Casi una hora después, pudieron llegar al hospital, el omega aguanto como pudo el dolor, por suerte las contracciones no eran muy seguidas, incluso tuvo tiempo para tranquilizar al pequeño que estaba sentado a su lado, miraba con pena a su mamá, su hermanito le había prometido que no le haría daño a Noah, pero no estaba cumpliendo, Tyrion estaba muy enfadado con Skyler.
-Estoy bien – acarició su cabello con dulzura, la preocupación de Tyrion le parecía muy tierna- Pronto conoceremos a Sky y... - una contracción vino en aquel momento y Noah ahogo un grito, mientras esos pequeños ojos lo miraban llenos de lágrimas – Podrás jugar con él.
Llevaron a Noah a la habitación de las correas, para controlar el estado del bebé, el omega pidió que Jay lo acompañara, estaba sintiendo mucho miedo en esos momentos, necesitaba tener a su lugar seguro cerca, aunque fuera poco tiempo, Noah quería sentirse seguro.
-Noah...- el beta aguantaba las ganas de llorar, ver a su hermano sufrir no le gustaba, lo había visto demasiada veces los últimos meses- Estoy aquí, no te voy a dejar – el omega apretaba con la fuerza que tenía la mano de su compañero, mientras que Jay intentaba suavizar su dolor.
-Pronto serás tío y yo mamá...- estaba pálido, y con pocas fuerzas, pero no quería que hubiese silencio en esos momentos, quería escuchar alguna voz – Jay, podrías cantar para mí y Sky, por favor.
El beta acepto, Noah cerro los ojos para disfrutar más la canción, Jay no soltó su mano, cuando le venía una contracción a su hermano el beta la podía sentir a través de su mano, le daba igual que Noah le hiciera daño, le daba igual tardar más tiempo en ver a sus padres.
-No te voy a dejar, Noah – el omega sonrió, su miedo se estaba yendo poco a poco – Nunca más vas a volver a estar solo, ninguno de los tres lo estará.
Noah se durmió durante un tiempo, el beta estaba pendiente del monitor, no entendía nada, pero si escuchaba nada raro es que todo estaba yendo bien. Taku le envió un mensaje diciéndole que había llamado a Joe, ahora estaba los tres fuera, ya que el pequeño Tyrion estaba demasiado nervioso.
-Tyrion ¿Dónde está? – la voz de Noah era casi inaudible, no quería despertar a Sky ahora que estaba tranquilo- ¿Está bien?
-Lo han llevado a un parque cercano, no te preocupes, sigue descansando – cada vez sentía menos fuerza en la mano de Noah, también se estaba tornado más fría.
La doctor Blue entro en la sala donde se encontraba para leer lo que estaba en el monitor y comprobar la situación del omega, todo estaba bien, el bebé estaba perfectamente, aunque Noah estaba cansado.
-Esto te va a molestar un poco, pero tengo que comprobar cómo va...- la beta metió dos dedos en el canal de parto del omega, él se quejó al sentirlo, pero debía mantenerse quieto- Aún queda mucho camino, pero estás yendo bastante bien.
-Gracias – la doctora se fue, se quedaron de nuevo solos, Noah se sentía mal por haber estropeado la cena con la familia Fox – Lo siento, Jay...
-No tienes por qué sentirlo, mis padres están felices por la llegada del pequeño tesoro...- toco el vientre de Noah, sería la última vez que podría notar a Skyler de esa manera – Ellos me han dado fuerzas para ti, tus abuelos también, todos quieren conocer a Sky.
Noah le pidió a Jay que le diera un masaje en la espalda, así se notaba bien, el beta se detenía cada vez que venía una contracción, el omega no quería gritar, ahogaba los gritos para no asustar al bebé, Jay seguía con su trabajo poco después.
Las horas parecían eternas, comprobaron la dilatación que tenía el omega varias veces, pero parecía haberse quedarse estancado, las contracciones eran cada vez más seguidas y dolorosas, a Noah le salían las lágrimas por el dolor, pero intentaba mantenerse calmado, llevaban casi seis horas en el hospital, y el omega solo había dilatado tres centímetros.
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Lo que ocultan las palabras
RomanceNoah siempre se había sentido solo, apartado de la sociedad por ser un omega masculino, su tío siempre lo odio y no dudo en demostrárselo, su madre supuestamente se fue con su amante alfa y lo dejó con él. Noah siempre creyó esa historia y llegó a...