Lo que ocultan las palabras

CAPITULO 3

Tyrion me estuvo abrazando durante toda la noche y muchas veces lo oí reírse para luego llamarme mamá. No sé de dónde ha salido pero al dormir con él me he sentido muy bien, es como abrazar a un pequeño oso de peluche.

Pero durante la noche hubo un pequeño accidente, del cual no me di cuenta hasta que me desperté, Tyrion estaba llorando y temblando en mis brazos, tenía miedo.

-Papá se va a enfadar otra vez...-las lágrimas cae por sus mejillas- Mamá, no te enfades con Tyrion- me dio pena verlo de esa manera- No lo volverá a hacer...

-No pasa nada...-le digo acariciando su cabeza, Tyrion se había hecho pipi durante la noche- Solo tenemos que limpiarlo, nadie se va a enterar...-le sonrió y eso lo tranquiliza.

Lo lleva al aseo para darle un baño, Tyrion aprovecho para jugar conmigo, me hizo llenar la bañera para poder nadar, estuvimos así hasta que llamaron a mi puerta, Tyrion vino detrás de mi enrollado en la toalla.

-El señor Cross quiere que vayas a su despacho ahora y...-el mayordomo se queda mirando a Tyrion- ¿Qué hace aquí? El señorito Cross no puede salir de su habitación sin su niñera...- Tyrion abraza mi pierna al ver al mayordomo- Esa beta no sabe hacer bien su trabajo.

-Fue mi culpa, yo lo traje a la fuerza, ella no se dio cuenta...-el mayordomo se quedó sin palabras- Me gustan los niños, así que aproveche para jugar con él.

-Ven conmigo...-tira de Tyrion, obligándolo a separe de mí- Si el señor Cross se entera de que se ha vuelto a escapar se enfadara y te castigara...-eso hace temblar al pequeño, creo que no es la primera vez que le pegan ¿verdad?- Y tu date prisa, al señor Cross no le gusta esperar.

-Que me perdone su majestad...-digo de forma irónica, lo que hace enfadar al mayordomo – No era mi intención hacerle esperar.

Una chica joven viene corriendo hasta donde estamos nosotros, creo que es la niñera de la que estaban hablando el mayordomo, Tyrion sonríe al verla y hace que lo suelten para ir con ella.

-Tyrion...-abraza al pequeño- Pequeño gamberro, me asuste cuando no te vi en la habitación...-él se ríe al escuchar sus quejas- Pensaba que no podría jugar contigo hoy.

-Celia, he conocido a mamá...-no se había dado cuenta que estaba allí hasta que Tyrion me señalo- He dormido con mamá...

Tanto el mayordomo como la niñera se me quedan mirando después de las palabras del pequeño, es como si hubieran visto a un fantasma, no entiendo nada.

-Vístete rápido y ve al despacho del señor Cross...-el mayordomo corta el silencio- El doctor ya ha llegado.

Veo como se llevan a Tyrion, después tendré que buscar a Celia para darle la ropa sucia del pequeño, el mayordomo me espero en la puerta hasta que me vestí, en su cara se notaba que no estaba nada contento por hacer esperar a Nathaniel, pero no dice nada.

-Será mejor que no le hayas dicho nada malo al señorito Cross...-me amenaza acercándose a mí- Al señor Cross no le gusta que hablen de la madre del señorito...-agacha la cabeza y continua hablando- Se fugó después de dar a luz y abandono a los dos, el señor Cross tuvo que encargarse del bebé.

-Pegar a un niño no es educarlo...-le contesto del mismo modo con el que me habla- Tyrion le tiene miedo, me lo ha demostrado está mañana...-el mayordomo quiere contestarme pero no le dejo- No debería tenerle miedo a su padre ¿no crees?

No volvemos a hablar más, creo que se ha quedado sin palabras para defender a su querido señor, al llegar al despacho el mayordomo se va dejándome con Nathaniel y el doctor.

-Ya era hora...-mira el reloj y me lo enseña- Nos has hecho esperar demasiado.

-He tenido unos problemas antes de llegar, siento llegar tarde, señor Cross...-digo con retintín.

El doctor me hace acostarme en un sofá que estaba en el despacho de Nathaniel, él miraba todo lo que hacía, notaba el nerviosismo en el beta, pero no dije nada.

-Va a doler un poco...-me avisa antes de empezar la extracción de sangre- Presione durante cinco minutos...-se da la vuelta para hablar con Nathaniel- Mañana tendremos los resultados.

-Espero que sean buenos...-me advierte, lleva un buen rato con los brazos cruzados- No me gusta comprar objetos rotos.

Después de hacerme la ecografía me pide que me quite los pantalones para terminar con la revisión, me da vergüenza, Nathaniel no quiere quitar la vista.

-Podría tener un poco de privacidad...-me quejo, pero Nathaniel no me hace caso- Por favor, a usted tampoco le gustaría que lo vieran de esta forma.

-Estás en mi despacho, no me puedes echar...-no digo nada más, sé que no se va a ir.

El doctor intenta ir lo más rápido posible, al ver la vergüenza que estaba sintiendo, a los pocos minutos pude volver a vestirme, solo en ese momento Nathaniel quito la mirada sobre mí, ahora sí que me da privacidad el señor.

-No he visto nada extraño...-dice mientras guarda sus materiales- Este omega está sano, señor Cross, usted hizo una buena compra.

Minutos después el doctor sale y Nathaniel me pide que me quede con él, quiere hablar sobre lo que voy a hacer a partir de ahora, saca una carpeta de uno de los cajones del escritorio y saca las hojas que contenía.

-Quiero confirmar toda la información...-me pregunta de nuevo mi nombre, edad y subgénero, tiene miedo de que mi tío lo haya engañado- ¿Has tenido alguna enfermedad?

-Lo más grave que he tenido ha sido un resfriado...-le contesto, él deja de hacerme preguntas, así que yo aprovecho para hablar- Señor Cross ¿Tyrion es su hijo?

-Ya lo has conocido, pensaba presentártelo está tarde...-dice con indiferencia- Es mi hijo...

-¿Y quién es su madre?- el ambiente se vuelve pesado y la nariz me empieza a picar, Nathaniel me mira con rabia después de mi pregunta- Tyrion me confundió con su madre...

-Se marchó después de dar a luz, así que no quiero que mi hijo sepa de ella, si quieres actuar como su madre me parece bien, pero no hables de eso con Tyrion...

-¿Era omega?- asiente, pero no me dice nada más, está apartando su mirada de mi- Se fue de verdad, dejando a un bebé solo, debe ser un omega horrible.

Nathaniel me hecha del despacho y yo vuelvo a mi habitación, veo que alguien ha recogido las sabanas sucias y también la ropa de Tyrion, también me han dejado el desayuno.

Al terminar de comer veo unos pequeños ojos mirando desde la puerta, creo que Tyrion se volvió a escapar de la pobre Celia, la oigo llamarlo, mientras que él entra en la habitación.

-Mamá...-se tira a abrazarme- Te encontré.

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A Noah le interesa saber la historia del omega que tuvo a Tyrion y siente que no lo pasara tan mal en esa casa, odia la superioridad con la que vive Nathaniel y le hubiese gustado quejarse cuando hablo de él como si fuera un objeto. 

Espero que os guste :)

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