Capitulo 300

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Narra Gaby

Miro enternecido como nuestras hijas disfrutan del regreso de Malú, cada una a su manera, conforme a su edad, Cami no deja de darle besos y abrazos, y Alba de contarle cosas que han pasado este par de semanas, aunque hablaban todos los días.

Me duele su manera de reaccionar con lo que ha pasado con Lucia, igual la cagué, pero la estaba protegiendo, y una vez más, está siendo injusta. Se empeña en evitar cualquier tipo de contacto, ni siquiera consigo que crucemos nuestras miradas, lo cual me apena, porque con los ojos siempre hemos sabido decirnos la verdad. Reconozco mi error, pero se esta pasando.

+ Vuelvo al hospital.

Le digo intentando entablar conversación. Me mira y asiente muda.

+ Así libero a tu madre para que pueda descansar.

- Ya.

+ ¿Pretendes seguir ignorándome mucho más tiempo?

- El que me lleve querer decirte algo que no sea vete a tomar por culo.

Debiese de contestarle, alguna burrada como lo ha hecho ella. El cabreo que llevo es monumental, pero cojo una bocanada de aire y salgo sin decir nada. No pienso rebajarme a actuar como ella, no somos críos, y no quiero hacernos más daño.

Salgo de casa y conduzco sin prisas hacia el hospital. Me espera otra noche más durmiendo incómodo en un sofá acompañando a mi bebé... esa bebé que se hace cada vez más mayor.

+ Hola Pepi.

Saludo con dos besos a mi suegra.

+ Hola princesa.

Me acerco a la pequeña. Ya esta mejor y empieza a hacerse pesado tenerla en una camilla de hospital. Es un culo inquieto y aunque todavía no recupera del todo las fuerzas, necesita moverse más.

= ¿Mami?

+ Mami se ha quedado en casa, bicho... mañana vendrá a verte.

P: ¿No lo habéis arreglado, no?

Me encojo de hombros.

P: Es que la niña es muy cabezota.

Eso sí que lo sé, no le gana nadie.

P: Y tú un santo que le aguantas todo.

+ La quiero... todos tenemos defectos.

Asiente satisfecha, pero lo digo en serio, detesto el postureo.

..

..

La noche pasa tranquila. Lucia duerme del tirón, y aunque algo incómodo, yo también lo hago.

El pediatra pasa a verla temprano.

Ped: Vamos a examinar a esta pequeñaja, y si todo sigue tan bien como ayer, os daré el alta.

+ ¡Que bien!

Exclamo contento.

+ ¿Quieres ir a casa Lu?

= Asha mami.

Pobrecita mía, está desesperada por pasar tiempo con Malú.

Solo el amor nos salvará (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora