Capitulo 207

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- ¡Feliz cumpleaños, bichito!

Malú le llena de besos los mofletes a Lucia después de que todos hayamos entonado la canción con una gran tarta delante de ella.

Toda mi familia está aquí. También han venido Pepi y José con los suyos.

E: No hagas eso, Lu.

Mi madre alcanza a mover la tarta cuando la niña está apunto de meter su mano para coger su anhelado trozo.

E: Ahora te doy yo.

Le promete dispuesta a partirla.

- Ven aquí.

Malú tira de mi mano llevándome con ella a la cocina. Están ya todos muy ocupados devorando todo tipo de dulces que hay sobre la mesa.

- ¿Cómo ha ido?

Su preciosa mirada se cruza con la mía.

+ Bien, esta vez ha sido más fácil.

He ido al cementerio a dejar unas flores para Amanda y al regresar ya estaban los invitados aquí. Este ha sido el primer momentito que hemos tenido para poder apartarnos de los que tanto queremos.

- ¿Te sientes culpable?

Lee mi mente, apoyando su mano en una de mis mejillas. Yo solo me encojo de hombros, no tiene explicación lógica, pero si que siento algo de culpa.

+ Tengo derecho a ser feliz.

Asiente sin quitar su mano de mi rostro y haciendo un leve movimiento para acariciarme.

+ Es solo que me da culpa ir al cementerio sintiéndome tan pleno, cuando ella está bajo tierra.

Le revelo mis sentimientos.

- Estoy segura que cuando no lo estaba la hiciste feliz.

+ Vivimos bien, y siempre le agradeceré que me haya dado a las pequeñitas.

Aseguro abrazándola, que tranquilo me hace sentir, ademas de ser mi novia, es mi mejor amiga, mi confidente.

+ ¿Volvemos?

Con la cara hago un gesto para indicar el salón, donde se encuentran todos.

Este es uno de esos momentos que se sellan con un beso y de momento ninguno se ha dado a torcer. Tengo que pillarla desprevenida, pero si no puedo unir ahora mismo nuestros labios, lo mejor será huir de la tentación.

- Sí.

Narra Malú

Salgo de la habitación de Cami tras contarle varios cuentos. Entre los chuches y todo lo que ha jugado hoy con sus primos le ha llevado tiempo dormirse, Lucia en cambio se tumbó junto a Danka en el suelo y calló frita, Gaby fue quien la llevó a su cuna, después de echarle algunas fotos, fue una imagen de lo más tierna.

- Ha salido súper bonito.

+ Sí, y Lu estaba feliz.

- Y mañana el árbol.

Aplaudo ilusionada.

+ Ya veo que te sientas en el sofá a comer las gomilonas que sobraron mientras me pones a mi a trabajar.

- Pues claro hombre.

Aseguro risueña. Es la verdad.

+ Y lo reconoces así sin más, ¿ni un poquito de vergüenza te da?

- Emmmm.

Pretendo pensármelo un poco.

- La verdad es que no.

Río acurrucándome bien pegadita a él.

+ Que morro.

Me acoge dulcemente entre sus brazos.

- Me apetece ver una peli.

+ Elige la que quieras.

Se cómoda tendiéndome el mando. Niego incorporándome.

- Elige tu, pero no de miedo.

Le pido.

- Voy a ponerme el pijama y llamar a papá, luego será muy tarde.

Digo cogiendo una de sus sudaderas y mi móvil.

Solo el amor nos salvará (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora