Solo el amor nos salvará (Segunda parte)

Capitulo 328

~ Mami mira

Entra corriendo a casa a abrazarme y súper contenta me enseña la mariposa que lleva pintada en la carita. Han vuelto a casa poquitos minutos después que nosotros.

- Pero mira que guapa te han dejado reina.

V: Se han montado una feria y esta nena se nos quedó embelesada cuando vio a otra niña con la cara pintada.

Me cuenta mi mejor amiga.

- ¿Y vosotras?

Pregunto a Carla y Lucia.

C: Que yo ya soy mayor para estas cosas, tita.

- ¡Uy, cierto! Que tú ya eres muy mayor.

Sonrío enternecida abrazando a mi ahijada y dejando un sonoro beso en su mejilla. ¿En que momento han pasado 10 años? Si hace nada acompañaba a Vero recién parida en sus noches en vela con su bebé llorando.

- ¿Y tú, tormento? ¿No has querido una mariposa como Cami?

= No quele.

~ Ha llorado cuando iba a hacérsela.

Me cuenta.

- ¿Por qué has llorado?

= Yuyu.

Me echo a reír. Es un bicho que no se asustaría de meterse en la boca de un león para hacer una trastada, y que le pinten la cara si le da miedo. Es de lo que no hay.

- ¿Te da yuyu que te hagan una mariposa?

= Yuyu Lu.

No me resisto y la cojo en volandas, haciendo pedorretas en su barriguita.

~ Mami, ¿podemos ir otra vez contigo?

C: ¡Si, mañana!

- Mañana no, ya veremos otro día.

V: Anda, ir ahora a jugar un rato.

Les pide.

- Espera Lu.

La nena se gira para mirarme traviesa y luego se echa a correr hacia las más mayores.

- Ven aquí, bicho.

La atrapo.

- Vamos primero a hacer pipí.

No quiero que se haga encima. Todavía hay que recordarle que debe ir al baño. Nada más subirle el pantalón desaparece en busca de Carla y Cami, que según me ha contado Vero en este ratito, nos ha echado en falta.

V: Si que habéis follado bien.

Comenta al quedarnos a solas.

V: Que no te mejoró solo el humor, has cambiado la cara.

- ¡Verónica!

Me sigo ruborizando con sus comentarios.

- Hemos ido a la montaña, y nos ha venido súper bien estar solos, es eso.

Intento escabullirme.

V: Pues será eso... y que en la montaña se folla de puta madre.

Ruedo los ojos.

- Eres imposible.

V: Anda, cuéntame.

Me suplica graciosa.

- ¿Qué quieres saber, coño? Si no es la primera vez que lo hacemos.

V: Ya, pero es que en sitios públicos siempre da mas morbo.

- De mis mejores orgasmos.

Confirmo dando por zanjada la conversación.

V: Quiero más detalles.

- No voy a dártelos.

V: María Lucia.

Achina sus ojos, fingiendo mirarme mal.

- Es que me conoce mucho, Vero.

Le cuento llevando la conversación en otra dirección, no es lo que ella quiere escuchar, pero si lo que yo necesito hablar con mi mejor amiga, y sé que gustosa será todo oídos.

- Ya sabia que yo estaba atormentándome con ideas del por qué no me ha pedido que me case con él.

He quedado súper ñoña después de nuestra charla.

- No he tenido que decirle nada, fue el quien puso en palabras todo lo que siento.

Me emociona que no pase de mi actitud. Que aunque yo pretenda que está todo perfecto, el tenga la sensibilidad para darse cuenta que no lo está.

- Me dijo que no quiere verse obligado por un juez, que le apetece estar prometidos sin presiones, y no sé, sigo queriendo tanto como antes que me lo pida.

Admito.

- ¿Pero sabes lo bonito que es estar con alguien que le importa como te sientes? Que te quiere y te lo demuestra en todo momento, que te hace sentir única... no sé...

Muerdo mi labio pensando.

- Esta siempre pendiente de lo que me pasa, reconoce mis sentimientos y te juro que calma todas mis inseguridades.

Le hablo a mi amiga con tanta sinceridad.

- Que luego alcanzar el orgasmo con alguien así, es maravilloso.

Disfrutar del sexo siempre lo es, pero cuando lo disfrutas tanto con una persona a la que amas con locura no tiene precio.

V: Joder Malú, vomito corazones con vosotros. Dais asco.

Me sonríe. Sé que se alegra más que nadie viéndome contenta junto a la persona que me tiene perdidamente enamorada. Ella ha estado conmigo cada vez que me han roto el corazón y junto a Gaby encontré la felicidad.