Las circunstancias de una legítima villana (Finalizada)

Capítulo 148

Esta vez, no sabía cuánta sangre vomitaría Tuban, así que desató la ancha cinta que ataba su cintura.

Fue extraño.

Tuban no dijo nada y su rostro estaba cubierto por un largo y denso cabello, por lo que no pudo leer su expresión.

Aún así, sentí que Tuban estaba pensando profundamente.  Era difícil de describir, pero lo sintió.  En medio de esto, sangre seguía saliendo de la boca amordazada de Tuban.

Poco después, comenzaron a grabarse letras en la insignia de Stern.

Fue escrito con mucha más fuerza que antes.

«Porque ella»

—…….

«Porque ella es solo un clon»

—¿…..?

Cuando dudé de mis ojos.

Tuban, que no se había movido antes, cayó de espaldas.  Al mismo tiempo, sangre brotó de la boca de Tuban como un río desbordado.  En un nivel completamente diferente, la sangre me subió a los tobillos en un instante.

El problema fue después de eso.

—¡Ay! Tuban!

Justo cuando estaba a punto de cubrir rápidamente la boca de Tuban con una cinta o limpiarla.

Sintiendo una extraña presencia, miré hacia atrás reflexivamente.

Poco después, no tuve más remedio que abrir mucho los ojos.

—¡…….!

Fue porque algo que se parecía a Tuban se  arrastraba rápidamente.  El momento en que esa cosa misteriosa estiró su largo brazo e intentó agarrar mi tobillo.

Sus ojos brillaron de color blanco.

—¡Ugh!

Salté en un instante. El brazo que intentaba quitarse de encima no la soltaba.  Ambas muñecas fueron sostenidas con fuerza por alguien.

—…  ¡Seria!

Sus ojos se abrieron en respuesta a la voz que escuchó en su oído.  En un instante, la fuerza desapareció de su cuerpo.

—Lesche ...

Un momento después, me di cuenta que estaba en los brazos de Lesche.  Estaba apoyada sobre su abdomen y abrazaba su pecho como una almohada.  Al parecer Lesche me sostenía mientras dormía.

Sujetaba mi tembloroso cuerpo por completo.  La tensión que se había acumulado se derritió y se desvaneció como una mentira.  Al contrario de mi tensión relajada, el cuerpo de Lesche parecía más tenso de lo habitual.

Me limpié la cara con ambas manos y me di la vuelta. Entonces, envolví mis brazos alrededor del cuello de Lesche y enterré mi rostro en su hombro.  Su corazón latía muy rápido. Si bien el sonido de mi corazón se estabilizó lentamente, no fue el caso de Lesche.

—… Vi algo extraño.

—Algo extraño.

—Algo como un monstruo estaba tratando de agarrar mi tobillo ... Fue como una pesadilla.

Estaba temblando.  Después del incidente de la mina el otro día, había decidido contarle a Lesche todo sobre Tuban.  Porque pensé que era una cortesía básica para con este hombre que la apoyaba tanto.

—¿Durante cuánto tiempo dormí?

—Dormiste todo el día.

—…  ¿Un día?  ¿Eso es todo?