Narra Malú
Después de pasar la tarde con las chicas, darles un baño y acostarlas, me siento en el jardín junto a Danka que ha venido a hacerme compañía. Enciendo un cigarro y no alcanzo a darle la segunda calada cuando mi chico toma asiento a mi lado.
+ Deja esta mierda.
Me lo quita de las manos, lo apaga y me entrega una tarrina de helado de chocolate, dejando dos cucharas frente a nosotros. No puedo evitar sonreír. Luego me enseña los klinex, haciendo que esa sonrisa se convierta en una pequeña carcajada.
- Que no voy a llorar, pesado.
+ Que ya lo sé, pesada.
Imita mi tono de voz.
+ Es por si no quieres que yo te limpie las comisuras.
Le miro divertida y niego con la cabeza. Instintivamente abro el helado y lleno una de las cucharas dispuesta a inflarme de azúcar.
+ ¿Tu piensas comerte todo eso sola, o hay un poco para mi?
Me giro dándole la espalda, protegiendo aquel tesoro que tengo entre mis manos.
+ Vale, ya entendí... Esta sobra.
Me enseña la segunda cucharilla. Sonrío y vuelvo a girarme.
- José quiere que pasemos algunos días en Sevilla, con papá... Dice que estoy privando a las chicas de tener un abuelo.
Suelto sin más. Tendiéndole la tarrina después de llenar mi cuchara otra vez.
+ A mi no me parece mala idea.
Me dice comedido. Teme a mi reacción.
+ A ti te encanta Sevilla, las chicas van a divertirse con el, es cierto que no conocen demasiado a su abuelo... y te vendrá bien pasar buenos momentos con tu padre.
- Con mi padre, no con su familia.
+ Cariño... yo entiendo que fue difícil que se divorcien, pero ya hace muchos años de eso... y veo normal que cada uno quiera rehacer su vida.
- Ya, pero es que una cosa es rehacer y otra muy distinta es hacerla mientras seguía con mamá...
+ Ya... pero ahora no hace diferencia, olvida el pasado y permítete disfrutar de una relación con tu papá.
Me mira comprensivo.
+ Te harías un favor a ti, a él y a las chicas. ¿No lo crees?
Pregunta dulcemente.
+ Solo serán unos pocos días, y yo voy a estar contigo.
- ¿Tu también crees que las estoy castigando a ellas?
+ No... yo creo que tú necesitas esa relación, y que ellas van a beneficiarse de que la tengas.
- José quiere ir de jueves a martes.
+ Yo puedo coger libre el viernes, pero no creo que el lunes. Déjame verlo en el hospital.
- Vale.
+ Igual te puedes quedar tu con las más pequeñitas y regresar con José el martes... Yo me regreso el domingo con Alba, así no falta tantos días al instituto.
- No... prefiero ir por menos y regresar contigo.
+ Como te apetezca.
Acaricia mi mejilla.
+ Estoy orgulloso de ti.
Promete.
- Tu haces mucho para que yo pueda estar bien con papá.
Niega.
+ Yo te apoyo en lo que tú quieras hacer. Y si has conseguido llegar hasta aquí, es únicamente por tus desiciones.
Aparto el helado y le beso. Ambos sabemos que no es así. Si no fuera por Gaby yo seguiría llena de rencor, es el quien me ha ayudado a perdonarle y a admitir que sigo necesitando esa relación con mi progenitor.
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Solo el amor nos salvará (Segunda parte)
Fiksi PenggemarNovela inventada. La historia de amor de Malú y Gaby, una pareja que enamora. Por la cantidad de capítulos he tenido que continuar la novela como una nueva historia. Espero que os siga gustando.