Solo el amor nos salvará (Segunda parte)

Capitulo 378

+ No te confundas.

Acaricio su mentón.

+ Estamos pasando por un momento difícil, no nos hemos extinguido.

Aseguro.

+ No quiero que me pierdas, ni quiero perderte yo.

Hago una pausa mientras reflexiono.

+ Prefiero seguir creyendo que lo nuestro es inquebrantable... Lo prometimos, ¿no es así?

Sonríe y se levanta para venir a sentarse entre mis piernas.

- Sí.

Confirma.

- Y volvería a hacerlo mil veces.

Fricciona su frente en mi barbilla, buscando cercanía.

- Pero ha llegado el momento de decir basta a lo difícil y prometernos buenos momentos también.

Su propuesta parece una suplica.

- No quiero echarte de menos teniéndote a mi lado, ni sentir un vacío entre nosotros... me gusta que has conseguido convertirme en una melosa que le apetece estar todo el rato pegadita a ti.

Admite con una sonrisa dulce.

+ Yo estoy encantado de tenerte así.

Mi cara roza la suya y sus labios encuentran los míos. Como me hacían falta sus besos. Sus mimos. Ella.

Narra Malú

Nos besamos con deseo y al separarnos ambos queremos más, nuestras miradas lo confiesan y nuestros labios lo confirman.

- Te quiero.

Prometo.

+ Yo a ti...

Un pico.

+ Te amo.

Atrapa mi cara entre sus manos y vuelve a acortar nuestra distancia.

- Se nos va a quedar frío.

Río cogiendo una patata y embadurnado todo el ketchup que le he puesto en su mejilla.

+ Capulla.

Me ataca con cosquillas.

- ¡Oye, basta ya!

Gritó entre carcajadas.

- ¡Que te quedas sin sorpresa!

Lo amenazo. Creo que le puede la curiosidad, porque para en seco y me mira confundido.

+ ¿Qué sorpresa?

- Una que tengo para ti.

Digo fingiendo indiferencia y dándole otro bocado a mi hamburguesa. Me muero por saber como va a reaccionar.

+ Y me lo dices así, tan tranquila.

- ¿Cómo quieres que te lo diga, hombre?

+ Tu dices la palabra sorpresa y yo tiemblo.

Me hace reír, otra vez.

- ¿Y eso?

+ Pues que estas un poquito loca...

Susurra en mi oído provocando que se me erice la piel.

+ Y me encanta.

- ¡Joder, Gaby!

Me escondo en su cuello mimosa, y al tenerle relajado aprovecho de morderle suave, pero pega un brinco del susto. Me descojono.

+ Ya he dicho yo que estas loca.

Carcajea también. Me encantan estos ratitos tan nuestros. Risas, piques, arrumacos, no me podría imaginar que fuesen mejor.

- Hubiese querido hacerlo antes.

Me mira confuso.

- La sorpresa.

Aclaro.

- Ahora mismo, ya de ya...

Exagero.

- Pero con el tour tendremos que conformarnos con cenar basura y luego ir al cine... Y esto...

Cojo mi móvil para enseñarle el correo de la confirmación.

- Se ve aplazado hasta octubre.

+ ¿Florencia?

Pregunta asombrado.

- Una escapadita para los dos...