Capitulo 368

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Narra Malú

A: Me lo he pasado bien.

Sonrío sin apartar los ojos de la carretera. Ya vamos de camino a Madrid. Las nenas se han dormido nada más sentarlas en sus sillitas.

A: Aunque te veías triste.

- Que va.

A: ¿Es por Pepe?

Niego. Valoro los esfuerzos que está haciendo papá por tener mejor relación conmigo y por formar una con las chicas. Solo espero que no haga comentarios sobre los rumores de mi ruptura con Gaby, muchas veces le llaman a él de los programas de cotilleo y da toda la información que yo lucho por omitir. Le he advertido y quiero creer que no va a traicionarme.

- Echo de menos a papá.

Decido decir la verdad, omitiendo que hemos discutido.

A: Para que luego digan que lo habéis dejado.

- Siempre inventan cosas.

Me encojo de hombros.

A: Ya, pero es que me da rabia, porque antes de conocerte yo me creía mucho de lo que decían y seguro ahora la gente también lo hace.

- Gajes del oficio.

Resto importancia. Ya he aprendido a vivir con esto.

- Siento que tú tengas que pasarlo también.

Cada vez que salen noticias mías, Alba se ve atosigada a preguntas en el instituto. La gente verdaderamente no tiene criterio.

A: Ya les gustaría estar en mi lugar.

Quita hierro al asunto con su afirmación. Sonrío agradecida.

Narra Gaby

Regresan a casa sobre las once de la noche. Ayudo a Malú a bajar a las nenas y llevarlas a sus habitaciones, se las ha traído con el pijama puesto y solo hay que acostarlas en sus respectivas camas.

- Vengo desmaya' y huele que alimenta.
Dice entrando a la cocina.

A: Si no como algo ya, me voy a morir de hambre.

Sonrío orgulloso. He hecho bien en preparar una buena cena.

Nos miramos algo cortados, después del juego que nos mantuvo largas horas hablando durante la noche, no dejamos nada aclarado, por lo que ninguno parece estar seguro de cómo comportarse. Al ver que no parece tener la iniciativa, decido hacerlo yo. Antes de dejar que se siente  frente a la comida, cojo su mano para empujarla con delicadeza hasta mi cuerpo. Atrapo su carita entre las mías y la beso con desesperación.

Alba carraspea.

A: Igual mejor yo me voy a cenar a mi habitación.

Propone colocando su plato en una bandeja.

Malú niega ruborizada.

- No, vamos a cenar juntos.

Nuestra hija parece entender que necesitamos algo de privacidad, engulle sin hablar demasiado, acaba con prisa y se va dando las buenas noches. Nosotros recogemos en silencio. Ahora mismo lo necesito para juntar la valentía y encontrar las palabras apropiadas para hablar con ella y decirle la verdad.

+ Malú...

Solo el amor nos salvará (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora