Un par de días después, todo volvía a estar normal, pero no salieron del refugio por si tenían la mala suerte de encontrarse nuevamente cara a cara con Joey y, si eso sucedía, las consecuencias serían graves, ya que estarían firmando su sentencia de muerte. Sobre lo que pasó entre Chris y Brie no quedó zanjado, sino todo lo contrario, Chris seguía buscando el momento adecuado para charlar con Brie sobre el asunto, necesitaba ponerle punto y final. Por ello, una noche, Chris se sentó al lado de Brie cuando terminó de cenarse el bocadillo tan delicioso.
—Necesitamos hablar de lo que pasó en esa azotea —dijo Chris—.
Brie, mirándolo de reojo, se levantó del suelo, intentando por milésima vez no hablar de aquello.
—No hay nada de qué hablar porque no pasó nada —respondió ella—.
Ahora fue Chris quien, decidido, se levantó también hasta ponerse frente a ella para poder mirarla a los ojos.
—Tal vez para ti no, pero para mí sí fue algo. Sé que estás evitando el tema pero necesito contártelo. Al menos, sólo escúchame.
Brie respiró profundo, asintiendo. Chris le estuvo contando que, sin querer y sin pensarlo, acabó fijándose en ella, aunque realmente, había otra cosa que le interesaba saber.
—¿Por qué me correspondiste ese beso? —preguntó Chris—.
—Me confundí. Por un momento llegué a pensar que éramos algo más que amigos. Y lo hice; te besé. Pero cuando abrí los ojos me di cuenta de que no sentía nada.
La confesión de Brie fue dura, muy dura, pero al menos fue sincera en cuanto sus sentimientos aunque eso significara herir a Chris, pero prefería eso antes que ilusionarle y sintió que de alguna manera lo hizo cuando le besó, un acto del que ahora estaba arrepentida sin duda, tampoco quería que aquello influyera en su relación como los amigos que eran.
—No estoy hecha para amar... No niego que me gustaría corresponderte, pero no puedo. No sin sentir algo por ti —dijo Brie—.
—¿Y Paul?. Brie guardó silencio, rompiéndolo después.
—Con Paul la habría cagado con el paso del tiempo, seguramente le hubiera hecho daño continuamente. Paul me gustaba, pero no lo amaba —dijo Brie—.
Chris hundió su mirada en la nada, ella estuvo a punto de llorar, pero no lo hizo.
—Es un asco, lo sé. No valgo la pena como algo más que amiga, créeme.
—Está bien, no volveré a mencionar esto, aunque eso no significa que te vaya a olvidar tan fácilmente. De hecho, eres complicada y muy difícil.
Brie rió, asintiendo.
—En tal caso, me alegro de haberlo hablado —dijo él—.
—Yo también.
Quizá un abrazo no hubiera estado mal para terminar, y no por ganas no se lo dieron, sino por miedo a incomodarse. En realidad, a Brie le sentó bien conversar y echarlo todo para bien o para mal, a lo hecho, pecho. El que peor se encontraba era Chris, que se intentó mentalizar en olvidar sus sentimientos, o al menos, no prestarles mucha atención para no seguir sufriendo por algo que no era ni sería correspondido. Conforme pasaban los días continuos a su lado, se hacía mucho más complicado olvidarla, pues no podía evitar mirarla en sus horas de sueños profundos, o caer en su sonrisa risueña tan maravillosa que le aceleraba el pulso, como si tuviera un pedal dentro que sólo Brie sabía presionar para acelerarlo. En cambio, Brie ya hubo pasado de página, nunca llegó a recordar ese beso con Chris mientras él no podía dejar de pensar en otra cosa que en el roce de sus labios húmedos y suaves, soñando a cada instante con esa sensación que no le dejaba descansar, torturándose una y otra vez con lo mismo a pesar de haberse propuesto olvidar, pero olvidar era justo lo más difícil de esta historia, el olvido no era posible para Chris.
Unas semanas más tarde, Chris salió una mañana en busca de provisiones en solitario, ya que Brie se encontraba un tanto indispuesta, con dolor de estómago y ganas de vomitar. Le prometió regresar en una hora, pidiéndole que no saliera de la joyería bajo ningún concepto. Brie obedeció, pasando una hora completamente sola, recitando un poema en voz baja con los ojos cerrados que su madre le leía cuando era niña. Al pasar treinta interminables minutos, empezó a escuchar voces y peleas, coches quemando ruedas y, entre toda la trifulca, la voz de Chris. Despertando de su pasado, se levantó de la silla, asomándose por la puerta con cuidado; viendo a Joey nuevamente metiendo a Chris en uno de los coches, saliendo a toda velocidad en dirección al bosque. Nerviosa, equipó su arco a la espalda junto a la bolsa de armas y las mochilas con las pocas provisiones que quedaban, saliendo deprisa del local, metiéndose dentro del primer coche que sus ojos encontraron después de guardar todo en el maletero. Echó el asiento lo más atrás que pudo y se inclinó hacia abajo para realizar un puente y hacer arrancar el motor para marchar en busca de Chris, o más bien, marchar a su rescate antes de que lo mataran. Aquel estúpido grupo era tan descuidado, que dejó en el asfalto las huellas de los neumáticos quemados, por lo que la búsqueda sería más fácil de llevar a cabo. Brie abandonó la ciudad a toda velocidad, siguiendo las únicas pistas que había, llegando hasta una travesía con bosque en ambos extremos, viendo esos coches aparcados en medio de la carretera. Se bajó, abriendo el maletero para coger el arco y las flechas, guardándose una pequeña pistola entre el pantalón por la parte del trasero que su camisa negra de cuadros escondía. Con valentía pero algo asustadiza, se introdujo entre las ramas espinosas de los matorrales, perdiéndose entre la maleza y las hojas de los árboles. Iba con una flecha ya cargada cuya punta apuntaba al suelo, lista y preparada para un posible ataque. Nunca tuvo la oportunidad de matar a algún vivo porque desde Mac, nunca se había cruzado con ninguno, meditando la idea de si sería capaz de matarlos a ellos con tal de salvar una vida que valía por todas aquellas.
Presintió estar cerca del peligro cuando escuchó vocesmasculinas lejanas a tan sólo unos metros de distancia. Brie se iba escondiendotras las cortezas de los árboles hasta llegar a un terreno arenoso donde Joey yvarios hombres, (tal vez unos seis) rodeaban a Chris con armas en las manos.
![](https://img.wattpad.com/cover/98982246-288-k208868.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Inmunidad.
Misteri / Thriller< El mundo ha sido cautivo por un virus letal que convierte a las personas en muertos vivientes y, un poderoso científico, es el causante de tal atrocidad, creyendo que nadie es capaz de detener su horrible plan de destruir la humanidad, pero no...