estado de putrefacción, lo que le resultó extraño a Brie.

Como de costumbre y en solitario, merodeó por ahí echando un ligero vistazo a las salas donde, en una en concreto, todas las viejas muñecas abandonadas se encontraban tiradas y revueltas, por lo que volvió a cerrar la puerta.

Los demás estaban plenos, contentos y dichosos por haber encontrado una nueva estancia, mas Brie sabía que algo no iba bien, pues no era normal que un local post apocalíptico anduviera tan pulido como ese, igual que si tuviera o hubiera tenido dueños recientes.

Siguió recorriendo cada parte de la fábrica como si fuera una sonámbula en mitad de la noche o como si ese lugar hubiera adquirido magia y hubiese embrujado a Brie, quien inspeccionaba seriamente cual detective, siempre había confiado en su instinto y así lo haría dado que nunca fallaba. Estuvo ausente unos minutos largos para ver si daba con ciertas pistas aunque fuesen pequeñas, pero nada, regresó a la sala común con el resto hasta que la suela de sus botas pisaron una joya que al principio, pensó que era la que llevaba colgada al cuello. Se inclinó, agarrando aquel colgante plateado con una esfera plana donde había dos nombres grabados: "Chris y Brie". El corazón empezó a consumirse lentamente, ese collar era suyo y ese mismo se lo había robado solamente una persona: Joey.

Ahora todo tenía otro sentido: la fábrica ya tenía dueños y no muy amables que digamos. El rostro de Brie adquirió una expresión espantosa que James pudo percibir a distancia. Cuando él fue a acercarse a ella, la presencia de un nuevo grupo con un líder interrumpió la función dentro de la fábrica con un par de disparos al aire que hicieron que el grupo de James se alzara en armas.

La multitud de los nuevos visitantes se hizo a un lado dejando paso al líder, un líder que Brie reconoció incluso antes de verlo aparecer con esa ametralladora en sus dos manos.

⸺Pero, ¿esto qué es? Si resulta que hay visita y no nos hemos enterado. Veréis, para que veáis que no soy un mal tío, ordenaré a mis hombres que bajen las armas y me presentaré oficialmente. Yo soy Joey y esta... ⸺señaló la fábrica⸺. Esta es mi casa, que podemos compartirla, por supuesto. ¿Quién es el líder del grupo?

James dio un par de pasos hacia adelante. Jacob miraba a Brie, que se hallaba completamente congelada en su sitio y todavía no había sido interceptada por el peor villano de la historia. Cuando Joey vio a James dar esos pasos dando a entender que era el líder, se atrevió a observar a los inquilinos nuevos hasta que, a lo lejos, reconoció de inmediato la figura y el rostro de Brie, quedando impactado al verla de nuevo y con vida después de aquel mordisco en el pie.

Brie escondió el colgante rápidamente nada más intercambiar miradas y él ya sabía lo que poseía en su poder, por lo que no dudó en acercarse a la chica a pasos lentos acabando por ser el centro de atención.

⸺Dame eso ⸺le dijo Joey⸺.

⸺No es tuyo ⸺respondió Brie, soberbia⸺.

⸺Dámelo o esa niñita del fondo correrá la misma suerte que tú.

Los dos se acribillaron con las miradas mostrando un constante desafío. Brie cedió y se atrevió a mirar a los suyos, quienes a la expectativa, miraban qué sucedía, ya que parecían conocerse y no llevarse demasiado bien. Antes de que James o Dexter pudieran sospechar quién era Joey, le entregó el collar de mala gana. No contento con tenerlo en sus manos, se acercó todavía más a ella.

Inmunidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora